Me despierto ,pero veo borroso todo, veo una gran mancha delante mía.
Me restriego los ojos y por fin veo, es Celeste.
-Celeste que haces aquí? que ha pasado?-
-Sara, me he quedado aquí porque estas en el hospital y no puedes moverte, te han roto las alas y te han quemado el brazo tía-
-si? ya decía yo que me dolía tanto...-
-jajaj si-
-cuando podre irme? Cristina y Elisabeth me necesitan...-
-Nah, no te preocupes por ellas, están bien con sus nuevos novios, fíjate si se hubieran suicidado como querían, ahora mismo no estuvieran haciendo al muchacho feliz-
-Ya tía, pero haber, todos pasamos por ese bache, yo también me cortaba, e intente suicidarme, pero viniste tu y me salvaste- La sonrió.
-Si tia, me acuerdo, aunque no quiero recordarlo, no me gusto verte lleva de rajas por todo lados-
-uff... Me duele mucho el brazo- Digo con cara de dolor.
-No te preocupes ahora llamo a la enermera-
Celeste llama a la enfermera y viene rapido:
Enfermera- que pasa?-
-Me duele mucho el brazo-
Enfermera-No te preocupes chiqui, ahora traigo la crema-
Se fue volando con sus enormes alas de color rojo puro.
Cuando estaba con los ojos cerrados oigo un golpe, los abro y veo a Celeste tirada en el suelo pocos metros de mi camilla.