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El profesor de herbología, Neville Longbottom entró con los qué ingresan en primero. Rowan quiso reír ya que, entre ellos, había un chico muy alto para ser de primero, era Julen.
Todos los pequeños miraban el lugar maravillados ¿como no? Hogwarts era uno de los lugares más hermosos del mundo mágico, su techo estrellado y velas flotantes qué iluminaban todo el lugar lo hacían ver aún más elegante.
El sombrero seleccionador comenzó a cantar su canción, lo hacía todos los años. A muchos le parecía aburrido sin embargo Rowan creía qué era algo divertido e interesante, una buena forma de darle la bienvenida a los nuevos.
—Cuando yo los llame deberán sentarse en el taburete y les pondré el sombrero quién dirá a qué casa pertenecen.—habló el profesor Longbottom.
—¡Lewis, Arlett!
Una chica con sus mejillas muy rojas se sentó. Parecía avergonzada, quizá era muy timida.
—¡Ravenclaw!—la mesa aplaudió a su nuevo integrante y ella sonrió satisfecha.
La ceremonia continuó hasta qué solo quedó Julen.
—Y a pesar de qué no suelen entrar personas a más tardar, tendremos a un nuevo alumno qué viene desde la escuela Ilvermorny de Magia y Hechicería.—Habló la directora Mcgonagall desde su asiento.
—Hofmann, Julen.—el pelinegro se sentó en el taburete y el sobrero seleccionador ni siquiera pareció pensarlo, solo gritó
—¡Sytherin!—Rowan hizo una mueca, no le desagradaba Slytherin, simplemente quería qué el chico quedase en su casa para qué fuese mas sencillo hablar con el, después de todo, el pareció ver a Aiden.
—Que gran decepción.—refunfuñó Aiden haciendo reír a Rowan.
—Hola.—murmuró un chico a su lado y Rowan le miró. Sabía quién era, Louis Weasley; el único Weasley en Hufflepuff.
La comida, platos y utensilios aparecieron de la nada, se escucharon exclamaciones de asombro por parte de algunos de primero. A Rowan le dio felicidad saber qué ellos iban a pasar por lo mismo que ella hace un tiempo atrás, todo era tan nuevo, su primer año en Hogwarts fue el más divertido para ella.
—Hola.—saludó ella con amabilidad.
Las mesas tenían diferentes formas de consumo; en Slytherin solían servirse platos muy finos, muchos de esos platos eran cosas que los elfos solían cocinar en las casa de familias sangre pura. En Gryffindor habían bandejas en el centro con diferentes tipos de comidas para qué cada uno agarrase lo que quisiera, a diferencia de Slytherin, en esa mesa servían de todo. La mesa de Ravenclaw era igual qué la de Gryffindor pero la de Hufflepuff se dividía en dos, de un lado habían bandejas de comida libres de carne y pescados. Ahí se sentaba Rowan, ella era vegetariana.
—¿Qué comes?—preguntó el rubio. Rowan sonrió, era su cena favorita.
—Hamburguesas de avena y legumbres.—contestó. El se encogió de hombros, solo quería sacar un tema de conversación con la chica.
—Julen te mira.—habló Aiden en su oído haciendo que un escalofrío recorriese la espina dorsal de Rowan. La chica observó la mesa de Slytherin y efectivamente el chico la estaba mirando, alzó la mano en señal de saludo cosa que Julen correspondió de la misma forma.
—¿No crees qué es raro qué haya llegado en quinto?—preguntó Louis después de tragar su comida.
—Un poco, pero el es amable.—habló Rowan sin darle mucha importancia.
El resto de la cena Louis y Rowan hablaron, la verdad es que se habían hecho muy buenos amigos.
—Ya vuelvo.—dijo Aiden a Rowan. Ella asintió sin mirarlo, hubiese sido raro responderle ya que, bueno, no es muy normal hablar solo.
Aiden se acercó a las otras mesas. Ese era su pasatiempo favorito, husmear entre otras conversaciones.
—Miren a Louis.—comentó Dominique Weasley mirando a su hermano.—Si iba a buscar una conquista al menos que sea una chica más normal.
Sus amigas rieron y Aiden sonrió. Tomó un vaso derramándole el contenido en su cabeza. Dominique se levantó enseguida llamando la atención de todos.
—¿Quién fue?—preguntó furiosa. Aquella acción podría haber sido producto de un hechizo como lo era 'winguardium leviosa'. Miró hacia todos lados posando su mirada en una chica de Slytherin que reía descontroladamente.
La pelirroja se acercó a ella y tomó un vaso de agua derramándolo sobre ella haciendo que esta pare de reír y la mirara aún mas enojada.
¡Excelente Aiden! Ya causaste una pelea. Pensó Rowan con sarcasmo.
