De noche...

Tercera noche.

Noche tres intentando no llorar.

Y realmente creí que iba a lograr evitar verte, realmente creí que si hacia todo bien, nada iba a suceder tal vez porque así es como se debe sentir no preocuparse todo el tiempo por pensar en ti y concentrarme en algo que valore mi esfuerzo, pero no fue así, te vi, como siempre te veo perfecta pero al verte también comprove que la perfección es inalcanzable así como tu le eres para mi. Y ahí estabas tu, sin conocimiento mínimo de lo que pasa por mi mente y de lo que pasa por mi ser, ahí estabas tu, inocente destruyéndome con un hola y me destruiste, y de que manera. Solo por querer no saber de ti mucho y por no querer hacerle caso a mis amigos es que paso por esto pero ahora no tengo ninguna opción ni nada que hacer solo puedo recostarme y dejar que aquellas lagrimas imaginarias hagan lo que no hizo ningún pensamiento de mi cabeza... Volverse real.

Pero realmente no se como decirme a mi mismo en esencia que de nada me sirve, sirvió y servirá seguirte pensando ni seguir esperando que algo de mi imaginación llegue a convertirse en realidad porque al fin y al cabo no es necesario algo así en tu vida, cierto? Supongo que en tu vida tampoco nunca hará falta algo real, supongo que en tu vida nunca haré falta yo.