Aveces es complicado colocar palabras nuevas en una hoja en blanco.
Aveces es complicado continuar cuando sientes que ya no puedes más.
Aveces es complicado buscar palabras que sean resistentes y no hirientes.
Aveces es complicado levantarnos, para así obtener nuevas huellas.
Aveces es complicado el poder obtener respuesta a tus preguntas cuando tu mismo no las tienes.
Comienzas a pensar que ya no tienes párrafos por escribir pero en tu mente rondan palabras que desean salir.
Comienzas a entender que nuevos capítulos debes escribir.
Comienzas a comprender que con nuevos capítulos podrás continuar.
Comienzas a escribir sin detenerte ni un instante, pero comienzas a notar que ciertas palabras se han ido borrando.
Palabras que tal vez no debieron ser escritas en un papel.
