Obra maestra.

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Una tos incesante rompe el silencio, Baekhyun esconde sus fríos pies debajo de la manta y calienta sus manos con el calor que emana la taza de café que sostiene. Se había resfriado por la lluvia de los días anteriores. Pasea su vista por el tablero en la pared a su costado, repleto de notas en papeles amarillos. Un enorme esquema con nombres y flechas. Baekhyun mira con detenimiento cada palabra hasta que se detiene en uno donde hace alarde una definición que todavía no podía entender, acompañada de la palabra "filia".

Se levanta de inmediato, tirando la manta y enfocándose en tal concepto. Baekhyun suspira y niega con la cabeza. Toma la carpeta, marcada con una etiqueta que dice "Archivo personal", y busca un número que después teclea rápidamente en la pantalla de su móvil.

—¿Hola? —una voz grave responde al otro lado, con música alta de fondo, y sonidos extraños de maquinaria.

—¿Chanyeol?

Si, ¿quién habla?

—Soy Byun Baekhyun.

¿Quién?

—Baekhyun.

No conozco a nadie llamado así, lo siento, estoy ocupado.

—Habla su abogado.

Oh, eso tenía que decirme, señor Byun. Me alegra que llamara, comenzaba a pensar que no quería hacerse cargo de mí.

Baekhyun gira los ojos.

—No lo estoy llamando para bromear, señor Park. Necesito verlo tan pronto como sea posible. —tose para aclararse la garganta, cubriéndose la boca.

No puedo verlo ahora, tengo asuntos pendientes.

—Primero que nada, explíqueme cómo es que no se encuentra detenido.

Oh, eso, pues verá, tengo una órden judicial por escrito de no salir de la ciudad hasta que se lleve acabo mi juicio, esperaba que me ayudara.

El ruido al otro lado se detiene bruscamente. Baekhyun oye que una puerta se cierra de golpe.

¿De qué quiere que hablemos, señor Byun?

—No puedo decírselo por teléfono. Para que podamos discutir su caso tenemos que estar reunidos.

Oye, Baekhyun, ¿no te importa la informalidad, o si? ¿Te gustaría saber cómo maté a mis amigos? —Chanyeol hace una mueca, y observa cuidadosamente la punta humeante del cigarrillo que acababa de encender.

—No, descuide, no me importa la informalidad. —Baekhyun intenta mantener la calma, ignorando el sudor que comienza a transpirar por la piel de su rostro— Y sobre eso, claro, podemos discutirlo otro día, ¿Cuándo se encuentra libre?

Hoy. —Chanyeol carraspea, y su voz suena seria por un momento.

—Me dijo que tenía asuntos pendientes.

Hubo un breve silencio.

Mentí, puede ir ahora mismo, estoy por irme a casa.

—¿Y su dirección?

Que pregunta tan estúpida, señor abogado. —la voz de Park suena irritada, y corta la llamada.

Baekhyun se sumerge en un estado de incomprensión y un extraño presentimiento se genera en su mente. Después, recuerda que en sus manos tenía la carpeta con toda la información personal de Park Chanyeol.




***



Sus dedos se aferran al cuero de su maletín, y sus ojos ansiosamente buscan algo en lo cual enfocarse para distraerse del dolor de cabeza, dirigiendo su mirada hacia el cielo nublado y las calles solitarias. Sacude la humedad de las mangas de su abrigo, se levanta de su asiento y baja del autobús. Baekhyun se detiene frente la vitrina de un puesto de periódicos, ya cerrado, y presta atención a los titulares del día.

Hybris | ChanBaek Historia CortaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora