- ¡Emy! -Gritó una chica de largo cabello castaño.
La nombrada alzo su violácea mirada en dirección a quien le llamaba, primero sobresaltada y al final molesta.
- ¿Qué quieres? -La burlona sonrisa de la castaña le enfadó aun más, lo cual se mostró en la mueca que se encontraba en sus labios.
- Hey, tranquila gatita, no saques las uñas. -Guiñó a la albina mientras su sonrisa se alargaba un poco más por su propio comentario.
La representación femenina de la República de Islandia no sabría decir en que fatídico momento la hongkonesa le había tomado tanta confianza, tampoco era que a ella le desagradara esa confianza, pero en aquellos momentos en los cuales la asiática interrumpía su contemplación a la persona que amaba, se volvía probablemente el ser más exhaustivo e irritante de la existencia misma. Incluso Islandia comenzaba a creer que esos constantes llamados de atención por parte de la castaña no eran simplemente por querer hablar, mas bien, realmente quería molestarla.
Su mirada ámbar le delataba.
- ¿Sabes? -La castaña se acomodó mejor en su asiento-. Como que no eres para nada disimulada, te la comes con la mirada -Ling, la representación femenina de Hong Kong, apoyo su espalda contra el respaldo de una de las cómodas sillas de la sala de reuniones mundiales, observando con sus rasgados ojos avellana a la nórdica que se encontraba sentada a un lado; Un destello de picardía se asomaba en sus ojos-Que atrevida me saliste.
Las pálidas mejillas de la albina no tardaron en tomar un fuerte tono rosa, el cual ocultó con su cabello al agachar su cabeza.
Islandia agradecía el que lograran hablar libremente sin que nadie más que ellas mismas les escuchara. Como era de costumbre en aquella sala donde todos los países se reunían, todo era un desastre; Todos se gritaban entre sí, discutían de cualquier trivialidad menos de los temas relevantes por los que se reunían principalmente.
Cuando la albina separó sus labios para quejarse, su voz fue acallada con el grito de alguien más.
- ¡Ling Chen! -Una pequeña chica de cabello recogido en dos moños a los costados de su cabeza y ojos rasgados al igual que Ling se encontraba detrás de la castaña, molesta. La representación humana de China-. ¡Siéntate bien, aru! -Ling puso los ojos en blanco, lo cual pareció crispar a la chica-. ¡No me pongas los ojos en blanco, aru!
- Ahg -Suspiró la castaña-. Calma maestra. -Le resto importancia, volviendo su mirada a la nórdica, quien se había mantenido atenta a todo lo que sucedía entre las dos naciones asiáticas y ahora le observaba con burla- ¿Qué? -Preguntó con una mueca en sus labios, ignorando a la china.
- Creí que le dirías vieja, como la última vez. -Se cruzó de brazos a la altura de su estomago.
Ling solo atinó a separar sus labios y mover su cabeza a los lados, perturbada ante aquel recuerdo.
- O sea, ¿Estás loca? -Cuestionó la cordura de la isleña-. Casi me noquea con un Wok la última vez. -Emy no se contuvo de reír por el recuerdo y la castaña se llevó la mano al cabello, peinándolo en un acto de disimular su derrota-Además, no quiero acabarme su mecha. -Notó como la nórdica alzaba una ceja, por lo cual dejó de acariciar su largo cabello- ¿Qué?
- ¿No quiero acabarme su mecha? -Repitió- Que anticuada, Ling. -La albina negó con su cabeza. Cerró sus ojos cuando escuchó el golpe que la asiática le proporcionó a la mesa de madera, lo cual causó que sonriera, Justo en su ego, pensó.
- O sea, ¿Cómo? ¿Yo anticuada? -La asiática le observó, incrédula-. Por favor.
Las dos se habían desviado del tema principal por el cual la hongkonesa había "Molestado" a la isleña, pero eso no era tan importante.
Ling se conformaba con que Emy le prestara atención solo a ella.
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Your Attention. [Nyo!HongIce]
Fanfiction"Quería su atención, pero era demasiado lenta como para darse cuenta por sí misma. No era consciente de que me amaba a mí" • Hetalia - Hidekaz Himaruya. • Nyo!Hong Kong x Nyo!Islandia.