Mr. Vólkov

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Yrina me había subido a su auto e hizo ir todo el viaje en el suelo del auto cubierta con una manta


-aquí no va a encontrarte- dijo mientras entrabamos al enorme departamento, tenía escaleras y un recibidor exageradamente grande

-ya entiendo porqué no te vas- me burlo y me da un golpe en el brazo

-deja de decir tonterías y ven, te prepararé algo para comer- 

- Yrina, ya llegué- Regan llegó y al verme frunce el ceño- ¿qué mierda está pasando?

-la encontré, te dije que no estaba muerta- dice y el me mira

-lastima- dice y sigue de largo a tomar algo de la nevera

-pero ocurre algo...-dice Yrina y él la mira con aburrimiento mientras bebe una cerveza, que hombre tan patan 

- ¿y eso que me importa? no debería ni estar aquí- dice y me mira- no necesito más problemas

- si hubiese tenido elección no estaría aquí- gruño y rueda los ojos

-bueno, dejen de pelear- interrumpe Yrina- Keren fue comprada por un viejo baboso

-¿qué?- Regan arruga la cara con asco-  sí, mejor si estuvieras muerta

-mijir si  istiviiris miirti- digo y me mira mal y le saco el dedo medio de mi mano izquierda

-basta, en serio- dice Yrina- Keren, Regan es quien puede ayudarnos

-¿ayudar? ¿quien dice que estoy interesado en ayudarte?- le dice  a Yrina- es el problema de tu amiga, suficiente con tenerte aquí- le da un toque en la frente haciéndola tambalear hacia atrás- no me  interesa

- al menos nos puedes decir cómo librarnos de ese hombre ¿no?- Regan me mira de pies a cabeza y siento  escalofríos

-olvídalo Yrina, este imbécil no sirve para nada- digo bajándome del taburete

-¿a  quién llamas imbécil? perra- Regan se acerca de forma violenta, Yrina está entre nosotros  y lo empuja, yo tomo un cuchillo que usaba Yrina para cortar lo que iba a cocinar

-acercate y te corto la cara, animal- digo e intenta sujetarme pero muevo el cuchillo al aire y corto la palma se su mano

-agh.., perra- se queja y comienza a sangrar

-Regan- Yrina mete su mano bajo el chorro de agua y me mira mal- Keren ¿qué te pasa?

-¿a mi? solo me defendí- digo sin soltar el cuchillo

-deja eso y busca algo para curarlo, las cosas están el baño


Después de un rato que Yrina curó la  mano del imbécil y me regaña a mi, nos sentamos en la sala donde Yrina se mantenía junto a Regan y yo lo más apartada que pude

-¿puedes ayudarnos? es mi amiga

- tu lo dijiste, es TU amiga- mira su mano vendada- me acaba de casi dejar sin dedos-se queja

-no fue para tanto, estoy segura que haces cosas peores y que si no te hubiera cortado, mi cabeza la hubieras estrellado en el mármol- digo y se ríe- no es gracioso, animal

-si sigue diciendo eso no la ayudaré- dice e Yrina me mira mal, hago silencio y suspira- primero ¿firmaste algún tipo de contrato?

-no, aunque el si me propuso uno y donde "compró" le dieron un documento como si fuera una mascota- digo

-es que lo eres- dice y frunzo el ceño- pero que bueno que no firmaste nada

-casi lo hago- digo riendo nerviosa

DangerousDonde viven las historias. Descúbrelo ahora