La saga del Mal | SNK | [TERMINADA]

Lujuria: Madness of Duke Venomania

“¿Quieres bailar conmigo?”

En Italia, Venomania en una gran mansión vivía el Duque Levi Ackerman rodeado de mujeres, construyendo su harem.

Hoy una nueva dama llega al castillo, una hermosa joven, su nueva esposa; aquella mujer miró en sus ojos y sin dudarlo corrió a abrazarlo, él la recibió gustosamente entre sus brazos.

—Eres mía querida, ¿Como te llamáis?

—Mi nombre es Isabel.

—Bueno querida una vez que tu ropa quedé fuera ya no podrás volver.

Se acercó y la beso, fue un beso lleno de pasión lentamente la introdujo en una habitación donde la recostó, y así comenzó su noche llena de pasión.

Vivía en el sótano de su Mansión construyendo su harem, nadie puede resistirse a él. Años atrás hizo un pacto con el demonio con tal de tener el poder de hechizar a cada mujer que lo viera caería rendida a él.

Sin siquiera pensarlo las mujeres iban hacía él.

El pueblo tenía miedo pues mujeres de todo el país comenzaron a desaparecer sin dejar rastro alguno, mujeres, madres e hijas.

Buscaban nuevos métodos para evitar que más mujeres se perdieran.

Hanji Zoe
Joven de 19 años de edad, médico en el hospital del Sur de Venomania

Annie Leonhart
Joven de 16 años de edad, hija del Marqués Carlos V

Isabel Magnolia
Joven de 17 años de edad, enfermera en el hospital Nithgnood

Sasha Braus
Joven de 15 años de edad, campesina de la pradera Sur

Historia Reiss
Joven de 17 años de edad, esposa de Rood Green

Petra Ral
Joven de 17 años de edad, hija del Marqués Frederic Ral

En el sótano de aquella gran Mansión, Levi ordeno quemar cada uno de sus retratos del pasado. Los criados fueron acomodando cada cuadro uno sobre el otro mientras le prendían fuego y veían quemarse los retratos.

A su alrededor de él estaban todas aquellas mujeres, observando como el fuego consumía los retratos.

—¿Por que lo has quemado?

—Quiero borrar a mi yo del pasado, nadie debe ver mi pasado.—Hablo mientras veía las llamas consumir a su viejo yo.

—Pero esos retratos de ti, eran magníficos.

—Digamos que ocultan recuerdos oscuros de mi pasado.

—Pero eres muy lindo.

—Tu eres muy hermosa querida.

Se acercó a ella y la besó apasionadamente luego se separó de ella y la miró a los ojos ella le sonreía dulcemente.

Ella es mi amiga de la infancia, aquella que junto a otros me ridiculizó, esas risas que me atormentan ya no están más, la que me rechazo ahora esta frente a mi rendida ante mis encantos.