II

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--- Jungkookie --- dijo su madre al ver como el pequeño mantenía su pequeño rostro cabizbajo --- ¿Qué sucede corazón? --- le preguntó.

--- Mamá... ¿Estás bien? --- preguntó  Jungkook viendo a su madre moverse con dificultad.

--- Claro que estoy bien corazón, ¿por qué lo preguntas? --- dijo tratando de sentarse sobre la cama, su rostro tornándose pálido y con un gesto de dolor que trató de ocultar a su pequeño, inútilmente.

Las semanas pasaron después del pequeño incidente con el venado, ninguno de los dos se lo contó a la madre de Jungkook, pues no querían que se preocupara. Había sido una suerte que Jungkook de alguna manera lograra controlarse en ese momento y el animal salió del trance, sin embargo, no aseguraban que contaran con la misma suerte en un futuro. 

Por desgracia, durante ese tiempo, la madre de Jungkook terminó postrada en cama. Él no entendía muy bien lo que sucedía, su Tita le había dicho que su mamá estaba enferma, y debía ser un buen niño para ayudarla a mejorar.

Desde ese momento aprendió junto a su Tita todas las labores del hogar, aunque al ser muy pequeño, era un poco difícil y agotador. Lo único que su Tita no dejaba que hiciera, era entrar a la cocina, temía que terminara lastimado.

Sin embargo, ese día era diferente, estaba a punto de cumplir siete años de edad, y su madre le prometió comer pastel y jugar junto a él y su Tita.

--- Jungkookie, ¿por qué tardan tanto en bajar? --- pregunto Tita entrando en la habitación.

--- ¡Tita! Mamá no puede levantarse --- dijo utilizando su fuerza para arrastrar a la mujer hasta la cama donde se encontraba su madre.

--- No sucede nada corazón, es solo que estoy... Estoy algo cansada, tranquilo bebé --- dijo mientras sonreía para tranquilizar a su niño de adorable sonrisa.

--- Jeon --- escuchó la voz de la mayor en tono de reproche. --- Ya basta, te he dicho que llamemos de nuevo al doctor, tu estado esta empeorando cada vez más --- susurró, queriendo evitar que el menor se preocupara.

Jungkook miró con sus ojos brillosos por las lágrimas retenidas y su madre llevó su mano hasta sus mejillas, intentando limpiar el rastro de las que ya habían escapado.

--- De acuerdo --- suspiró rendida. --- Pero ni una sola palabra sobre informar a mi padre --- le advirtió a la mayor, quién asintió mientras llamaba al doctor. --- Y tu mi corazón, no llores, tienes que prometerme no volver a llorar sin importar que --- Jungkook miró una vez más a su madre y sonrió al ver lo hermosa que era su sonrisa, siempre irradiando tranquilidad.

Jungkook sorbió su nariz y limpió su cara, abrazó a su madre y después sonrió para ella, quién hizo un sonido de aprobación.

El doctor llegó medía hora después, Jungkook se encontraba preparando el pastel con su Tita, para así dejar reposar un poco a su madre.

--- Jungkookie ve a despertar a tu madre, dijo que dormiría un rato, mientras atenderé las preguntas del doctor --- con asentimiento de su parte, Jungkook corrió a despertar a su madre.

--- Buenas noches --- saludó el doctor, Tita se encargó de hablar sobre la señorita Jeon, respondiendo algunas preguntas que el doctor le hacía, y explicando el por qué la joven no quería abandonar el lugar, pero su salud solo empeoraba. El doctor escuchó con atención, anotando algunas cosas, cuando de repente un Jungkook con los ojos llorosos y gritando bajó en busca de Tita.

--- ¿Qué sucede Jungkookie? --- dijo al abrazar al pequeño y acariciar su cabeza. --- No llores, recuerda la promesa que le hiciste a tu madre, ¿ya despertó? --- dijo tratando de consolarlo.

--- Tita... N-no... --- dijo hipando.

--- ¿Qué sucede? --- insistió alejándose un poco para ver su cara, pero no sus ojos.

---No despierta --- sorbió su nariz --- Tita... mi m-mami n-no... No despierta --- el doctor pidió permiso para ir a revisar a la joven, y Tita le indicó donde se encontraba la habitación.

Todos los presentes fueron con rapidez hasta dondde se encontra la madre de Jungkook y después que el doctor revisara el pulso en su muñeca, pidió que llemaran a una ambulancia con urgencia.

Jungkook tuvo quedarse en casa, pues el hospital no permitía a los menores entrar, así evitando que fueran inquietos y hubieran accidentes. Tita le dijo que volverían y todo estaría bien, a lo que Jungkook asintió, sin embargo, algo en su interior le dijo que fuera con ellos, pues una vez al cerrar la puerta, nada estaría bien.

Las horas pasaron, Jungkook se sintió vacio, mirando el trozo de pastel frente a él. Pensó en su madre y como le prometió no llorar, ya que él era un niño fuerte. Recordó la bella sonrisa de su madre, el como siempre irradiaba tranquilidad. Sabía que su madre no volvería, lo sabía al recordad la manera en la que le miró y sonrió al entrar en la habitación, todo antes de que volviera a cerrar sus ojos. Sintió su corazón encogerse, le faltaba el aire, tenía miedo y por primera vez, se sintió solo, pero aun así, sonrió débilmente. Cumpliría su promesa sin importar qué.

Mientras tanto en el hospital, Tita se encontraba llorando desconsoladamente, escuchando al los doctores hablar y abrazando el cuerpo sin vida de la que una vez consideró como su hija.

--- Enfermera, anote --- dijo otro doctor mientras tapaba el cuerpo que se encontraba sobre la camilla --- 1 de septiembre, a las 02:54 a.m., la señorita Jeon Sun Hee ha fallecido ---.

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Editado¹ 

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⏰ Última actualización: Jun 17, 2021 ⏰

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Méduse~ [JJK×BTS] || En EdiciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora