Capítulo 3: El juego de Lincoln Junior (parte 1)

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Lepel: - Hey Jack, necesito un favor. Cuida a los niños que traje. Que bajo ninguna razón salgan hasta que yo llegue.

Jack: - Esto debe de ser algo serio... Tu solo me llamas por mi nombre en estas situaciones. Pero tú me ayudaste. Así que haré todo lo que tú me digas. Esos niños estarán seguros aquí. ¿Verdad Dyango?

Dyango: - . . .

Lepel: - No sé si sentirme tranquilo o preocupado. Tu amigo a veces me desconcierta.

Jack era el dueño del hotel, este no era un hotel de tan buena nota en Royal Woods... a veces ciertos negocios se llevaban al cabo ahí. Dyango era un pistolero famoso en los círculos bajos, era un hombre sin moral ni principios, capaz de incluso matar a un bebé si sus clientes se lo pedían. Pero por algo le tenía consideración a Lepel, ya que ayudo a Jack en una situación adversa y si algo el admiraba era la solidaridad entre amigos.

Dyango: - Ve tranquilo mocoso. Esos críos que trajiste estarán aquí a salvo. Cualquiera que intente acercarse a ellos tendrá que pasar sobre mis armas.

Lepel: - Eso... me... tranquiliza... (OK no)

Jack: - Tranquilo niño.

Lepel: - Está bien, ahora pasare al baño. Tengo que disfrazarme para ver a "mi familia"... ¿Tienes el paquete que te encargue?

Jack: - Aquí esta.

Lepel: - Gracias.

Lepel entro al baño para arreglarse. Mientras tanto en la casa Loud, la discusión seguía y todas las hermanas querían ir en la búsqueda de Lincoln y Lana. Al final quedaron en ir todos. Lisa les dijo que estaban en los barrios bajos. Al parecer la noche la pasaron en un campo de remolques y ahorita estaban en un hotel. Hacia allá se dirigirían. No tardarían mas de 20 minutos.

Lepel inicio su "transformación". Para él era algo complicado ya que su cabello era rizado y el de Lincoln era lacio. Uso varias latas de fijador de cabello. Se puso una polera naranja.

El niño salio del baño.

Lepel: - ¿Cómo me veo Jack?

Jack: - Ese niño debe de ser alguien muy importante para ti. Te tomas demasiadas molestias para hacer esto. Le doy a tu disfraz un 9 de 10.

Dyango se acercó a él. A pesar de que Lepel sabía que no le haría ningún daño, su presencia era imponente. Dyango se arrodillo para estar lo más posible a su altura. Le miró fijamente.

Dyango: - Buen disfraz. Ahora ve y cumple tu misión y yo la mia.

Lepel: - Si. Gracias.

Lepel le dio un abrazo y salió del lugar. Él ya tenía un plan elaborado.

- Que ironía... Hoy ellos perderán a Lincoln y Lana... y estarán a tan solo una pared de distancia...

Atrás del hotel se encontraba una fábrica abandonada con varias bodegas y áreas de oficinas. Era un complejo algo grande y que se planeaba demoler, pero alguien lo compro y lo dejo tal cual... ese fue Lepel.

Planeo meticulosamente cada detalle de este día en particular.

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En vanzilla ya iba toda la familia. Lisa detecto que Lincoln y Lana se habían desplazado hacia la fábrica abandonada contigua. Antes era una fábrica de metales y la señal de los rastreadores oscilaba un poco. Lisa les comento que quizá deberían de separarse y le dio a cada hermana un rastreador y un comunicador. Quien encontrara a Lincoln o Lana debía de comunicarlo al resto.

Lepel consulto su tablet y vio que los Loud ya casi llegaban.

Lepel: - Hora de iniciar la misión "hacer sentir mal a las hermanas Loud y se arrepientan de lo que hicieron" y pensar un nombre más corto para esta misión...

Se dirigió hacia una oficina y el rastreador que extrajo de Lana lo coloco en un transportador. Ese iba hacia una zona en particular en la que él esperaba mandar a Lola. Ella merecía un trato "especial"

Lepel: - Lori... Lynn... Lola... ustedes tres merecen un trato especial. Me encargare de ustedes.

Una calle antes del lugar, Lisa sugirió que se estacionaran. De hecho fue frente al hotel. No era conveniente que Lincoln y Lana escucharan o vieran a vanzilla, pues podrían huir.

Desde una ventana Lana vio a vanzilla y quiso salir del cuarto, pero cuando iba a abrir la puerta recordó lo que Lepel le dijo.

- Tranquilizate Lana... Lepel te dijo que por nada salieras hasta que el regresara. Él es de la familia. Confía en él.

Miró a Lincoln. Estaba tan cansado y adolorido que cayo rendido y se durmió.

- No te preocupes Linky. Yo te cuidaré. Dentro de poco iremos con Lucky.

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- Así que piensan que ustedes pueden capturar a Lana y Lincoln. No importa el plan que tengan. Sean bienvenidas al juego de Lincoln Loud Junior. . .

- - - - - - - - CONTINUARA - - - - - - - - 

El violinistaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora