¿Mi Propia Novela?

Capitulo 2

Una novela real... ¿Cómo se supone que haré una novela real y a la misma vez convertir a alguien en un "hombre perfecto? suena algo sumamente difícil, algo totalmente imposible, nadie es perfecto. He pasado dos semanas pensando quien podría ser mi conejillo de india para volverlo el chico perfecto, pero nadie me viene a la mente, Danise me tiene harta preguntándome a quien elegí y siempre respondo lo mismo, no sé. 

Ella ya eligió el suyo, se llama Derek Montesk, es un chico muy tímido pero bastante guapo, es cabello negro y de ojos grises, solo le falta unos arreglos, un poco más de confianza y es todo un galán, un día lo vio siendo “agredido” verbalmente por los jugadores de futbol, lo salvo y lo eligió a él. Claro cuando el chico se enteró casi se desmaya de la sorpresa y se negó pero con la psicología inversa de Danise, logro convérselo.

Tan pronto como termine mi desayuno, fui corriendo a mi cuarto arreglarme iba hablar con Danise y acabar con todo este embrollo de la novela real, ya me estaba empezando a doler la cabeza de tanto pensar, me puse un vestido, hoy me sentía con ganas de verme bonita, me maquille sin exagerar y baje, me despedí de mis padres y tome camino a casa de la morena que quería que me ahogara en un vaso con agua tratando de escribir una absurda novela. Por desgracia para mí, cuando llegue vi que está hablando con el vecino gordito, ¡oh dios mío! Me gusta su sonrisa, realmente me gustaba a pesar de que estaba sobrepasado de peso,y no es que sea gordofobica, pero  su sonrisa era encantadora y sus ojos verdes llamaban la atención, no era que el me gustase porque no es así, solo que tenía “algo”.

 Esa era una de las tantas veces que deseaba que la tierra me tragara, creó que mirarlos fijamente a los dos fue una mala acción de mi parte, ya que cuando me di cuenta me estaban mirando fijamente como preguntándose qué demonios hago aquí, camine hacia ellos con la espalda recta y la cabeza alta. No me dejaría incomodar con esas miradas tan extrañadas, ¿Por qué tengo que tener amistades con esa mirada? Tengo que aprender esa mirada, fue lo último que me dije antes de escuchar:

-Es ella - dijo Danise

¿Cómo que es ella? ¿Qué acaba de pasar? ¿De qué demonios me perdí?

- ¿Qué sucede conmigo?- pregunte desconcertada.

- Ya conseguí al chico que volverás un galán, Amaia él es Drew Markov, mi vecino.

Por lo general, adoraba a mi amiga pero en estos momentos quería matarla, ¿eligió a un chico por mí? ¿Desde cuándo sucede eso?, es el colmo.

- ¿el?- pregunte señalándolo

Fue lo único que se me ocurrió decir estaba en shock, no quería, era un gordito, no tengo nada en contra de los gorditos pero me recuerdan mi pasado, cuando también lo era. Y aparte sera el doble de trabajo.

El frunció el ceño.

-sí, yo ¿hay algún problema conmigo?- gruño

Vaya, el gordito tiene agallas pero se tiene que cuidar esa boca porque se va a terminar quedando gordito.

-No ninguno- me acelere en decir – solo que no lo haré.

Su cara de sorpresa cambio a una de rabia, se había puesto rojo, y yo sabía la razón, lo había rechazado, había rechazado un gordito y herí su ego, aplaste su dignidad y demás.

-Es porque soy gordo, ¿verdad? Sabía que no me ayudarías, esto fue una perdida de tiempo, solo te fijaste en el físico y no buscaste más allá, es una gran tristeza que sea asi- con eso se dio la vuelta y se marchó.

Realmente me sentía mal por él, yo misma sabía que se sentía ser rechazada y humillada por los demás pero además ¿Quién se creía? Yo no era como las demás, era sencilla y normal, no era un Barbie y tenía una personalidad agradable, me dio justo en el orgullo pero a él le había dolido más.

Suspire

Mi amiga me miraba con desaprobación, juro que le comprare unos lentes para no ver esas miradas, las odiaba.

Camine hasta la casa de Drew. ¡Dios mío! ¿Por qué estoy haciendo esto? Ah sí, ofendiste a un gordi…. A Drew. Toque el timbre una vez, nadie salió, otra vez, nada, Drew sal antes de que me arrepienta, a la tercera vez se abrió la puerta, suspire tranquila.

-¿Qué quieres? – dijo con una mirada con odio.

Baje la cabeza, me sentía mal y cuando estaba así hacia cualquier ridiculez de niña tonta.

Suspire -Lo siento mucho, Drew. Yo intentare ayudarte y ser un chico perfecto.

Sentía su mirada, sentía su odio hacia mí y le daba la razón había sido una zorra y me lo merecía, no esperaba que me perdonara y menos que aceptara.

-¿Me ayudaras?- susurro con voz casi ahogada.

¡Oh dios mío! Esto es grave comenzando por la baja autoestima, esto si es realmente difícil como puedo explicarle que me costara mucho y que será un camino difícil, la cabeza me iba a explotar.

Lo mire fijamente, no sabía que responder, y todo por el patético pensamiento de Danise, tenía que decirle algo sentía como la esperanza de Drew se rompía y no quería eso, quería que sonriera no que se deprimiera y se sintiera rechazado.

-Si, te ayudare y será mas sexy- dije más para mí que para él, en un intento de auto-afirmamiento.

Su mirada se ilumino como si le hubieran dicho que había chocolate cerca (nota mental: debes dejar de hacer bullying psicológico).

- ¿lo prometes?- pregunto con esperanza

- Lo prometo

Esto iba hacer difícil pero sería un grandioso reto, lo prometo Drew te volveré el hombre más sexy en la faz de la tierra.