¿Tu...o...yo?

11 DIIIAS

*narra Ella*

Su boca se abrio formando una gran O, al igual que sus ojos...me miraba sin entender nada.

- Por favor...di algo -

- Yo...¿como que eres una bruja? -

- ¿Cómo te lo explico?...nací así, y cuando cumpla 16 años... -

- Cambiarás...lo se...pero me da igual porque...no puedes elegir cuando te haran daño pero si puedes elegir quien te lo hará...y yo te he elegido -

- Eres tonto - Me acerque a él y le bese...jamás había tenido novio ni tampoco había comprendido por que la gente tenia...pero ahora que está cerca de mi...siento que le quiero...

*narra Él*

Qué mi novia fuera bruja no me importaba...me hubiera dolido más que me dijera que yo era demasiado feo para ella o algo así, además...

- ¿En que piensas? - Me interrumpió con su dulce y delicada voz.

- En como me harás daño...¿con tus largas uñas?, ¿con tu mal aliento?, ¿asustarme con tu cara verde?, ¿que tu tio me meta en un caldero?...lo ves...nadie puede elegir el daño ni cuando pero... -

- Pero si se puede elegir quien te lo hace - Acabo mi frase, mirandome a los ojos y con una lagrima en su mejilla - Ojalá no te lo haga...y pase el resto de mis días contigo -

- Los vas a pasar...no me harás daño, te conozco y no puedes -

- Cuando cumpla 16 no me conoceré ni yo -

- Pero yo si...conoceré a esa Lina que me enamoró -

- Jajajaja -

- Te llevare a casa, ya es tarde -

- Esta bien - Agarre su mano y bajamos del capó para meternos dentro.

Una vez ahí la mire y comencé a conducir hacia su casa...pense que su tío la iba a regañar y no me sentía muy as gusto con ello pero...por lo menos tiene...¿como decirlo?...poderes.

*narra Ella*

Baje del coche, cerré la puerta y me asome a la ventanilla, la cual estaba abierta.

- Buenas noches -

- Hasta mañana preciosa -

- Adios - Me conduje hasta la berja de mi casa, saque las llaves y abri.

- ¿Donde estabas? - Pregunto mi tio nada más entrar.

- Por ahí con... -

- Con ese chico, ¿verdad? -

- No... -

- No mientas Lina...conozco esa cara de mentirosa, al igual que tu madre -

- Deja a mi madre... -

- Era un mentirosa, dijo que no se había enamorado de un mortal...y luego se casaron -

- No hables así de ella... -

- ¿De quién?, ¡de esa asquerosa que te abandono! -

- ¡No me abandono! - Una fuerza desconocida salio de mi cuerpo expulsando se por mis manos que hizo que mi tio cayera al suelo dando se un gran golpe - ¡Tio! -

*narra Él*

- ¡Tio! - Escuche aquel grito y sali del coche corriendo, me asome a la berja y pude ver al señor Heltox en el suelo sangrando y Lina al lado llorando - Tio por favor.... - Sus lágrimas caían al suelo y me sentía impotente...¿que podía hacer?.

- ¡Lina! - Grite para captar su atención, ella miro hacia atrás y corrió hacia a mi - Ven - Al llegar salto a mis brazos.

- Ayudame Izan...no le quería hacer daño -