Me encontraba bebiendo chocolate caliente mientras miraba por mi ventana, era uno de los meses más fríos del año y lo único que quería era dormir pero me resultaba imposible.
Mi cabeza estaba rebosante de pensamientos, y esos pensamientos tenían nombre y apellido, Shawn Mendes, mi compañero de clase en la universidad y mi crush.
No conseguía conciliar el sueño, seguía pensando en por qué ningún chico se fijaba en mí, o al menos por qué Shawn no lo hacía. Había intentado de todo, ser linda, vestirme bien, usar mejor maquillaje pero nada servía, él seguía tratándome igual, como a cualquier otra compañera, y eso me enfermaba.
Pero que dramática estaba siendo, ya debería aceptarlo, no soy la típica chica en la que todo el mundo se fija, y como me decía mi madre, ya llegará alguien que me quiera como soy.
En ese momento me llegó un texto.
¡Dios! ¿Quién me escribe a la 1:00 am?
Pues mi mejor amiga, Danna.
DANNA🔥
Hey! Estoy con Vanessa en la fiesta de cumpleaños de Carter, ¿sigues sin querer venir?
No me vendría tan mal, después de todo, quería despejar mi mente. Entonces decidí responder.
Bien, iré. Debes venir a recogerme, no voy a embriagarme.
Danna y yo nos encontrábamos bailando, más bien, saltando en medio de la pista de baile con unas seis botellas de cerveza encima y claramente yo ya había pasado al lado oscuro, es decir, estaba más que ebria. Seguía moviéndome como sea, las canciones de Avicii siempre me ponían a saltar como loca.
La estaba pasando estupendo.
—Oye, mira quién viene ahí, ponte linda, tal vez viene a saludarte —me dijo Danna, y en efecto, así era, Shawn se acercaba a mí con una sonrisa en el rostro, algo que lo caracterizaba.
—Hola —me dijo Shawn sonriendo aún más, estaba tan nerviosa...y tan ebria que empecé a llorar —oye, ¿qué pasa? —Vi a mi mejor amigo detrás de Shawn golpeándose la frente al verme llorar, acto que me hizo llorar mucho más, no podía formular ninguna palabra y mi cabeza daba vueltas, veía como tres Shawn lo que me hizo reír.
Shawn miró a mi amiga y le preguntó si me encontraba bien.—Hola Shawn, lo siento, solo estoy, ya sabes, un poco drogada...digo ebria —y estallé en carcajadas
—La llevaré afuera, creo que necesita tomar aire.—Le dijo Shawn a mi mejor amiga.
—Claro.—Respondió ella.
—¿Qué me harás, Shawn? —Dije coqueta. Él me miró y sonrió burlándose del estado en el que estaba.
Llegamos hasta un parque y él hizo que nos sentaramos en el césped.
—Shawn, ¿por qué me trajiste aquí? ¿Vas a pedirme que sea tu novia?
—No, a menos que tú quieras —miraba su celular, ¿por qué mierda me trae si no va a prestarme atención?
—Shawn, quiero besarte —estaba segura de que me iba a arrepentir en la mañana.
—No sabes lo que estás diciendo.—Dijo riendo.
—Hablo en serio.
—Tambien yo.
Guardó su celular y me abrazó.
—¿No quieres que te regrese a tu casa?
—No, quiero estar aquí contigo.
—Está bien.
—Voy a decirte algo ahora porque probablemente cuando esté sobria no me atreva.
Se rió e hizo una señal para que continúe, él aún me tenía pegada a su pecho.
—Es simple, me gustas.
Cerré los ojos, tenía miedo de su reacción.
—Voy a decirte algo ahora porque probablemente cuando estés sobria no me atreva —los latidos de mi corazón se aceleraban más cada segundo—Es simple, también me gustas —me separó de su pecho para mirarme a los ojos esperando alguna reacción supongo.
Se acercó lentamente a mí y nos unimos en un tierno y corto beso. El mejor que me han dado.
—No esperaba eso —le dije.
—Tampoco planeaba esto, créeme —acarició mi mejilla.
—¿Ahora qué? ¿Somos solo amigos?
—Seremos lo que tú quieras que seamos.
XXX
NO SÉ QUÉ PENDEJADA ACABO DE HACER LMAO.
Prometo algo mejor para la próxima.-Love, V.