Peculiar. [bangtan au!]

cuatro, venganza.

— ¿A caso nunca vamos a salir de esta mierda de lugar? — Pregunto Yoongi pateando una piedra hacia una de las paredes del cuarto de detención.

Los años corrían como agua en un rio, Yoongi ya contaba con la edad de catorce años y Seok con la de quince. Mientras ellos crecían, lo conflictos consigo también lo hacían.

Desde el momento en el que se conocieron supieron que era el inicio de una buena amistad, aunque ninguno de los dos jóvenes supiera realmente lo que era un amigo. Irónica era su amistad, la diferencia de personalidad de ambos era inconmensurable pero eso no los detenía sino que los hacía más unidos.

Su primer conflicto es algo que ninguno olvidara, fue ese momento que emprendió todo.

🔙🔙🔙

Nadie solía acercase a Seok y mucho menos para insultarlo o causar alguna molestia, hasta que alguien tomo el valor para hacerlo.

—Oh miren, ahí está aquel maricon. — El chico ajeno a ellos, señalo a Seokjin. Era alto y pelirrojo.

Min observo con Seok rodaba sus ojos y fingía no escuchar, pero en el fondo lo lastimaba y Min se pudo percatar de el casi invisible dolor. Lo cual lo hizo enojar, quizá como nunca, su abuelo solía decir que tenía problemas de ira.

—Discúlpate— Dijo Min con voz firme mirando al pelirrojo, que a pesar de ser más alto no intimido a Yoongi.

—Jamás— Soltó una carcajada irónica. —Regresa de donde viniste, enano.

No aguanto más, soltó un puñetazo al pelirrojo haciendo que tambaleara mientras sus amigos corrían y gritaban, ese fue el comienzo. Los ojos de Yoongi oscurecieron cambiando su expresión a una sombría, dejándose llevar por la ira, siguió soltando golpes hasta que su contrario cayó. Se monto alrededor del cuerpo del chico alto y continuo, sus nudillos dolían pero eso no lo detenía.

Seokjin, mientras tanto solo miraba, no sintió pena ni lastima quizá todo lo contrario, sintió satisfacción, aunque golpear a alguien de manera tan salvaje era algo que él no haría.

Tomo consciencia, Yoongi se metería en muchos problemas así que decidió apartarlo. Inocentemente se acerco a él y acaricio su cabello, poco a poco detuvo sus golpes y su respiración agitada aumento.

—Ya está bien, Min. — Sonrió Seokjin y lo ayudo a levantarse. Lo había defendido, cosa que nadie había hecho por el, se sintió agradecido y cálido. Miro al chico, el cual estaba inconsciente, estaba horrible por tantos golpes. —Siempre he pensado que mereces morir con dignidad. — Camino hacia una jardinera cerca y corto unas cuantas flores, dejándolas en su rostro.

Se miraron y chocaron los cinco, sonrieron y a continuación se fueron, dejando a aquel chico tirado y sangrando.

🔜🔜🔜

Ese fue su primer problema, luego de ahí eran imparables y temidos, siempre estando en severos problemas, decidieron darles un cuarto de detención aparte, por miedo a que algún día llegaran a matar a uno de sus compañeros.

—Se paciente, Min. Pronto nos iremos. — Murmuro Jin, el cual miraba el techo, pensando en una manera de salir, o habían intentado infinidad de veces pero siempre los atrapaban.

—Sabes que si no salimos pronto, nos llevaran a un tutelar de menores. — Suspiro con enojo, luego de un largo silencio entre ambos, Min volvió a hablar. —He estado pensando en que haremos al salir... Quiero venganza, Seok. —

Seokjin se levanto, busco la mirada de Yoongi para saber si hablaba en serio. — ¿A qué te refieres? —

—Primero quiero buscar a tu familia, fueron tan malos contigo, te quitaron tu herencia y quiero que la recuperes. Quiero buscar a las personas que mataron a mis padres y a los tuyos, quiero que sufran los mismo que nosotros...— Sus ojos oscurecían, parecía que se convertía en otra persona cuando hablaba de esa forma, Min no era estúpido, nada estúpido. Al parecer de Seok, Yoongi era un niño inteligente, muchas veces se habían salvado de problemas gracias a la inteligencia de Yoongi, gracias a su habilidad de mentir y chantajear.

Esta vez, a Seok le gusto la idea, su sangre hervía con la adrenalina de tan solo pensarlo.

Como infinidad de veces, ambas mentes se conectaron, ambas pensando en dolor, sangre y asesinatos.