Lo que la vida nos juega

Advertencia: Los personajes de esta historia no me pertenecen, le pertenece a su queridísimo autor. Es mi primera historia y espero que lo disfrutéis.

Advertencia sobre la historia: Butch y Kaoru se conocen desde pequeños y van al mismo instituto el es muy popular al igual que ella el único cambio es que ella es medio cerebrito (bueno vale una cerebrito total pero bien guapa).

Bueno que empiece la lectura, si tenéis alguna duda o critica ponérmelo en un review los aceptare gustosa y responderé cualquier duda en la siguiente historia que haga.

Lo que la vida nos juega.

 

 

En una casa cerca de un río:

Un chico se levantaba de su sueño por culpa del despertador que sonaba encima de la mesita de noche situada al lado de su cama, perezosamente se levantó, cogió el despertador y lo apago con delicadeza, se sintió extraño había tenido un sueño, bueno más bien una pesadilla y en ella salía su mejor amiga Kaoru que iba dentro de un avión que según donde había visto en la pantalla de viajes iba a Estados Unidos. Kaoru era su mejor amiga y ese sueño lo había asustado bastante, ella siempre estuvo con él desde que se conocieron en el jardín de infancia, le ayudo a superar la separación de sus padres, habían pasado juntos 7 casi 8 años y con el tiempo empezó a sentir algo más que amistad por ella. En el instituto él era acosado por ser uno de los chicos más guapos de la clase y ella bueno no era acosada pero era la number one de la clase su cabello azabache y rebelde brillaba con los reflejos del sol, sus ojos verdes más claros que los suyos le parecían hermosos aun siendo solo una pequeña parte de toda su belleza, su piel suave y canela claro, era tanto bella como inteligente la habían calificado como la más lista del instituto. Dejo de lado aquella pesadilla y se encamino hacia el armario, lo abrió y cogió el uniforme para después meterse en el aseo de su habitación, después de vestirse bajo a desayunar, se hizo unas tostadas y un zumo de naranja. Después de desayunar miro el reloj que tenia colgado en la pared de la cocina y se asusto ¡eran las 8:40! faltaban 15 minutos para que empezaran las clases y tenía que coger el autobús para llegar bien, pero el otro día vio que los autobuses estaban en reparación y corriendo llegaría justamente en 20 min, salió por patas hasta el instituto. Llego tarde a su salón y se disculpo con el profesor por su tardanza, las chicas del salón suspiraron mientras el chico miraba fijamente el asiento de su amiga, su corazón dio un vuelco al ver que la chica no se encontraban, se sentó en su asiento y se paso toda la tarde evitando a sus amigos e intentando ir a casa de la muchacha, temía que en verdad su sueño le estaba advirtiendo de la ida de su amiga. Puso su mano en su cabeza tocando sus cabellos azabaches. Faltaba 1 h. para irse, se iría a comer a su casa y después iría a visitar a su amiga. Al terminar las clases se fue a casa y comió, después de reposar salió de su casa. Cruzo el río situado al lado de su casa y a lo lejos divisó la casa de su amiga, camino durante 4 minutos hasta llegar a la casa de su amiga, llego hasta la puerta y con el puño cerrado dio 6 golpecitos al trozo de madera rectangular, al otro lado de la puerta se oyó la voz de su amiga. La puerta se abrió  dejando ver a la azabache la cual le observaba con ojos de sorpresa y nerviosismo.

-¿Butch qué haces aquí?-Dijo nerviosa la chica mientras que con el pie intentaba esconder una caja. Butch la miro, extrañado por la actitud de la chica, se recompuso de su extrañeza mientras ella cerraba la puerta para quitarle el seguro a la puerta y salir afuera.                      

-Quería saber el por qué no habías venido al instituto-Dijo mientras hacía esfuerzos fallidos para intentar ver que escondía su amiga.

-Me encontraba mal, pero ya me recupere hace por lo menos…-La chica se puso a pensar para luego ver el reloj que reposar en su muñeca e inmediatamente respondió-1h y 45 minutos-Dijo sonriéndole.

-Te vas a ir –sentencio el muchacho, incluso el se había extrañado, no tenía pensado siquiera en pensar esa posibilidad, las palabras fluyeron sin su autorización pero parece haber acertado con su repentina afirmación. La chica lo miro sin poder ocultar mas su secreto, abrió la puerta apenada dejando pasar a su joven amigo. El entro cerrando detrás de si la puerta. Ambos se sentaron en el sofá en mantelado de la sala. Después de unos minutos sepulcrales Kaoru habló.

-Mis padres y mi hermano se van a vivir a Estados Unidos y tengo que ir-Dijo la castaña mirando al azabache que la miraba con suma atención- Al parecer allí ay una escuela que me vendría muy bien para seguir desarrollándome-Dijo mirando como Butch la miraba tristemente. Así que decidió alegrarlo como solo ella sabe- Peroooo si encuentro a alguien que me guste, me quiera y todo ese rollo de parejas ...me dejaran quedarme-Ella observo el cambio de expresión en la cara del chico. Eso era raro, pero sabía de sobra que la familia Matsubara no era una familia muy común que digamos.

-Pero que yo sepa tú no estás enamorada de nadie-Dijo el joven recordando como siempre que le preguntaba y le exigía saber si le gustaba alguien ella siempre contestaba la misma respuesta: “No”.

-Eso era antes hace poco me di cuenta que siempre me ha gustado una persona en particular y que siempre ha estado conmigo-Dijo Kaoru notando un leve calor en sus mejillas.

-¿Quién?-La pregunta del chico parecía más una orden a responder que una pregunta. En cambio el la miraba serio sintiendo como los celos lo comían por dentro, al no recibir ninguna respuesta pregunto con un poco mas de calma para no asustar a su amiga.- ¿Lo conozco?

-...Si-Esa fue la única respuesta que obtuvo el muchacho.

-¿Cómo es?-Pronuncio el chico, puede que los celos no le hiciesen pensar como el quería pero si ese chico era una buena persona y que pueda hacer feliz a su amiga lo aceptaría por su amor.

-Bueno pues es muy guapo, listo, amable, sincero,-Pauso un momento-sabes, lo que más me gusta de él es su sonrisa, siempre que me sonríe cuando estoy triste me hace sentir bien-Ella se sonrojo notablemente y se acerco a Butch, quien al estar atento de intentar averiguar quién era no se dio cuenta.

-Bueno por lo que veo lo quieres mucho pero yo tengo algo que decirte-Dijo nervioso, aun sabiendo que a ella le gustaba otra persona se le iba a confesar ya estaba harto de esconderlo-Tu-tu m-me-m-e gus-tas mucho Kaoru...-Dijo el muchacho balbuceando mientras que cerraba sus ojos a sabiendas que la respuesta de su amiga iba a ser “No”, pero nunca se espero lo que su amiga iba a hacer en este momento.

-Jijiji…valla sí que te habías tardado en decírmelo tarado-Dijo la chica riendo dejando al chico sorprendido-Tu también me gustas Butch.-Dijo. Vale si el chico estaba antes sorprendido ahora estaba sorprendido y aturdido.

-Pe-pe-pero no te gustaba alguien más?-Balbuceo sorprendido y aturdido.

-Tonto, pero es que acaso no te habías dado cuenta que eras tú?-Dijo mientras reía.

-Entonces el chico que te gustaba…era y soy yo?-Dijo inundado en felicidad.

-Claro que si hombre acaso no te lo he dicho antes, tú me…-Y antes de poder acabar Kaoru fue callada por unos labios aprisionando los suyos. Ella se tenso un poco pero después fue correspondiendo al beso dado por su "amigo", al cabo de unos segundos que para ellos fueron horas, se separaron. Tanto Butch como Kaoru se sentían amados por ese ser que tanto querían desde hace ya tiempo.

-Entonces Kaoru ¿Quieres ser mi novia?-Dijo el chico, Kaoru se quedo petrificada por la impresión pero al segundo de abalanzó encima de él.

-SIIIII…Claro que quiero Bucht!-Dijo la azabache mientras que con su abrazo asfixiaba al pobre Butch.

Ambos jóvenes se quedaron abrazados sin querer separarse pero al final se tuvieron que separar. Kaoru llamó a sus padres y les dio la noticia, ambos mayores se alegraron por su hija y les felicitaron, Butch hablo con ellos y les convenció para que ella se quedase a vivir con él los cuales gustosos les dejaron. Bueno pues ya estaba todo resuelto ahora estaban tanto Kaoru como Butch cogiendo cajas para llevarlas a su nueva casa.

-Valla, lo que la vida nos juega-Pronuncio el joven ya en su cama mientras gritaba un “Buenas Noches” para que su ahora novia lo escuchase desde la otra habitación.

Fin.