Prólogo

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Ayşe Hafsa Sultán

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Ayşe Hafsa Sultán

Manisa, Turquía, 1512

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Manisa, Turquía, 1512

Los pasos apresurados de Ayşe Sultán retumbaban en el conjunto con los gritos, su séquito de concubinas le seguían el paso, ella se dirigía a ver el alumbramiento de su segundo nieto, seguía el eco de los alaridos hasta el lugar, se adentró en la habitación y observo a la joven Mükerrem pujando, tratando de dar a luz a su próximo hijo, las gotas de sudor recorrían su frente, lloraba y gritaba, la sultana solamente se limitó a esperar, paciente, esperando al nacimiento de su nieto, la muchacha pujó por última vez y agotada se tumbó en la cama, el olor a sangre y esencias inundaba el ambiente, de repente se escuchó un llanto, las concubinas se miraron con emoción esa noche marcaría el destino de Mükerrem Hatun, y estaban ansiosas por saberlo, la madre cansada y ansiosa se intentó incorporar con dificultad.

- ¡Denme a mi hijo!-exigió está a las parteras con desesperación ordenándoles como si fuera una sultana, y solo se trataba de una simple concubina, una de ellas la miró de forma juguetona.

-Querrá decir hija...Hatun- dijo la que cargaba en brazos a la nueva integrante de la dinastía, la sonrisa de Mükerrem se desvaneció al instante tomó a la niña en brazos con lastima, miró a la sultana, cuyo rostro era serio y terso, ya se lo había advertido, sería su final, tras muchas pérdidas, no había dado un hijo al Şehzade Süleyman, su destino sería el olvido.

-Su nombre será Neslihan-dijo la sultana rompiendo la tensión que consumía la habitación, las muchachas de sus séquito se miraban entre sí, sabían que Mükerrem ya estaba descartada, y existía la posibilidad de que cualquiera de ellas fuera su remplazo, Ayşe se dió media vuelta, dejando a la Hatun afligida, con su bebe en brazos, esa sería la última noche de felicidad de Mükerrem...

Ayşe sultan salió de la habitación apresurada, ya sabía cuál sería su siguiente decisión por el bien de la dinastía.

- ¡Mehmet Agă!- llamó ésta al jefe de los eunucos del palacio, el agă llego rápidamente e hizo una reverencia.

-Sultana-dijo este con timidez

-Requiero una pluma y un pergamino en mi alcoba, preparen un mensajero, tengo que enviar una carta a Bajchasarái lo más pronto posible, antes de la llegada de Süleyman. -ordenó esta, su voz tenía un toque frío.

-Como usted lo ordene mi sultana.

-Por cierto...trasladen a otros aposentos a Mükerrem Hatun, los más lejanos a la alcoba de Şehzade Süleyman, no quiero que exista ningún encuentro entre ellos a partir de hoy. -ordenó, el agă asintió temeroso.

-Mahidevran Gülbahar será la solución a todos mis males-dijo está suspirando y perdiéndose en las penumbras del pasillo del palacio seguida de su séquito, el agă se quedó estático, se detuvo al oír el aquel nombre, sabía que nada bueno se avecinaba al palacio, que Alá los perdonara por todos sus pecados...

-Mahidevran Gülbahar será la solución a todos mis males-dijo está suspirando y perdiéndose en las penumbras del pasillo del palacio seguida de su séquito, el agă se quedó estático, se detuvo al oír el aquel nombre, sabía que nada bueno se avecinab...

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Hatun: Señorita, eran las esclavas que se encargaban del mantenimiento del harén, eran vírgenes y se regalaban a otros palacios

Şehzade: Príncipe, fue el título utilizado en el Imperio otomano para referirse a los descendientes varones del soberano otomano por línea masculina. Su equivalente sería el título de príncipe. Este título no tenía un equivalente femenino, ya que las mujeres eran llamadas solamente por su nombre seguido de la palabra Sultan, ej: Mihrimah Sultán.

Agăs: servían y protegían al harén y las sultanas, eran castrados completamente.

Hürrem: "El Ascenso"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora