Un nuevo comienzo

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- ¿Piensas darle la oportunidad amar a alguna de las damas que estarían felices de poder llegar a tu corazón?

- No voy a mentirles, lo veo sumamente imposible.

- ¿Entonces no planeas tener una familia, hijos?

- Eso sólo si existieran los milagros – Dijo el joven volviendo a su seriedad, la cual hubo dejado durante todo el tiempo en la que la entrevista s enfocó en Candy. Karen hizo silencio mientras escuchaba por su auricular lo que le decía su productora, sonrió y entonces le preguntó

- ¿Crees en los milagros Terrence? – El la miro sin entender la pregunta, había pensado que se hubo terminado la entrevista y ahora surgía con esta tonta pregunta

- Nunca he visto uno...

- ¿Y si yo te lo muestro... Creerías? – Karen le hizo señas para que mirara a su espalda, él volteó la cara y entonces su corazón comenzó a latir, el tiempo se paralizó y todo los demás desaparecieron de su vista. Sólo estaba ella, Candy, la mujer que amaba y que nuca dejaría de amar. Entonces como por inercia se levanto de la silla y comenzó a caminar hacia ella. Tanto tiempo sin su pecosa y volver a verla le parecía un sueño.

Estaba más bella de lo que recordaba, había madurado y se había convertido en una hermosa mujer. Una mujer que con tan solo verla y estar cerca de ella le llenaba de sensaciones que nunca nadie antes pudo hacerlo sentir.

Ella le miró a los ojos y le sonrió, él seguía igual o más alto que antes, más imponente, más varonil, su mano subió a su cara y acarició su mejilla suavemente

- ¿Dime que esa mujer de la que hablabas soy yo? – Le pregunto Candy, el la miró y se perdió en sus verdes lagunas, sentirla tan cerca, sentir su mano en su cara era un sueño hecho realidad

- Sabes que siempre ha sido sólo tu... - ella sonrió y dejó que sus lagrimas comenzaran a salir expresando la alegría que sentía. El subió su mano a su cara y comenzó a limpiarle las lagrimas, sin embargo una dudo cruzó por su cabeza, duda que ella entendió y pudo leer en sus ojos

- Nunca me he casado Terry...

- ¿Pero el anuncio...?

- Fue una treta de Neil... Yo nunca podría casarme con nadie más... - Dijo ella llenando de felicidad el corazón del joven. Desde lejos sus amigas la veían y lloraban de felicidad, sus primos sonreían, conocían a Candy muy bien y sabían que nadie llenaría aquel corazón cuyo dueño era Terry. Karen, sus productores, técnicos y público estaban en total silencio, sólo escuchando a los enamorados quienes se reunían luego de tanto tiempo.

- Mona Pecosa – Dijo él y ella le sonrió

- Arrogante Engreído – Todos se miraron sin poder entender si era que estaban peleando o que les pasaba, pero entonces, el comenzó a acercarse a ella y sin perder el tiempo la besó, ahí delante de todos, olvidándose de que millones los veían a través de las cámaras y que a partir de ahora sus vidas cambiarían.

Ella colocó sus manos en el cuello del joven y dejó que éste le besará como tanto hubo soñado, como deseó desde siempre. Y ahora se convertía en una realidad. El la amaba, ya no era una ilusión o una fantasía, el le había declarado su amor en frente de millones de personas.

Los aplausos hicieron que se despertaran de aquel sueño de amor que ambos tenían y suavemente el dejo de besarla, pero sin dejar de tocarla con su frente y olerla y de suavemente decirle – Lo siento, olvidé donde estábamos – Ella le sonrió, bajó los brazos de su cuello y se colocó junto a él sin dejar de agarrar su mano.

La entrevista se hubo convertido en viral y muchos estaban tan pendiente que no podían despegarse de la televisión, incluyendo una Eleonor Baker, quien desde temprano estaba en su casa viendo con tristeza como su hijo aún sufría por Candy. Pero cuando la vio al final de la entrevista se puso de pie dejando caer de sus manos la taza de té que degustaba en ese momento. Colocó sus manos en su corazón y al igual que miles más de mujeres que veían la entrevista comenzó a llorar de felicidad.

Terry volvió a abrazar a Candy fuertemente y entonces le dirigió la mirada a Karen sonriente y con un gesto de agradecimiento, entonces la joven le hiso seña para que volviera a su silla junto a Candy, ya que como arte de magia hubo a parecido otra silla junto a la de él. El caminó agarrado de las manos de la joven y se sentaron sin soltarse.

- ¿Entonces Terrence crees en los milagros? – Volvió a preguntar Karen

- Si – Dijo él volteando a ver a Candy, quien se encontraba roja como tomate ante la mirada del joven actor y saber que estaba en televisión ante tantas personas – Creo en los milagros Karen.

- ¿Nos presentas a tu milagro? – Terry le hizo una pequeña seña que ella entendió muy bien, si algo tenían era ese lenguaje de hablar sin palabras y que al parecer aún continuaba intacto

- Mi nombre es Candice White Ardley, soy doctora en pediatría. Terry y yo estudiamos juntos hace años

- Y la mujer que le ha robado el corazón al señor Graham – Ella se sonrojó aún mucho más al escuchar esto, Karen le continúo haciendo preguntas sobre ellos, ¿que estaba haciendo ella? ¿Qué pensó cuando escuchó las palabras del joven? ¿Cómo hubo llegado y podido entrar? ¿Y lo que sintió al verlo?

- ¿Y que les espera ahora a ambos ya que se han reencontrado? – Terry apretó más fuerte la mano de Candy, la miró y sonrió como hacía mucho no lo hacía

- Sólo te puedo asegurar algo Karen – Dijo Terry – Deseo pasar el resto de mis días junto a Candy y que sólo espero que ella quiera lo mismo.

- Yo deseo lo mismo Terry...

- Gracias Terrence y Candice por esta súper especial entrevista el día de hoy, gracias a ustedes público por estar estas dos horas y 20 minutos junto a En agenda con Karen Klais. Nos vemos la próxima semana...

Fin!!!


Es un cortito, pero espero les guste!!!!

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