Tim

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"Con Euforia su corazon latía" cada respiración frenética y espacios largos de desesperacion atormentaban su mente, se añoraba compasión y piedad. El rostro horrorizado, la frente empapada de sudor, las piernas tambaleantes, la sangre helada,la mirada perdida... ansiedad! Pedir a gritos detenimiento,  el cese de la tortura y entonces ahora solo tener ganas de morirse.

-Muchas gracias Tim... por ese relato de miedo. Ahora bien quien quiere...《Sonó la campana》

La escuela finalizó, los chicos de mi aula se encontraban perplejos, que raro no me habian dejado terminar mi historia, pero obtendria una buena nota por ese escrito, ni uno se acercaba. Su actuar era interesante, pero demasiado normal a mi punto de vista, verlos alejarse se ha vuelto rutina, mi unica acompañante la música, nadie entiende nada y ¿cómo pedirlo? Solo dejarlo asi, ya que mi mente se divierte y pasa el rato  escuchando a la gente indirectamente.

Las tardes eran tranquilas, mi tarde lo era sobre todo, caminaba a mi casa, pocos autos, niños jugando sin pensamientos importantes; demasiado aburrido. Mi vida siempre ha sido diferente, saber que le gusta y disgusta a la gente ha abierto la facilidad a mi vida, tal vez no sienta empatía por estos, pero ¿qué más da? Sigo creyendo que no es necesario o bueno solo para mí.

La única noticia de mi interés era el asesinato,  por fin algo interesante y de mi agrado pasaba en este pueblo, me emocionaba tanto saber por que murió el señor Collins; no es que me gustara saber que el pobre hombre falleció solo era interesante saber por que. Pero  lo que de verdad quería saber era lo que pensaba el asesino, ¿que había en sus pensamientos?, ¿por qué lo hizo?, ¿qué conseguía con hacerlo?

El dia se volvió noche, en mi hogar solo vivíamos mi tio Walter y yo, mis padres fallecieron...dice que fue en un accidente; la verdad yo no recuerdo nada de aquel día y por desdicha se la pasaba bebiendo, "ahogar penas" le llamaba,sus pensamientos eran tristes y llenos de angustia, nunca encontré algo referente a mis padres en sus pensamientos, era como si el tambien lo hubiese olvidado, su mente era atormentada llena de recuerdos en los cuales se sentía culpable, recuerdos que no lo dejaban dormir como si fuese un mal tipo, tal vez fue un tipo con errores pero aún así el era la persona que me educó y crió, alguien firme, serio y no muy sonriente, una persona con mi respeto pues fue quien se preocupó por mi.

Por lo general llegaba tarde, trabajaba en un edificio como oficinista; no ganaba mucho pero era suficiente para ambos; me encontraba sentado en el sofá viendo a "Alf" en la TV, esperando a la llegada del tío Walter, era muy tarde, la farola tintilante ofrecía una luz intranquila a través de la ventana, los pensamientos cesaban con más frecuencia, las voces en mi cabeza se desvanecian formando un eco en mi psique, comenzaba a generar pensamientos de preocupación,el tío Walter aun no llegaba; tal vez ese era mi peor temor: el quedarme solo...Mientras mi preocupación aumentaba, comenzaba a formar teorías sobre el por que de su retardo, mi corazón latía mas rápido tras cada imaginativa, no puedo creer que solo así pueda sentir empatía, así que tomé la decisión de salir a buscarlo, tome mi bicicleta y pedaleé buscando, me dirigí a la oficina donde trabajaba, demonios! El lugar estaba  cerrado, ¿donde podría estar? Las voces en mi cabeza desaparecidas comenzaban a resonar,  las farolas de la calle daban un aspecto tétrico al edificio, me quede viendo a la nada; prácticamente a la otra calle, mi imaginativa comenzaba a hacer de las suyas, hace tiempo que no sentía la sensación de angustia. Mi respiración era cada vez más acelerada.

-¡tío Walter donde estas?!

Recorrí las calles obscuras visité el bar al que solía ir seguido,estuve en las estaciones de servicio en las que compraba cigarrillos pero aun así no di con este, el ambiente se hacía cada vez más frío, mi angustia aumentaba! Así que me detuve frente a una cabina de teléfono con temor a lo inimaginable me dispuse con poca tranquilidad a tratar de llamar al Tío Walter. Sintonizé la llamada, esperé varios minutos después del "beep"... no contestaba! Colgué. Me rendí, solo podría esperar, ¿qué más podría hacer? Tomé la bicicleta, pedalee, crucé la calle y llegué a la avenida "Psiquers" llamada así por que sobre la acera de esta calle esta el hospital psiquiátrico de Killen; un lugar bastante triste para ser verdad, al volverme me asombró  tanto el ver que por la avenida calle abajo se encontraba un hombre viendo directamente hacía a mí, por mi cabeza solo pasó la palabra "asesino", en ese momento pensé "Tim a ti te agradan los asesinos seriales,  es más los admiras, pero no querrás ser asesinado por uno de ellos" asustado tomé la bicicleta y pedalee lo mas rápido sin vacilar y me apresuré en dar vuelta en alguna calle.

Solo me di cuenta que le había dado una vuelta a la manzana,  mi nerviosismo me entorpeció tanto! Mi respiración aumentó,  mis piernas estaban tambaleantes, mi frente empapada de sudor; ese momento se parecía a uno de mis escritos! En la calle a unos cuantos metros de mi se encontraba bajo una farola parpadeante... Mi mente recibió un pensamiento de dolor acompañado de desdicha y mi estómago sentía revoluciones y disgusto, mi respiración se encontraba en aumento, mis pensamientos confusos e incapaces de generar imaginativas y solo espectar a lo que venía... a unos metros de mi se encontraba un hombre desplomado sobre la acera frente a un almacén,  no podía ser un indigente... el tiempo se pausó frente a mis ojos y al acercarme más solo presentía miedo, mi boca ya no producía saliva, mis acciones se volvían torpes, algo me pedía a gritos que no revisara... los pensamientos que generaban eco ayudaban a mi curiosidad, avance hasta encontrarme frente al tipo: un paso, dos pasos, tres pasos, me percaté que había pisado algo,  toqué la suela de mi tenis, sentí una sustancia viscosa y muy rápidamente llegué a la conclusión de que era sangre...
Mi corazón alterado advertía una noticia que no quería aceptar...
Giré al hombre, y quedé perplejo y observé estupefacto. El tipo portaba el rostro machacado, trate de identificarlo sin embargo el hombre prácticamente no tenía cara, sus mejillas tintadas de un color rojo carmesí , los ojos hundidos muy abajo de las cuencas, agujeros y heridas superficiales sobre toda su cara, la nariz torcida,  y un pedazo del tabique nasal sobresaliendo  teniendo un color blanquecino brillante, la perfección de la sangre fluyendo por la acera a altas horas de la noche, todo esto obra de un artista diferente. Había huellas y manchas de sangre marcadas en la calle dispersadas por todo el camino...  Estaba lo suficientemente sorprendido, no sabia si experimentaba miedo, todo esto me hizo dejar de pensar en mi tio ¿qué podía hacer? Detrás de mi vi a alguien a lo lejos,  se acercaba! Corrí a la bicicleta y pedalee lo mas rápido que pude, pasé por la calle Slay y mientras podía sentir una ráfaga de aire y voltear vi al señor Collins saludandome... caí de la bicicleta, ¿estaba fuera de la realidad?  Mis ojos se cerraron y no olvidaría esa escena ¿qué tan asustado estaba? Los árboles producían un eco que tranquilizaba el ambiente, no tengo ningún problema con el asesino, solo quería ver al tío Walter... por ese momento deje por fin de escuchar las voces en mi cabeza. Me levanté con las rodillas raspadas,  y pedalee con calma, mi preocupación cesó.

Llegué a casa, la TV se encontraban encendida, las luces apagadas, mi mente más despejada, encendí las luces y fui a mi habitación.

-Hijo...

-tio?

-¿qué haces?

-na...nada solo me levanté a tomar agua, mi aspecto dibujo una sonrisa y cumplió con el sentimiento de paz.

- Bien no olvides apagar la luz.

- si tío.

Jamás me sentí mejor, al fin pude dormir tranquilo...

En Tus PensamientosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora