Capítulo I

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Día del estreno.

Mi mente se encontraba en un plano muy alejado del terrenal, lejos de su dueña y tambien de los recuerdos.

Mis pies marcaban cada movimiento, rapidos y lentos. Sentía el sudor frio correr por mi espalda mientras mis brazos se alzaban al conocido ritmo de la orquesta. Corrí a una esquina, me escondí y luego, florecí. Me sentí volar, como quien va en busca de lo infinito, del todo y del uno. Cada movimiento era calculado, ensayado, pero nacía con una naturalidad indescriptible. Mi mente vagó por cada momento, mi expresión significaba toda la pasión que poseía, iba más allá de quien era. No era Lilian. Era exactamente lo que busque por meses, lo que me quitó el sueño y me vacío de lágrimas. Estaba ahí, gritando a pulmón alzado con pasos grotescos y al mismo tiempo, delicados.

Era perfecto cada segundo que pasaba, se sentía el bullicio, la excitación. El público vivía lo que cada actor les interpretaba. Se removian inquietos en los asientos, querían gritar y correr, cantar y delirar.

Mi acto estaba culminando, la parte más difícil. Conseguir llegar a la cúspide de la emocionalidad, pero ya me encontraba tan alejada de mi ser, que sentir derrumbarme fue el golpe de realidad. Lo habia logrado, mi cuerpo tiritaba de adrenalina mientras gritaba desenfrenada. Para terminar en un suave llanto.

Y se acabó.

Los aplausos llenaron el teatro, las miradas con lágrimas no podían expresar de mejor manera la cantidad de sentimientos que flotaban en el lugar. Mis propios sentimientos estaban a flor de piel.

Tome las manos de mis compañeros en el escenario, hicimos una reverencia y de nuestras caras no podía deslumbrarse una felicidad más grande. Lo habíamos logrado. Nos abrazamos, agradecimos cada momento juntos y sólo quedaba descansar por tan arduo trabajo, para luego preparar el siguiente.

Zeb estaba esperandome en el público, corrí hacia el y lo abrace. Me sonrió orgulloso, nos miramos y no necesitábamos palabras para interpretar lo que sentíamos en ese instante. Lo besé.

- ¿Podemos ir a casa? - dije tomando su mano y caminando hacia la salida. Aún no encontraba mi cable a tierra, estaba flotando por sobre todos, incapaz de bajar. Necesitaba un segundo de respiro.

Sentí una mirada que cruzaba cada hebra de mi cuerpo, me atravezaba, bajandome de mi nube y razmillando mi alma. Sabía quien era, sentí esos ojos en el momento en que mis pies tocaron el escenario. No quise corresponder su mirada, pero mi cuerpo no podía evitar sentirse seducido. ¿Por qué tuvo que venir? No pude evitar maldecir el efecto que aún producía en mi.

- Esta aquí. - dijo Zeb, mirando al público.

- Lo sé.

Zeb me miró y la inseguridad cruzó veloz frente a su cara. Sabía que le dolía, que recordaba todos los momentos terribles que tuvo que vivir, pero yo habia echo una elección. Su mano me apretó unos segundos y caminé sin voltear la mirada, sentía una opresión en el pecho, aunque con cada paso se debilitaba mi. O eso quería.

¿Alguna vez han pensado en borrar el momento exacto en que todo se desmoronó? Recuerdo cada segundo de ese día y de todos los meses siguientes. Lo atesoro y lo desprecio, me convirtió en alguien que ni yo podía reconocer.

Querida Al, mi dulce y joven amante. Pudiste huir pero te quedaste, debiste volver a tu cuna, en mis brazos ya no correspondías.

- ¡Lilian! - su voz se escuchó en toda la oscura calle, era suave pero desesperada.

Zeb se detuvo, deteniendome a mi también. La voz de Al pesaba más en sus oídos que en los mios.
Me di vuelta, necesitaba enfrentarla.

- Vuelve a casa. - dije.

Sus brazos me rodearon y su aroma me transportó a esos días en que sólo eso me acompañaba. Me mantuve inmóvil. Se separó lentamente. Su mirada perdida deseaba encontrarme, cuando se dió por vencida, habló.

- Lo siento, sólo quería felicitarte. Lograste cada movimiento, no hubo ningún error en tus pasos. - tomó aire. Dudó si seguir o no, pero mejor se alejó. Caminó insegura varios metros y dobló en la esquina más cercana.

- La amas. - susurró Zeb, sonaba dolido.

- Quizá.

- ¿Cuándo cambio todo en nuestras vidas? - dijo abrazandome.

- El día que acepte el papel en la obra.

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⏰ Última actualización: Jun 27, 2018 ⏰

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