Ya era de día y decidimos ir a ver a Cristina y a Elisabeth.
Cuando fuimos a su casa, nos abrieron pero estaban las dos llenas de sangre por los brazos y llenas de lágrimas.
-Amores, ¿Que ha pasado?- Pregunte.
-No lloréis por favor, contadlo- Dijo Celeste.
-Tenemos miedo- Dijo Cristina.
-Creemos que hay una especie de fantasma o no se que hay aquí en la casa y todas las noches escuchamos llorar a alguien y por el día vemos en los espejos con sangre que dice "corred"- Nos dijo Elisabeth.
- Venga pequeñas no tengáis miedo vale?- Dije.
- ¿Nos dejáis quedarnos esta noche aquí haber que pasa?-Pregunto Celeste.
-Si por favor- Nos dijeron las dos a coro.
Ya anocheció, porque nos pasamos jugando toda la tarde con las pequeñas y ya cuando llevábamos un rato dormidas empezamos a oír llantos por los pasillos.
-¿Lo escucháis?- Nos pregunto Elisabeth.
-si- Respondimos.
-Voy haber de donde viene, me acompañas celeste?-pregunte.
-no tía. no las voy a dejar sola, que alguna de ellas vaya contigo y así nadie esta sola- Me dijo Celeste.
- vale, ¿quuien viene conmigo?- pregunte.
-yo misma- Me dijo Cristina.
- Muy bien, acompañame - Sonreí.
Las dos nos dirigíamos al pasillo y no veíamos a nadie, pero me di cuenta de un pequeño detalle, en el espejo del servicio había una habitación mas, pero yo no veía nada .
En ese momento me acerque al pasillo a donde vi la puerta secreta dese el espejo, y me pare delante de ella, y Cristina a mi lado muerta de miedo, yo decido abrirla, pero Cristina no quería porque ella tenia muchísimo miedo.
-Se que tienes miedo cariño, pero necesitamos saber que hay, porque desde aquí vienen los llantos que escucháis, vale? Se fuerte princesa- La dije.
Ella se calmo un poco y yo abrí la puerta.
Vimos a un muchacho de mi edad mas o menos llorando, y yo entre y me senté e el suelo a su lado .
-¿quien eres?- dije.
-H..Hola, s...soy K...Kai, perdonad si os he molestado- Nos dijo con lágrimas en los ojos.
-¿porque lloras?- Pregunto Cristina.
-Es que di mi cuerpo a un espíritu y yo ahora estoy muerto.-
-¿pero porque nos ponías en el cristal con sangre "corred"?- Pregunta Cristina.
- Yo no era, es mi amo, el que tiene mi cuerpo, yo lloraba porque estaba aquí encerrado, llevo así mil años, hasta que por fin alguien ve la puerta desde el espejo, gracias, por cierto, ¿como os llamáis?-
-Yo Sara-
-Yo Cristina-
- perdonad mis lágrimas-
Cristina me susurra al oído:
-Se lo decimos a Celeste y Elisabeth?-
yo la respondí que claro, y kai nos acompaño volando claramente porque es un fantasma, y le presentamos a las demás.
- ¿Elisabeth?- Pregunta Kai.
-¿Kai?- pregunta Elisabeth.
- Esto no es posible- dijo Elisabeth.
-¿ os conocéis?- pregunte.
-si- Nos dijeron los dos a la vez.
-Fuimos novios en el instituto, hasta que el me engaño con una zorra llamada Ainhoa.- dijo Eli con lágrimas en los ojos.
-¿ como eres capaz de haberle hecho eso a mi mejor amiga?- le dije.
Yo le coji del brazo como pude y le metí en la habitación otra vez, y le encerramos, y tire la llave por la bañera.
Cuando volví a la habitación la di un abrazo a Eli y la dije:
- No pasa nada amor, ese tonto del culo no merece tus lágrimas, donde vive la Ainhoa esa que la mato- La dije enfadada.
Ella me sonrió.
- Pero chicas entonces volveremos a oír esos llantos y el amo ese suyo nos matara aunque yo quiero morir.- Dijo Cristina.
- eh eh eh, tu mueres y yo voy detrás asique que ese amo me oiga porque como os haga daño a alguna de vosotras es que se entera.- dije.
-os tenéis que venir a vivir con nosotras.- dijo Celeste.
- BIEN- nos gritaron las dos.
Las cogimos del brazo y nos fuimos volando hasta nuestras casas.