WHEN MY DREAMS ENDS. ||LarryStylinson|| Omegaverse ~

Extra 3.

El tintineo de la campanilla instalada justo arriba la puerta de la cafetería "Made in home" les hizo saber a los dueños que tenían clientes.

El aroma que ahí se concentraba era delicioso.

Cole, Anna, Diana y Louis sabían que habían llegado al glorioso mundo de las deliciosas calorías.

Cupcakes de varios sabores, rosquillas glaseadas, pasteles de chocolate y fresas, hojaldrados crujientes con diferentes sabores de mermeladas por dentro. Jesús.

Diana estaba apunto de gritar por la emoción mientras que los demás no dejaban de pensar si podrían llevarse uno de cada uno.

"Buenas tardes" Soltó una omega de unos sesenta y tantos detrás del lindo mostrador color crema. "¿Qué puedo servirle?"

Los ojos de Louis se iluminaron. "Oh por Dios. ¿Becky?" Preguntó asombrado al reconocer a la mujer.

La omega lo miró confundida y con el ceño fruncido, pasaron unos segundos hasta que lo reconoció, abrió la boca en una enorme "O" por la impresión.

"¡Jesús Louis! ¡Hola!" La mujer salió detrás del mostrador para abrazarlo. "Cuando tiempo..." Louis la recordaba perfectamente, siempre tan amable, tan maternal, siempre le encanto el dulce aroma que desprendía; merengue horneado y crema pastelera.

"Si Beck, en realidad ya paso mucho." Mencionó con una sonrisa. Se alejaron y Louis miró a sus hijos que veían la escena con una sonrisa y algo confusos. "Te presentó a tres de mis hijos, Cole, Anna y Diana" los nombrados se acercaron para después saludar de beso y mano a la omega mayor.

"Dios Louis, ya son todos unos jóvenes." El castaño asintió orgulloso. "Estoy segura que Harry y Hendrick están encantados. Se parecen mucho a ellos."

"Si, todos mis hijos tienen sus rasgos" respondió mirando a la mujer sonreír complacida. "Incluso hemos venido porque no pueden olvidar tus baggles y rosquillas de maple."

Becky soltó una suave carcajada. "Puedo apostar que las rosquillas las pidió Hendrick. ¿No es así?" Louis asintió sonriendo. "Aún recuerdo que venía todos los días por dos piezas mientras que Harry prefería un rebanada de pastel de plátano..."

Anna miró con el ceño fruncido a Cole cuando a este le cambió su aroma, es olvidó por completo de la plática qué sucedida enfrente de ellos y lo observó.

Su hermano tampoco prestando atención, este miraba hacia la puerta, sus fosas nasales se cerraban y abrían mientras trataba de respirar con fuerza algo que ella no detectaba.

"¿Cole?" Lo llamó, más este ni siquiera se inmutó. "Oye, ¿Qué suce...?"

La campanilla de la entrada se escuchó nuevamente y los ojos del omega se encendieron, en ese momento Anna entendió perfectamente.

Un chico, demasiado atractivo, alfa, tan alto como sus padres, tez acaramelada y con su aroma de sol puro, entró con dos tambos metálicos de leche fresca.

"Buen día señora Peters, mi padre me dijo que necesitaba leche..." El chico alzó la mirada y tuvo el mismo impacto. Sus pulmones se llenaron de aquel esbelto y alto chico que lo miraba con un nudo en su garganta y las mejillas completamente enrojecidas ocasionando que sus ojos no tardaran en ponerse negros.

Sus instintos habían despertado. Se miraban como si no hubiera nadie más en la habitación, como si el mundo hubiera congelado y dejado de girar para concentrarse únicamente en ellos.

"Hola Zackary" interrumpió Becky sonriéndole al chico. "ponlos en la cocina cariño y puedes tomar los dos de hace unos días, ahorita te doy tu paga." Aquella extraña pero satisfactoria conexión se rompió cuando aquel chico bajo la mirada, aclaró su garganta y camino rumbo al lugar donde le indicaron. "Louis, cariño, necesito hacer unas cuentas rápido, mientras tanto elijan lo que deseen."