100 años de soledad

3era generación

Los hijos de los hermanos Buendía fueron dos con Pilar de Ternera (Arcadio, de Jose Arcadio hijo y Aureliano José de Aureliano) y 17 con mujeres distintas (ojo, estos son los que se nombran en la historia).

Arcadio: antes de que Jose Arcadio se fuera con los gitanos, mantenía relaciones sexuales con Pilar. De una de las tantas, se concibe a Arcadio. Pilar decide dejarlo en la casa de los Buendía. Ursula no lo quiere, pero prefiere criarlo antes de no saber qué le pasará a su sangre. Lo cuidan y crían. Creció junto a Amaranta (que era de más o menos la misma edad). Aprendió la lengua de los indios antes que el castellano, ya que fue Visitación quien se encargó de cuidarlo en sus primeros años.
Al crecer y estallar la guerra, y una vez que el coronel Aureliano, su tío, se fuera de Macondo, se queda a la cabeza del pueblo.
Fue por lejos el peor gobernante que Macondo tuvo en su historia. Mandó a fusilar a miles de personas. Cualquiera que no estuviera de acuerdo con él, era castigado.
Su padre, Jose Arcadio hijo, había robado las mejores tierras. Contra el reclamo de todos, inscribió que esas tierras eran de su propiedad.
Fue en un bar donde declaró que él no era un Buendía. Para sorpresa de muchos que pensaron que se lo tomaría como insulto.
Hubo una ocación en la que trató de acostarce con Pilar, sin saber que era su madre. Para evitarlo, Pilar mete en la cama a un chica llamada Santa Sofía de la Piedad. Con ella tuvo una hija y unos gemelos. Frente al pelotón de fusilamiento, atrapado por los generales, declaró querer que su hija se llamara Úrsula y que sus hijos, si fueran varones, se llamaban Aureliano segundo y Jose Arcadio segundo, olvidando que también, de ser niñas, quería que una se llamara Remedios.

Aureliano Jose: En el fondo, nació de la lástima que Pilar Ternera sentía por Aureliano. Fueron relaciones que él tuvo por tratar de olvidar o dejar de atormentarse por Remedios Mascote. Fue cuidado por Amaranta, que durante mucho tiempo. Aumque ella lo veía como sólo un niño. Él se enamoró de su tía, ella lo rechazó. Fue  así como llegó al regaso de Pilar Ternera, quien leyó las cartas de una chica llamada Carmelita, que predecía un futuro de matrimonio e hijos. Fue asesinado a media calle, frente a la casa de Pilar Ternera, por haber insultado a un soldado.

De los 17 Aurelianos se hablará más adelante.