†PEQUEÑA‡INTRUSA†2//DIABOLIK LOVERS//EL PRINCIPIO DEL FIN

"可ピツォ２８"

El grito de la muchacha se escuchaba por toda la mansión, todos quedaron liberados, cada uno salio de los calabozos, algunos mas lastimado que otros trataron de acercarse.

—¡Me engañaste maldito gusano!.

La chica se acerco al niño que se encontraba aun inmóvil pero antes de poder llegar, una línea de fuego se interpuso entre ellos.

—Linda creo que la palabra que buscas es Serpiente.

—Es lo mismo, ambos se arrastran.

Hablo entre dientes la chica para tratar de acercarse nuevamente.

—Alto, no te acerques o mato al niño.

Una sombra apareció delante de ella se movió como pudo aunque se detuvo un momento, chasqueo la lengua y sus ojos se tornaron aun mas oscuros.

—Yume...

La voz de Ruki se escucho desde atras ella lo miro por el rabillo del ojo.

—No se acerquen, ninguno, o lo matara.

Hablo la ojicarmin.

—¡¡Yuu!!.—La rubia aun con túnica en el cuerpo trato de correr a su hijo pero un halon la interrumpió.

—¡Yui espera!.—Ayato la sujeto antes de dar otro paso.

—¡Yume!.

Gritó Yuu que trataba de moverse.

—Alejate de él, Yume, no te acerques.

Shu trato de acercarse a ella pero un golpe lo detuvo, la chica alzó ambas manos haciendo que todos los presentes a excepción de ella y aquel tipo salieran volando hacia la pared.

—Tch, Yume.

Aquel sujeto que se encontraba parado empezó a soltar carcajadas delante de ella mientras dio un paso para acercarse.

—Los escuchas, ellos te llaman Yume, dime niña ¿Estas dispuesta a perderlo todo de nuevo?.—Hablo.

—Me engañaste.

—No, te equivocas, tu misma te dejaste engañar, seré una serpiente pero tu misma te arrastraste a mi.

—¿Por que engañarme?.

—Estaba aburrido.

Ella sonrió de lado, para luego relajar su pose y verlo mientras subía una mano.

—Aburrido, entonces te gustaría jugar conmigo, no olvides, tengo mas poder que tú, puedo destruirte.

Hablo ella, el solo subió los brazos y golpeo su mano.

—Ese poder te lo di yo, también te lo puedo quitar, sin recordar que si te mato, perteneceras a mí.

—Yume alejate de él, ¡Escucha alejate de el!.

Grito Yuma.

—Ustedes si que son molestos.

Hablo el tipo que dio un paso para acercarse a ella, tanto quedando solo a unos centímetro de ella, toco su mejilla para luego bajar hasta su mentón y alzarlo.

—El alma de un ángel corrompido, es deliciosa sabes.

—El árbol, si algo me mata aquí pertenecere al árbol, y sabes no dejare que me sucede nada, debo pedir disculpas a alguien primero.

—Oh vamos, pequeño demonio, no creerás que tienes una oportunidad.

—Esta es la que tengo ahora no la perderé.