Acariciando el afuera espero sentada en la rama de un árbol con paciencia y con esmero a que aparezca algo.
La alarma en la garganta de los gallos, ellos anunciaban que se acercaba, pero no se ve ni el manto de sus rayos, mis manos forman un telescopio, intento ver a lo lejos pero me enojo al ver que no se acerca, parece que no saldrá... Que decepción!
Lo esperaba con emoción...
Me pregunto si saldrá?
Tal ves sea muy temprano, quizás tiene miedo o sea porque está nublado que no aparezca ni a lo lejos.
Tengo tanta curiosidad y misterio.
Pienso que se quedo en otro hemisferio al otro lado del mundo y este sentimiento profundo que me vuelve infeliz, me hundo en un pozo sin fin.
Ya paso mucho tiempo, voy a darme vuelta porque me arrepiento de haberlo esperado y al hacerlo me siento una tarada porque el sol salia del otro lado y él me estaba esperando entusiasmado a que lo mirara y yo que miraba al otro lado esperando el sol, pero el día ya había comenzado.
¡Que equivocación!
Por lo menos ya no tengo que esperar,
pero que gran error...
Por lo menos para la próxima vez ya sabré donde mirar.
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desde mi punto de vista
RandomCuando escribo, todo lo demás deja de existir, es un escape que me permito para idealisar lo que se me antoje, es un mundo donde está en mis manos crear un nuevo destino.