Cap. 3

314 25 4
                                    

B: Otra vez- con molestia en su voz- jamás lograrás alcanzarme si vas a este ritmo.

K: está bien, está bien, lo siento. Es que esto es un poco duro ya que nunca había entrenado tanto.

Y no era para menos, Kaminari llevaba dos días entrenando bajo la tutela de bakugou y lo primero que harían sería logar que Kaminari pudiera dirigir la energía hacia un punto fijo (básicamente lanzar rayitos como el buen pikachu que es) y le estaba costando mucho dado que debía canalizar la energía desde sus manos a través del aire hacia un objetivo, el cual a efectos de la práctica era un maniquí que la escuela les había proporcionado y que resistía altos voltajes. En ese momento Kaminari estaba concentrando la energía en la palma de su mano, cosa que no era problema para él, la parte difícil venía ahora que intentaba concentrarse en el objetivo. Cabe destacar que el problema no era Kaminari en sí ya que si el entrenamiento fuera sólo de quirks el ya habría dominado la técnica de lanzar rayos, el problema era que el maniquí debido a que este funcionaba con electricidad y se encendía cada vez que recibía dicha energía pero lo importante no era el mecanismo, sino la figura porque tenía dos enchufes que parecían salir de sus orejas y no dejaba de recordarle a cierta personita que hacía menos de una semana lo había humillado, recuerdo que se metía siempre en su cabeza y no le dejaba lanzar más que unas pocas chispitas que parecían burlarse de su fragilidad.

B: se ve que tienes un largo camino por recorrer, joven idiota.

K: cómo carajos quieres que domine esa técnica sin recordarla a ella?!??!

B: ya te dije, era el único modelo que tenían disponible para que entrenáramos- estaba mintiendo, bakugou sabía del incidente de jirou y pidió, de una selección de 400 maniquíes, al que más se parecía a jirou para entrenar, aparte de lo físico, lo emocional- si es todo lo que tienes, entonces terminamos por hoy.

K: ok- estaba exhausto.

~~~~~~~~~~~~30 minutos después~~~~~~~~~~

Kaminari se estaba secando el sudor de su frente con una toalla que tenía al cuello y se dirigía hacia el edificio que compartía con la clase, pero como estaba tan sumergido en sus pensamientos no se dio cuenta de que alguien se encontraba en su camino, ese alguien iba con prisa y corriendo, tampoco se había dado cuenta de la presencia de Kaminari y en un punto en que sus caminos chocaban, sucedió lo que tenía que pasar. Kaminari se sentó un poco adolorido después de que alguien hubiera chocado con él, instintivamente apoyó una de sus manos para levantarse pero era raro, el "suelo" estaba blandito e inconscientemente lo apretó, dando como consecuencia un gemido que asustó a Kaminari quien volteó su cabeza hacia donde había escuchado el sonido para encontrar a la chica que lo había derrotado en el Festival deportivo.

K: L-lo siento Ibara-san, no fue mi intención!!- decía mientras se arrodillaba pidiendo perdón.

Ib: ...

K: ahora si la he cagado- pensaba Kaminari mientras seguía arrodillado.

Ib: XD - sólo se reía Ibara ante la mirada atónita de Kaminari.

K: Que es tan gracioso?

Ib: nada, sólo que pareces un pequeño cachorro arrepentido, es muy lindo.

K: G-gracias?-dijo un confundido Kaminari que seguía sin entender el comportamiento de la chica raíz.

Ib: ven, te ayudo a levantarte- dijo extendiendo su mano.

Kaminari juraba que si Da Vinci o Picasso estuvieran vivos pintarían la nueva versión de La creación de Adán. Porque esa imagen era digna de los dioses.

K:- aceptó la mano de Ibara y se levantó del suelo, luego se sacudió el polvo de los pantalones- gracias... Ibara ¿Verdad?

Ib: sí, me llamo Ibara Shiozaki, y te he estado buscando desde hace días.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 26, 2018 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Tormenta SilenciosaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora