Méduse~ [JJK×BTS] || En Edición

Prólogo

--- ¡No puedes permitir que alguien vea eso! --- gritó enojado un hombre de edad avanzada.

--- ¡Eso es tu nieto! --- dijo llorando de impotencia una joven de piel cuál porcelana y cabello rojizo.

Su padre simplemente no la quería ver, mucho menos escuchar, y por más que le implorara la oportunidad de dejarla hablar, el hombre se negaba rotundamente.

--- ¡Esa cosa no es mi nieto! --- el enojo se había hecho evidente en su voz.

Su hija había deshonrado su apellido al acostarse con un bueno para nada, un simple extranjero que había quedado náufrago mientras se encontraba en un viaje y había llegado a las orillas de sus terrenos.

Su hija fue quien le encontró mientras paseaba por la mañana. Llamó por ayuda y sus hombres fueron a socorrerlos.

Se maldijo por haberle dado comida, ropa, una cama y un hogar. Si no hubiera sido tan considerado, su hija jamás hubiera sido engañasa por fantasiosas historias sobre el mar. Jamás se hubiera enamorado de un simple hombre náufrago y jamás se hubiera entregado por las dichosas palabras de "amor".

--- ¡Esa cosa, como tú le llamas, es mi hijo! --- replicó enojada, pero con lágrimas deslizándose desconsoladamente por su pálido rostro.

Abrazaba al pequeño de dos meses, el cual solo observaba a su madre sin saber ni comprender todos esos ruidos que llegaban a sus pobres oídos.

--- ¡Que no es nada mío! --- cansado de la insolencia de la joven, y furioso por la situación, sin pensarlo, alzó la mano y la estrelló contra la mejilla de la mujer, haciéndola caer de rodillas.

Ella se aferró con fuerza a su pequeño, evitando que esté cayera por el impacto, el bebé lloró por la repentina fuerza ejercida sobre su pequeño cuerpecito y la joven solo lo tranquilizó disculpándose sonriendo, haciendo al bebé dejar de llorar.

Sin embargo, miró con furia al hombre, él cual no se inmutó, simplemente endureció sus facciones.

--- Ya estoy harto de tu insistencia, yo ya no tengo una hija --- escupió con veneno en la voz --- así que esa cosa podrá ser tu hijo, pero jamás, JA-MÁS, mi nieto, ¡guardía!, Informa a todos que está mujer tiene prohibido volver a pisar estas tierras --- sentenció y dió media vuelta dándole la espalda a la chica.

--- Pero... Mi señor, está hablando de su hi- ---.

--- ¡Que yo no tengo hija! --- le interrumpió y lo miró con enfado --- ¡Has lo que he dicho, es una orden! ---.

--- Sí, mi señor --- contestó el guardia haciendo una pequeña reverencia.

La mujer miró a su padre por última vez, se levantó sin ayuda de nadie y caminó ella sola hasta las puertas de su "hogar".

Miró el carruaje que le llevaría hasta los fines de esas tierras y la obligaría a comenzar una nueva vida.

Pasaron tres días en los cuales solo se dedicaba a mirar por la ventana, alimentando a su hijo y hablando con él. No lloraría, no se derrumbaría, no frente a esos ojos profundos que miraban todo sin pestañear.

Esos ojos profundos que te absorbían el alma y guardaban millones de secretos. Esos simples ojos negros.

Editado 👀✨

¿Cómo están?

Después de tomarme mi tiempo con respecto a la historia, he vuelto.

Decidí corregir algunos errores y llenar algunos huecos que tenía la historia anteriormente.

Espero les gusten estos pequeños detalles y nos estaremos leyendo muy pronto.

Por cierto, ¿les gusta la nueva portada?, ¿O prefieren la anterior?

(Nueva portada)

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