Capítulo Dieciséis.

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''Alejandro, plasta de mierda. Parate'' - prendí la luz del cuarto y él gruño - ''Ah no, te me calmas. Dentro de dos días es el día del padre y tú y yo le tenemos que comprar algo a nuestros padres'' - él se quejó.

''Mi papá es gringo, él no lo celebra el mismo día'' - metió la cabeza en la cobija para evitar que le diera la luz - ''Sam, brothercita. Apaga esa mierda''.

Me reí y la apagué.

Salí del cuarto y a los quince minutos tenía al señor vestido y listo para salir.

''Fuengo, vamonos''.

Agarre las llaves de su camioneta y fuimos a un centro comercial.

''Busca, tu sabes que tu papá celebra este día por ti y por tu álter ego venezolano. Además tu mamá nos va a patear, a ti por no comprar nada y a mi por no patearte''.

Les explico para que entiendan, la mamá de Ale es Venezolana y su papá es de aquí, tipo Ale es mitad gringo por eso el maldito se vino apenas el servicio de champagne en Plan B superó los cien mil bolívares.

¿Cómo lo conozco? Mi mamá y la mamá de Ale estudiaron juntas en la Universidad y bueno, son mejores amigas, mi tío John es panita de mi papá y bueno, típica amistad en pareja que hacen que sus hijos se conozcan desde siempre.

La comida es brutal, déjenme decirles.

Yo le compre a mi papá una camisa con un perfume de Antonio Banderas y mi amigo unos zapatos con varias corbatas.

Ya luego compramos cosas para hacer como un almuerzo con la familia y nos fuimos otra vez a mi casa.

''Pide pizza delivery, por fa''.

Le dije mientras yo agarraba la laptop para terminar un trabajo de la universidad.

Mi teléfono sonó, y era un mensaje pero como soy salada borre esa vaina antes de verla.

Sábado.

''¿Dónde está esta gente?''.

Pregunté viendo mi teléfono y Ale se encogió de hombros.

Estábamos en el aeropuerto esperando a nuestras familias.

''¡Samantha!''.

Escuche que me llamaron pero no encontré la voz.

''Mierda, loco. Esos son los franceses''.

Habló Alejandro y yo mire a los papás de los gemelos.

''¡Andre, Carlos!''.

Los abrace y ellos me apretaron.

Si, ellos son adoptados y por una pareja de hombres. Si, adivinaron, Carlos es venezolano y Pierre francés.

''¡Estas hermosa!''.

Me halago Pierre en francés y yo sonreí.

''Dichosos los ojos que te ven, Alejandro''.

Le dijo Carlos a Ale y él se acercó a saludar.

''Supongo que están esperando a sus gemelos''.

A Venezuelan In The University.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora