OOPS! || Reddie

O7

Los dos adolescentes hormonales se encontraban respirando pesadamente sobre la cama de los Denbrough.

Eddie: ¿Quieres repetirlo de nuevo?

Richie: -sacándose una pluma de la boca- ni loco, voy a renunciar.

Eddie: Si, ¿quién iba a pensar que jugar guerra de almohadas iba a ser tan agotador? -dijo incorporándose en la cama-

Richie: Pues mejor que una guerra de rocas, si -mira a Eddie con una sonrisa pero de pronto se esfuma- Sé de algo que gasta más energía.

...

Eddie: Richie, detente!

Richie: No hasta que aprendas a patinar, pendejo!

Eddie: ¡Vas a arruinar los patines y me partiré la madre! ¡Para, ahora!

Richie: -para repentinamente haciendo que Eddie choque con el poste de la vez pasada- Silencio, que no me mire.

Eddie: -ve a la cabeza de sol entrar a una cafetería- pensaremos en algo, mira una peluquería.

Richie: Nooo

Eddie: See

...

La peli-sol se encontraba espiando a Richie desde hace tres días y había notado que estaba saliendo mucho tiempo con ese chico asmático.

Peli-sol: -hablando por teléfono con su mejor amiga- mi plan es quitarle el inhalador al enano, así se muere y Richie vuelve conmigo.

Al otro lado de la línea: Existe algo que se llama Farmacias. Puede comprar otro ahí.

Peli-sol: Pues... espera creo que están entrando a una peluquería, me acercaré.

Al otro lado de la línea: No, no. Gretta, sabrán que los estás siguiendo.

Gretta: Sólo fingire que me volveré a teñir el cabello, pero ¿Si los encientro haciendo algo raro?

Al otro lado de la línea: ¿Cómo... vestirse de mujer?

Gretta: No, Richie es pendejo pero no tanto -se ríe escandalosamente-, digo haciendo algo raro como que estén cogiendo.

...
Eddie: Vamos, sólo es rasurarte la cabeza.

Richie: Ni loco, ¿Sabes  lo que cuesta ser tan guapo?

Eddie: Si, lo sé -el rizado lo mira y pone los ojos en blanco-, a parte, sólo existe esa opción ó vestirte de mujer.

Después de quince minutos.

Eddie: -regañando a Richie- te lo he dicho por quinta vez, nO CAMINES COMO VENADO RECIÉN NACIDO!

Richie: Son unOS MALDITOS TACONES DE UN METRO!

Eddie: -le quita los tacones de dos centímetros y se los pone él- entonces porque yo no camino como becerro! -desfila por toda la tienda-

Richie: -alzando los hombros- ya tienes experiencia, supongo. Auch, ¡con la chancla no!

Eddie no pudo evitar sonreír por tal acción ya que ni siquiera lo había tocado. Todos los momentos junto a ese bocazas eran inolvidables incluso la vez que jugaron Guerra de Rocas contra los niños Denbrough, batalla que habían perdido. El asmático pedía que no se fuera con la rubia, que se quedara con él, lastima que había un anillo en medio.