Prologo

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Parecía no poder ver, su vista se nublaba con cada segundo que pasaba, no podía diferenciar las manchas que provenían entre sus ojos, cada vez se hacían menos reconocibles para su propio ser.
Sentía una tensión extrema sobre su pecho, tal vez debería estar teniendo un desmayo.
Se insistía así mismo en seguir adelante, seguir arriba.
Escuchaba solo una voz, gritando en una desesperación profunda mientras que sentía su cuerpo moverse con brusquedad.

—R-Rea— Fue interrumpido por un gran dolor dentro de él que lo hizo cerrar sus ojos.

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Era blanco, más de lo que podría pensar haberlo estado, su pobre cuerpo yacía tendido sobre la nada que conocía hace tiempo atrás, sentía de nuevo aquella soledad que una vez tuvo en fallecimiento.
Una soledad, que lo calmaba.
Su cuerpo flotaba, el sentía estar volando en todo aquello, y le gustaba, cerró sus cuencas y suspiró.

—¿Que es todo esto?—Hablo a la nada, confundido por un suceso extraño.

Se incorporó con algo de dolor, pero era el mismo, su bufanda roja estaba en su lugar, sus prendas igual, todo estaba bien en él.
Paro de volar, según lo podría decir él mismo, y tener el suelo mientras permanecía sentado.
Se levantó con dificultad empezando a caminar por el lugar, solo escuchando sus propias pisadas arrastrando los pies con sus pantuflas.

—¿Acaso no pudieron salvarme del todo?— Preguntó a si mismo.

Recorrió al menos unos minutos observando a la blancura de todo ese sitio.
Convencido de que no encontraría nada, se recostó mientras sus cuencas se cerraban y descansaba de toda aquel cansancio que le generaba tanta luz.

Vitae -AfterDeath-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora