[ Vecinos ] || Y•M

[04]

Mordí mis labios saliendo la tienda, había decidido ir a dejar varias hojas de vida en algunos locales que en su exterior se veía la solicitud de nuevos empleados. Me había asegurado de recorrer el área para buscar diferentes empleos.

Caminé hasta una tienda para poder compartir unas golosinas y salí con la bolsa en mano, no tenía nada más que hacer así que me fui caminando serenamente hasta mi casa, no quedaba muy lejos.

Saqué una chupeta de caramelo y me la comí cuando vi que faltaba una cuadra, ya podía ver la entrada.

Mi teléfono vibró y lo desbloqueé para revisar las notificaciones, iba tan distraído que no me había percatado de un auto que iba a la par mía. El claxon sonó y volteé a ver sin expresión alguna el auto con mi chupeta haciendo bulto a una de mis mejillas.

-¡Hey!, Sube.- Yoongi me saludó con una mano en el aire y otra en el volante.

Le hice un ademán y señale la casa para darle a entender con mi expresión de confusión que estaba a pocos pasos de llegar a ella.

-Acompáñame si no tienes nada que hacer, anda.- Movió la cabeza y puso ahora sí las manos en el volante mientras frenaba.

Bueno, ya le conocía, podía confiar en ese aspecto hacia su persona. Me monté y puse la bolsa a mis pies luego de hacerla amarrado.

-¿Hacía dónde vas?- Cerré la puerta.- ¿Quieres una chupeta?.- Le ofrecí.

-Tengo que hacer las compras y no, gracias. Acabo de almorzar.- Sonrió amable mientras subía la ventana y arrancaba.

-¿Las compras?- Observé la puerta de mi casa cuando pasamos frente a ella y le volteé a ver. -¿Acompañarte a hacer las compras?.

- Bueno, no está mal ir acompañado de vez en cuando. Mi madre esta trabajando y decidí hacerme cargo de eso.

- Oh, cierto que vives con ella.- Asentí mirándolo, tenía una expresión seria mientras miraba los cruces para poder acelerar.

- El traje te queda. ¿Estabas trabajando?-Me acomodé en el asiento mientras lo volteaba a ver, aún mi chupeta estaba casi que completa.

- Se podría decir, estaba en una reunión.

Quise preguntarle sobre su trabajo, pero decidí dejar de hacer preguntas por el momento y esperé tranquilo hablando de cosas triviales con Yoongi.

Cuando me dijo que que vivía solo con su mamá pensé en unas compras sencillas y no de una magnitud de todo lo que Yoongi logró meter en el carrito durante casi aproximadamente una hora.

Pero bueno.

-¿ Quieres algo? Yo te lo compro.- Me sonrió mientras agarraba dos marcas de salsa de tomate, decidiendo por una luego de un rato.

-Oh, ya compré lo que quería antes, peo gracias por el detalle.- Sonreí de vuelta mientras guardaba mi teléfono en el bolsillo de mi pantalón.

Me miró serio luego de maniobrar tratando de poner la salsa de tomate sobre las cosas en el carro y caminó hasta la caja.

- Disculpe, Dejaré mi carro aquí para ir por algo más, ¿Le importaría si...?

El señor que iba delante de nosotros en la fila le hizo una seña de despreocupación, asintió para luego posar su mano sobre una esquina del carro y sonrió mirándonos.

- Yo puedo quedarme aquí.- Le dije extrañado.

- Vamos, aún faltan cosas.- Caminó hasta dar con las cestas y nos encaminó hacia el pasillo de los dulces.- Ayúdame a poner cosas en la canasta, mamá cumple años en unos días y le quiero dar una cesta.- Rió mirándome divertido.

- ¡Que tierno! Se ve que tienes una buena relación con tu madre.- Sonreí enternecido agarrando unos chocolates y metiéndolos en la cesta.

- Si, técnicamente siempre hemos sido ella y yo.- Dijo viendo detenidamente varios frascos de mermeladas acarameladas para terminar agarrando una de cada una.

Asentí mientras le ayudaba a agarrar varias golosinas y metiéndolas de una vez a la canasta. Cuando ya estuvo más que llena fuimos de nuevo a nuestro carrito, el cual ya se encontraba en a un lado de la taquilla.

Cuando ya estuvo todo listo, le ayudé a llevar el carrito con las bolsas hacia su carro, aún el día estaba claro, por la hora tenía previsto que mis padres ya estén en casa.

- Gracias, por acompañarme, claro.- Me miró mientras levantaba su palma y la dejaba en el aire.

Le alcé una ceja y movió un poco la mnoientras que con la otra cerraba la maleta del carro. Alcé mis hombros y choqué mi mano con la de el. Reí.

- Si, te llamaré también para cuándo me toque hacer las compras en mi casa. Hay veces en las que me mandan a mí a ello.- Abrí la puerta y me senté.

Cuando estacionó en su garage y nos bajamos, el abrió la maleta para empezar a bajar todo. Iba a agarrar unas bolsas para ayudarlo cunaod me dijo:

- No, tranquilo. Ve a tu casa, no olvides tu bolsa.- Asintió mientras se paraba recto tratando de hacer que me despreocupara.

-¿Seguro? Así terminas antes si te ayudo.- Señalé las bolsas.

Se quedó en silencio viéndome con una rara expresión y decidí dejarlo.

-Bien, hablamos luego.- Me despedí con la mano caminando con mi bolsita de dulces en el mano.

.

Me rasqué los ojos cuando desperté de mi siesta, luego de haber entrado mi leve suposición de padres en casa había fallado y me había encontrado con una casa sola y fría, así que decidí subir a mi habitación y pegar un rato de sueño.

Mientras bajaba las escaleras a la cocina noté las marcas de las cobijas en mis brazos. El motor del auto de mis padres sonó fuera y abrí la nevera buscando una botella de agua.

-¡Jimin! Hay un regalo aquí, ven por el.- Los tacones de mi mamá resonaron hasta la cocina y cuando entró vio mi cara de confusión, así que habló mirándome con una sonrisa y una tarjeta en la mano.- Esto venía con la canasta.- Me tendió una hoja.

"Mi mamá ya cumplió años ;)"

-La verdad no entiendo lo que dice, pero aún así hay un... Oh, ahí viene.- La escuché hablar mientras sonreía extraño mirando la bonita caligrafía sobre el papel.

Papá entró a la cocina con lo que era una cesta llena de los dulces que había comprado el para el supuesto "cumpleaños de la mamá". Estaba envuelta en un papel transparente y una hoja amarilla tenía mi apellido y nombre en ella.

Ay, que rico Puerto Rico.

Amo está historia, y más si está editada. ¿Y ustedes qué opinan?

PMS