Capítulo 35

19 0 0
                                    

El último día del campamento había llegado. Ayer en la noche los maestros estuvieron agradeciéndonos por haber venido y que fuimos buenos alumnos en esta generación, éxito en nuestras universidades, etc. En el camión no pasó mucho, solo Eithan me invitó a comer en la plaza porque él no tenía comida. Llegué a mi casa y fui a mi cuarto. Estaba un poco polvorienta y decidí limpiarla aunque me diera toda la flojera del mundo. Era temprano todavía. Puse una lista de reproducción mientras hacía el aseo. Estaba tranquila hasta que sonó mi canción favorita Strongest de Ina Wroldsen. Empecé a tararearla pero llegué al coro y la canté como si estuviera con mucha gente. 

::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::
::NARRA EITHAN::
::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::

Fui a la casa de Jessica porque creo que se quedó con la gelatina que me iba a dar en el campamento, era buena excusa para verla un rato antes de que nos graduemos. Llegué y toqué la puerta. Esperé un rato pero no abría, volví a tocar la puerta. Ya que no quería abrir decidí entrar por mi cuenta, de todos modos ella me dijo que no había problema. La escucho cantar en la parte de arriba. Decidí subir y se escuchaba más la música. Ya estando arriba miro a la izquierda y solo había un cuarto con un montón de cajas y algunas maletas. Miro a la derecha y ahí estaba su cuarto. Estaba barriendo a la vez que cantando. La miro un momento, se veía linda. Después de un rato nota mi presencia y se asusta. 

-¿¡Qué haces aquí!? -Me grita.

-Vine un rato para visitarte -Le contesto y apoyo un brazo en el marco de la puerta. 

Ella se queda congelada unos segundos, se mira a si misma y corre a su cama para agarrar una almohada para cubrir su ropa. 

-¡Al menos avisa! -Dice y se esconde en su almohada. 

-Vamos, te ves bien con ese short y esa camisa. 

-¡Ese no es el problema! -Me mira muy sonrojada. 

Entendía lo que me quería decir. Sus manos estaban rojas. 

-Bueno, está bien. Voy a estar abajo. 

Ella asiente con la cabeza. Sus manos dejaron de brillar poco a poco. Bajé las escaleras y me quedé en el penúltimo escalón y me senté. Saqué mi celular, Ryan me había mandado mensaje. 

RY: Hola enano.
TÚ: Lol, ¿A que vino eso? 
RY: Ni idea, pero se escuchó bien.
TÚ: JAJAJA idiota. ¿Que paso?
RY: Voy a ir a la plaza por si quieres venir.
TÚ: Voy a ir con Jess en un rato mas de hecho, ¿Nos das un paseo?
RY: No
TÚ: Porque? ;(
RY: Voy a traer a Cris. 
TÚ: Entonces para que me preguntas si quiero ir...
RY: Porque tenía la intuición de que irías con Jess.
TÚ: Eres un maldito hijo de la gran...
RY: Pero si les doy un aventón con gusto
TÚ: Gracias (lo de antes fue mi autocorrector)
RY: :) 

Iba a seguir escribiéndole pero dejo de escuchar la música y Jessica empieza a conversar con alguien en su cuarto. 

-Sí, ¿Qué pasó? ... Tía, ¿Pasó algo? ... No...

Escucho un golpe. Me preocupé y decidí subir. Su celular estaba en el suelo ella estaba de espaldas mío paralizada. Se arrodilla al suelo de golpe. 

-¿Jessica? -Le pregunto. 

Sus manos empezaron a brillar de color gris. Su computadora se apaga. Me acerco y escucho en su celular una voz femenina que decía:

-¿Hermosa? ¿Estás ahí? Jessica por favor escúchame, por más que quieras no regreses aquí por favor. Te puede hacer daño...

De repente se corta. Su celular se apagó. Escucho que ella hace unos gritos cortados. 

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jun 23, 2018 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

DiferenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora