Ally Blake, Mi chica misteriosa. •[En Edición].

Llegada incomoda Capítulo 8

Capítulo 8: Llegada  incomoda
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Él viaje fue normal, no dormí en las siguientes 5 horas y los ojos me pesaban, sentía como él sueño me invadía, tome mis maletas y alce la mano para que el taxi se detuviera.
-Buenas noches joven.- Me dijo un hombre de unos 47 años.

-Buenas noches.- Me subí al auto después de hacerlo con las maletas.

- ¿Donde es su destino? - Me miraba por el retrovisor.

- La calle Gomez Morin #1967, Por favor.

- ¿Se dirige con la Señora Laura? ¡No me digas que eres su hijo! No te vi por años! Tu madre siempre preguntaba por ti!- Justo en él corazón.

- ¿Usted como la conoce y como me conoce?- Dije amable.

- Veras hijo, yo era maestro, y le dije clases a tu hermana, cuando habían juntas te veía junto s tu madre, tu hermana era una de las alumnas mas aplicadas y de mis favoritas.- Dijo melancólico, se me dificulto respirar por unos segundos. Estos aires tan llenos de recuerdos me hacían sentirme en casa y al mismo tiempo la peor persona del mundo.

- Ella siempre fue alguien de admirarse.- Me permití contestar.

- En dos años según sacan al culpable, al "padrastro" eso leí en el periódico, el caso de tu hermana fue muy reconocido y dolido para todos los que la queríamos mucho. Incluso su velorio asistió casi todos los de las colonias mas cercanas, solo faltabas tu.- Solo asentí y no dije ni una sola palabra, el hombre platicaba cosas que no les preste demasiada atención, era mas el nerviosismo que tenía de ver a mi Madre y esa casa tan bonita que en mi infancia era la mas hermosa del lugar, es difícil pensar que vives en una casa donde abundan los recuerdos de una persona que amabas con el alma y haberla asesinado.

Por fin después de un incomodo recorrido llegamos, suspire el aire de nostalgia que había en los alrededores, tome las maletas y camine hacia la puerta.
La observe unos minutos y toque lento, esta se abrió tan rápido y las lágrimas se sentían en mis ojos al ver a mi madre con una pequeña cantidad de canas en su cabello y con marcas de vejez en su piel, ella ya se encontraba llorando y tenia una mano en su pecho, me observo un rato y en un abrir y cerrar de ojos me abrazo, yo me quede inmóvil, las maletas se deslizaron de mis manos callendose al suelo y lento puse mis brazos en la espalda de mi madre, aun tenía ese olor a vainilla con la crema corporal que de niño odiaba colocársela, cerré mis ojos para disfrutar el momento de volver a ver a mi madre después de muchísimos años, las lágrimas se desplazaron por mis mejillas y unas cuantas en la ropa de mi madre la cual me abrazaba con fuerza entre sollozos.
-Ma~madre, no llores, no me gusta verte de esa manera.

-Hijo solo abrazame amor, quiero permanecer un rato mas asi.- Apenas pudo pronunciar por su vos cortada desde la garganta.
Continuamos unos minutos mas abrazados frente a la puerta, hasta que me soltó y se limpio las lágrimas, tomó una maleta entro a la casa dejando la puerta abierta permitiéndome el paso y comencé a hacer lo mismo que ella.
La casa se veía mas vieja y des pintadas, las flores que siempre regaba mi madre por las mañanas en los muebles ya estaba marchitas, cruzamos ma sala y subió por las escaleras abriendo mi habitación, la cual estaba tal y como la había dejado.

-No quise mover nada porque de chico no te gustaba que tocaran tus cosas- Dijo dándome la espalda mirando la habitación.

-Puedo ir a la habitación de...- Ella asintió y yo camine lento hasta la habitación de mi hermana.
Abrí la puerta lento mirando lo que esta me permitía, al estar totalmente abierta me di cuenta que ya no habla tapetes, los cuales habían con sangre, estaba el piso sin nada que lo cubriera.
Sonreí tristemente y cerré la puerta, baje las escaleras y me dirigí a ver las demás habitaciones de mi vieja casa.

Hola! Pues aquí la actualización, ¿mucho tiempo sin hacerlo no?
Los espero en él siguiente capitulo.
Tengo algo que decirles.
Hay una historia llamada
"¿Y si esta vez te fijas en mi?
Pueden ir a verla en mi perfil si gustan <3