Cuando Menos Lo Esperas

Capitulo 2

Al día siguiente desperté con mucho dolor en el cuello, parece que había dormido cargada de un lado pero bueno no era tan grabe, me puse a revisar mi móvil como normalmente lo hago cuando me pregunto que silencio, a esta hora mi mama ya estaba tomando desayuno y gritando para que fuera a comer algo, en ese momento reaccione y salí corriendo a la habitación de mi mama, cuando abro la puerta ahí estaba, tranquila, con los ojos cerrados, sin respirar, sin moverse, parecía una muñeca de lo quieta que estaba y es ahí cuando me di cuenta que mi mama había muerto. Solo quería llorar y gritar, no pensé que iba a pasar tan rápido todo esto, no aguante mas el llanto y comencé a llorar y a gritar porque, porque, no entendía como se fue tan rápido, mi vida se derrumbó en un instante y me dije a mi misma, "mi vida cambio para siempre".

Después de unos minutos llame a mi abuela que vive a una cuadra de mi casa para que viniera a verme, cuando llego, empezó a llorar y me abrazo al instante, me hablaba al oído diciéndome que ya era la hora y que esta en un lugar mejor, tenia razón pero aun no estaba lista para que se fuera. Llamamos al hospital y en unos minutos llego la ambulancia para llevársela, vi como la tapaban con una manta color blanca, como la ponían en la camilla y como la subían a la ambulancia, los paramédicos me consolaban diciendo que ya era la hora, en mi mente solo decía ya era la hora a la mierda, yo solo quería a mi mama devuelta, poder hablar con ella, cantar, bailar, hacer tonteras juntas, digamos que quería hacer todo con ella y ahora que la veo solo digo por que a mi. Sacandome de mis pensamientos mi abuela me dijo que tomara mis cosas para irnos a su casa, yo no quería irme con ella, yo quería irme con mi mama pero los paramédicos no me dejaban así que no quedo de otra que irme con mi abuela.

Al día siguiente fue el funeral, había mucha gente a mi alrededor, la verdad es que mi mama era muy querida aca en la ciudad ya que siempre que podía ayudaba a la gente con la recompensa de que con una sonrisa estaba mas que pagada, así es le gustaba hacer feliz a la gente y eso me hacia feliz a mi. Mientras saludaba a la gente vi llegar a mi tía Eli, mi abuela le aviso de inmediato por lo que ella tomo el primer vuelo que hubiera desde Miami hasta Nueva Orleans. A penas la vi corrí hacia sus brazos y me puse a llora, ella lloraba conmigo pero no me decía ni una palabra pero eso me agradaba ya que toda la gente me decía que todo iba a estar bien y yo lo único que quería era que entendieran mi dolor sin ni una palabra, le dije gracias a mi tía y ella me respondió con un beso en la frente. El funeral fue muy largo ya que hablo mucha gente, yo no quise hablar no quería que escucharan mi voz echa pedazos así que solo escuche como las personas decían lo buena persona que era mi mama y con eso me basta y me sobra.

Después de un día muy largo, llegue a la casa de mi abuela y solo corrí a mi habitación a encerrarme en ella, llore por un buen rato y eso me alivia bastante, estaba perdida en mis pensamientos cuando mi abuela habré la puerta y me pregunta ¿podemos hablar?, a lo que yo le respondí que si, se sentó en la orilla de mi cama y me dijo:

Abuela: Mi niña bella, te amo con todo mi corazón y te admiro por toda la fuerza que has tenido en esta situación, nuestras vidas cambiaran para siempre pero tendremos el recuerdo de tu mama para toda nuestras vidas en nuestros corazones y eso esta bien

Mi abuela es muy sabia y por eso la amo mucho, la abrace y le dije que la amaba a lo que ella respondió yo igual, salio de mi habitación y me trajo un plato de sopa para que comiera, me dio un beso en la frente y se retiro de mi cuarto. Cuando termine la sopa, me levante de la cama y me puse mi pijama, eran las 8:00 pm, así es era muy temprano pero solo quería dormir, me lave los dientes, me acomode en la cama y quede dormida casi de inmediato pensando en como seria mi vida de ahora en adelante.