⁉No me recuerda💔

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Narra Alejandro:

¿Quién eres? - Aquellas palabras me rompieron por dentro y la confusión aumento en cuestión de milisegundos.

Y nuevamente, cuando pensé hablar, llegó el doctor y la enfermera.

Por favor, espere a fuera - Dijo el doctor. Y sin más, me cerraron la puerta en la cara.

Que acaso la vida siempre es tan inoportuna, que cuando piensas actuar te inmuta sin dejarte hablar - Pensé en mis adentros.

No me quedo más que ir a la sala de espera. Los nervios y las punzadas en el corazón por el dolor saber que él no me recordaba aumentaban.

Llegaron mi madre y Fernando.
Y mi madre me extendió un capuchino que tenía en su mano.

¿Pasa algo Ale? - Preguntó al observarme con la mirada al suelo.

Alze la mirada y mi madre me observó con preocupación - Mateo despertó mamá - Y no pude evitar soñar triste en mis palabras.

¡Eso es estupendo! - dijo mi madre - ¡Sabía que tu hijo se pondría bien! - Esta vez refiriéndose a Fernando, quien su felicidad no podría ser expresada en palabras - Pero, ¿Por qué estas así? - Y mi dolor volvió, sin saber porque, mis lágrimas empezaron a rodar por mis mejillas.

A veces una simple persona puede llegar a tu vida, y causar cosas que nunca nadie pudo causar. Y eso, es lo que me pasaba con Mateo.

Volví a alzar la mirada, pero esta vez corrí a sus brazos - Él no me recuerda mamá - Alcancé a decir antes de que mis lágrimas se convirtieran en un torrente. - Él no sabe quién soy - Los brazos de mi madre rodearon mi cuerpo estrechandome contra el suyo.

Tranquilo amor, todo estará bien bebé - Me dijo intentando apaciguar mi llanto - Ya verás que el te recordará, no es fácil olvidar un galán como tú - Su último comentario, como siempre ella intentando sacarme sonrisas.

Tal vez en muchas ocasiones las madres no puedan ser como una mejor amiga, la cual es tu confidente. Pero siempre será esa amiga leal, la cual esta para apoyarte y aconsejarte en el momento indicado.

******

Pasaron dos horas hasta que un doctor apareció en el pasillo.

¿Familiares del paciente Mateo Miller? - Dijo observando a todos lados.

Aquí estamos, contestó el padre de Mateo - Dígame doctor, ¿Qué tiene mi hijo? - Esta vez ya en un tono más alterado.

Tranquilo señor Miller, su hijo esta estable, pero aún lo tendremos en observación por precaución.

Pero, ¿Por qué no me recuerda? - Dije metiendo en la conversación.

Verán, el chico tiene una lesión en la cabeza por el accidente, esto causó pérdida de la memoria, lo bueno es que su pérdida es a corto plazo y su memoria irá mejorando gradualmente con el tiempo.

Aquellas palabras habían soltado el nudo en mi pecho, pero aún así, el no me recordaba.

Espero pasen un día espléndido - Dicho esto se marchó.

El pasillo se inundó en un silencio profundo, y nadie se atrevía a hablar. Hasta que Fernando rompió el hielo.

Gracias por acompañarme en estos momentos difíciles para mi - Acotó refiriéndose a mi madre y a mi - Pero como escucharon al doctor, no podremos verlo. Pueden ir a sus casas a descansar, los mantendré al tanto para que puedan visitarlo - Esta vez sentí que fue más dirigida a mi esas palabras.

Gracias Señor Miller, dije con una pequeña sonrisa.

Fernando, cuenta con nosotros, estaremos para ayudarte en lo que podamos - Dijo mi madre y luego de eso abandonamos esos fríos pasillos.

La lluvia empezo a caer, provocando que el agua resbalara en la ventana del coche de mamá. Y fue cuando pensé, por que se supone que me importe tanto él. Se supone que sólo somos amigos. Además, somos chavos.

¿Acaso él me gustaba? - Me cuestione a mi mismo.

En mi mente giraban miles de preguntas sobre Mateo y sobre mí.

Es como dicen: Simplemente llega alguien especial que sin darte cuenta pone tu mundo al revés, y llena tu cabeza de preguntas.

Pero algo si estaba seguro, lo había besado -Fue cuando recordé ese momento -¡Había besado a Mateo! - Y él, ¿se habría dado cuenta? - La inseguridad recorrió mi cuerpo. Pero mi madre me sacó de mis pensamientos.

¿Te piensas quedar en el auto para siempre? - Pregunto como siempre en su tono burlesco.

Entramos a casa y simplemente caí rendido en el sofá. Sin tener en cuenta nada, y observando la nada, de repente mi madre dijo:

Muchas veces creemos que la vida nos dice "no", cuando en realidad nos pide que esperemos...

La verdad no había entendido muy bien, pero no espere ha preguntar, ya que me había quedado dormido en el sofá.

Hola, espero les esté gustando mi historia ☆.
Se que no es la mejor, pero me estoy esforzando, se les quiere ♡.

Los colores los pones tú. (LGBT)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora