Taehyung, un príncipe destinado a ser rey de la oscuridad, fue condenado a un castigo eterno por enamorarse de la persona equivocada. Tras años en un sueño profundo, despierta, descubriendo que su peor enemigo ha regresado, poniendo en peligro ambos...
En un mundo donde la luz y la oscuridad luchan eternamente, fui testigo de los misterios del universo. Las estrellas revelaron su esplendor y, al mismo tiempo, dejaron que la oscuridad me consumiera por completo. Ahora, sumida en una noche eterna, sin un solo rayo de esperanza que me rescate, escucho una música inquietante que me llama sin cesar.
"Dios mío, sácame de este lugar antes de que me empiece a gustar", susurro en mi desesperación.
Entiendo ahora que después de la luz siempre hay oscuridad, y bajo la tierra que pisamos yace un reino de fuego y lamentos, criaturas oscuras que buscan venganza. Un perfume a rosas envuelve mi cuerpo, llevándome hasta los extremos del cielo. Enamorarme de la oscuridad fue un error, uno dulce pero fatal.
La hija de la Luna ha regresado a este mundo, y los elegidos deben protegerla antes de que caiga nuevamente en los brazos del príncipe de la oscuridad. "Cariño, sálvate si puedes", advierto, pues él ha despertado y te buscará hasta el fin de los tiempos. Si vuelven a encontrarse, la sangre correrá.
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Sospechaba que una tormenta se acercaba, lo sabía por qué el cielo ha estado tan apagado últimamente, es como si estuviera triste sin un rayo de sol que quisiera hacerle compañía. Mi mirada no se apartaba del enorme ventanal que poco a poco era golpeado por pequeñas gotas de lluvia por más que quisiera mi atención estaba puesta en ver el cielo oscurecer y como las personas de la facultad corrían a diversas direcciones para esconderse de la lluvia que cada vez estaba cayendo con más ferocidad.
Por el reflejo de la ventana veo mi rostro, especialmente las dos bolsas oscuras bajo mis ojos. No he podido dormir en días, plagada por sueños extraños. En uno reciente, me vi encadenada en las profundidades del océano. La oscuridad y la sensación de sofocamiento eran tan reales que podía sentir la presión del agua impidiéndome gritar. Fue una experiencia tan desesperante que no puedo dejar de pensar en ella.
━ Nabi ¿Tú qué opinas? ¿Crees que sería de buena ayuda?. ━ La voz de mi amiga me saco de mis pensamientos, al parecer mi estado divagante no ha pasado tan desapercibido como yo pensaba.
Aparto la mirada del ventanal desconcertada hace unos cuantos minutos había dejado de prestar atención a la conversación que tenía con mis amigas ━ ¿Eh? ¿Qué sería de buena ayuda?
━ Si podríamos preguntarle al profesor Seung si nos puede proporcionar material del semestre pasado o si podríamos contar con la ayuda de un asesor de un semestre superior para la entrega ━ repitió Jisoo, una de mis mejores amigas de la facultad. Ajustó sus gafas sobre su nariz mientras me dirigía una mirada analítica. ━ ¿A caso no nos has estado escuchando?
━ No, sí he escuchado, pero me perdí un poco en la conversación, perdón ━ dije, mientras acomodaba un mechón de mi pelo detrás de la oreja ━ La verdad, me parece una buena idea contar con apoyo extra. Ya tenemos una idea, y con las asesorías, creo que a todo el grupo le gustaría. Aún tenemos tiempo para la presentación.
