La Heredera de los Lestrange

El Torneo de Los tres Magos

Cuando Polaris despertó a la mañana siguiente, había en el ambiente una definida tristeza de fin de vacaciones. La copiosa lluvia seguía salpicando contra la ventana mientras se ponía los jeans y una sudadera. Se vestirían con las túnicas del
colegio cuando estuvieran en el expreso de Hogwarts

Bajo con su equipaje ya echo para que su tía la llevara a tomar el tren, un taxi ya las esperaba fuera de la casa donde se despidió de su tio y su prima Nymphadora.

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Ya en el andén 9 3/4 se subio en el tren y se despidió de su tía Andrómeda, caminaba buscando un compartimento donde sentarse. Vagando por los pasillos la verdad buscaba un vagón que estuviera vacío por que la compañía de la gente la ponía un poco incomoda por eso no tenía amigos.

-Polaris- le dijo una voz de hombre- quieres sentarte conmigo.

Era Draco Malfoy quien le extendía la mano invitandola a sentarse con el.

-Bueno...yo preferiría estar sola- contesto un poco apenada.

-Vamos, no me harías un desaire- le lanzo una tierna risa.

-Esta bien- dijo ella y tomo su mano.

La dirigió hasta un compartimento donde había dos chicos y una chica, Draco le ofreció sentarse a lado de la ventana, ella se sentó y miro a los chicos que la miraban con curiosidad.

Chicos les presento con gran orgullo a Polaris Lestrange, mi prima- la presento como si ella fuera su más grande orgullo-Polaris ellos son Crabbe, Goyle y Pansy.

Polaris se ruborizo y los saludo algo apenada.

Siéntate, por favor- dijo Draco- te veo incomoda Polaris te pasa algo.

No, solo...bueno es que parece que estuviste ignorando mi presencia por los últimos tres años y ahora te portas asi, bueno puedo preguntar el porque de esto.

Somos familia- dijo mientras la miraba con ternura y tomo su mano- y ahora más que nunca debemos estar juntos.

Polaris paso un lindo viaje a Hogwarts junto con Drago y sus amigos hasta Pansy le había parecido agradable cuando no se comportaba  como una maldita.

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La larga procesión de carruajes traqueteaba por el camino que llevaba al castillo de Hogwarts, Polaris había subido a un carruaje solo con Draco dejando a una muy disgustada Pansy atrás, los carruajes atravesaron las verjas flanqueadas por estatuas de cerdos alados y luego
avanzaron por el ancho camino, balanceándose peligrosamente bajo lo que empezaba convertirse en un rió tempestuoso, pegando la cara a la ventanilla, Polaris podía ver cada vez más próximo el castillo de Hogwarts, con sus numerosos ventanales iluminados
reluciendo borrosamente tras la cortina de lluvia.
Los rayos cruzaban el cielo cuando
su carruaje se detuvo ante la gran puerta principal de roble, que se alzaba al final de
una breve escalinata de piedra. Los que ocupaban los carruajes de delante corrían ya subiendo los escalones para entrar en el castillo. También Harry, Ron, Hermione saltaron del carruaje y subieron la escalinata a toda prisa, Harry observó que Polaris se había bajado de el carruaje con Draco y sintió una pizca de celos.
Ayudada por Draco, Polaris subió la escalinata que encontraba resbalosa por la lluvia, se hallaron a cubierto en el interior del cavernoso vestíbulo alumbrado con antorchas y ante la majestuosa escalinata de mármol que conducía al gran comedor.

En el gran comedor el cielo igual dibujaba la tempestad que afuera caía Polaris y Draco tomaron asiento juntos, el gran comedor se lleno de un gran barullo, la ceremonia de selección de las casas apenas había concluido y todos esperaban el banquete impacientes pero un muy alterado señor Flinch cruzo el gran comedor corriendo dejando a todos muy callados mirando con mucha curiosidad  como le susurraba  algo al director y volvia a cruzar otra vez hacia la salida, el director el gran mago Albus Dumbledore levanto sus manos pidiendo silencio aunque todos ya estaban como mudos.

Bienvenidos a otro año en Hogwarts antes de aturdirlos con el excelente banquete permítanme dar una gran noticia- dijo y todas las caras eran de suma atención a sus palabras- este año Hogwarts no solo sera hogar suyo este año, también sera el hogar de invitados muy especiales asi que pido un cordial aplauso para recibir a las señoritas del colegio Beauxbatons.

Las puertas del gran comedor se abrieron de par en par para dar paso a varias chicas vestidas de azul deleitaban con una linda danza lanzando bellos pajarillos de los olanes de sus faldas detrás de ellas las acompañaba una mujer que debía medir cerca de los dos metros y medio, las chicas continuaban con su danza al llegar enfrente de la mesa del director dieron una leve reverencia y pararon con gracia.

Muy hermoso Madame Máxime-  dijo Dumbledore y beso la mano de la enorme señora- ahora les presentó a nuestros hermanos del norte los caballeros de la escuela de Magia Durmstrang.

Por las puertas del gran comedor aparecieron una docena de jóvenes desfilando con sus grandes abrigos rojos lanzando llamas en forma de fénix con sus varitas esta vez quien los acompañaba era un señor que tenia la cara de tener pocos amigos pero eso no era todo a su lado iba la estrella de quidditch Victor Krum todos en el gran comedor estaban emocionados el director de ese colegio saludo a Dumbledore con un abrazo poco amigable y tosco.

Bueno ahora que todos están aquí- las palabras de Dumbledore fueron interrumpidas por el ministro de Magia que recién había llegado junto a el Señor Barty Crouch.

-Si me permite Dumbledore creo que tenemos otra sorpresa, en el ministerio siempre creemos que las relaciones entre naciones deben ser fortalecidas tanto las que están cerca como las que se encuentran del otro lado del mundo, asi que les presento como invitado sorpresa El Colegio Ilvermorny de Magia y Hechicería.

Las puertas se abrieron con un leve estallido de luz, un águila cruzo volando seguido de varios chicos y chicas que desfilando cruzaban el comedor todos traían águilas que se esfumaron  en el aire, el hombre que los acompañaba era el señor White, Polaris lo reconoció y vio que también Neo estaba ahí, el corazón le había dado un pequeño vuelco.

Que enorme sorpresa- Dumbledore hablo y el silencio volvió a reinar- como verán nuestros hermanos de otras escuelas de Magia han venido este año para celebrar un torneo que llevaba tiempo sin realizarse "EL TORNEO DE LOS TRES MAGOS" bueno de cuatro ya que nuestros amigos de Ilvermorny nos visitan desde Norteamérica ahora tendremos el respectivo anuncio del organizador de este torneo el señor Bartemius Crouch.

El torneo de los magos como ahora se llamara tiene como objetivo fortalecer los lazos que existen entre nosotros los magos- recitó el señor Crouch- cada escuela postulara sus campeones pero solo uno de ellos sera escogido por este cáliz de fuego.

Dumbledore golpeo su varita contra un cofre viejo de madera revelando lo que era un enorme cáliz que arrojaba llamas color azul.

Pero por orden del ministerio de Magia solo los alumnos mayores de 17 años podrán participar para salvaguardar su protección-  dijo el señor Crouch, varias cosas sucedieron al mismo tiempo entre gritos de protesta el cielo del gran salón soltó varios  rayos causando enormes gritos de los estudiantes y un hombre bastante malhumorado apareció lanzando un hechizo para que el cielo dejara de lanzar rayos.

SILENCIO- grito Dumbledore.

El campeón sera escogido y esa sera una decisión unánime una vez escogidas no habrá marcha atrás- Barty seguía con su discurso como si nada hubiese pasado- este se hará acreedor de esta copa de campeones- una enorme y preciosa copa azul apareció y resplandecía como mil zafiros- hasta entonces nos vemos el día de la selección.

Les rogamos a nuestros perfectos que coloquen a nuestros invitados en los lugares que ya les hemos indicado- dijo Dumbledore- antes de comenzar con el gran banquete me atrevo a presentarles al Señor Alastor Moody quien ahora se integrara como parte de nuestro personal docente- hubo un leve aplauso- bueno sin más comencemos con el enorme banquete.