Sicks

Capitulo 1

Capitulo 1: Infectado

-Hey, Hey despierta.

-Desperté somnoliento y levanté mi cabeza del escritorio, William me había lanzado un pedazo de papel y me estaba llamando desde la puerta del aula.

-Deja dormir y vámonos, ya tengo hambre -Recogiendo mis cosas me levanté del escritorio, El profesor había salido del aula dando final a la clase, como siempre algunos se iban tras de él y otros se quedaban un rato a conversar.

-¿En qué momento me quedé dormido? -Le pregunte a William en nuestro recorrido por los pasillos del colegio. -No lo se, no habían pasado ni dos minutos de empezar la clase y cuando te vi ya estabas dormido.

Como rutina salimos del colegio y estábamos en la parada esperando el autobús, era hora pico, había un calor insoportable y una gran cantidad de gente caminando de un lado a otro.

-Oye Marc, ¿Que harás este fin de semana? -Me había preguntado mientras se jalaba el cuello de la camisa en un gesto de calor. Es verdad, no me acordaba que hoy era viernes.

-Nada en especial ¿Y tu? -Tengo que ir a Valencia a pasar este fin de semana con la familia de mi padre, y sabes cómo se pone si me opongo -El autobús ya había llegado.

Subimos y como de costumbre todos los asientos ya estaban ocupados. Todo era aburrido y monótono, en el recorrido del autobús hasta mi casa veía los mismos edificios, quioscos y calles de todos los días. De vez en cuando pasábamos por las calles en las que había llantas y basura quemada, restos de las últimas protestas.

De un momento a otro, gente al final del autobús había empezado a hablar sobre eso. Volteé a mirar a William, desde que lo conozco le ha gustado la política, recuerdo que siempre me hablaba de eso, ya en algún momento se dio cuenta de que no le voy mucho a esos temas y se rindió.

-Marc, ¿Me dijiste que cuando te graduaras te irías del país verdad? -Tú también deberías hacer lo mismo. -No puedo, ya sabes que mi deseo es cambiar este gobierno.

-Si ya lo sé -Me gustaría hacerte cambiar de opinión, dije para mi mismo. Me había llamado la atención una ambulancia y un conjunto de personas que apenas logre divisar mientras el autobús pasaba rápidamente por una calle.

-¿Que habrá pasado? ¿Viste eso? -¿Que cosa? -No, nada. -Aquí me bajo, nos vemos el lunes Marc -Me había dicho William sacándome de mis pensamientos, me despedí de el y lo vi caminar hacia su apartamento mientras el autobús volvía a arrancar.

Me encontraba en la puerta de mi casa, saque la llave de mi bolsillo y abrí la puerta. Como siempre estaba oscura y vacía. Me dirigí hacia la cocina y en el microondas había un almuerzo ya preparado, encendí el microondas y deje que se calentara.

Subí a mi habitación, tire el bolso a un lado de la cama y me lancé a esta. Me quede un rato viendo al techo. Me sentía cansado y tenia dolor de cabeza. Lentamente mis ojos empezaban a cerrarse y antes de que me pudiera quedar dormido me despertó el sonido del microondas al terminar.

Baje las escaleras pasando por la sala para ir a recoger mi comida y vi que la televisión estaba encendida. Al parecer mi papá la dejo encendida o través, se encontraba en el canal de noticias.

Por puro capricho me senté en una de las sillas del comedor desde la que podía ver la televisión, últimamente había cosas más interesantes que solo robos, protestas y asesinatos, estaban hablando sobre Estados Unidos y Corea del Norte, de cierta forma el tema me llamaba la atención , cuando ya sentía que estaba poniéndose interesante el tema, se fue la luz. En un gesto maldije a Maduro y subí a mi habitación, me acosté en la cama y rápidamente me quede dormido.