El Misterio de Emily Willson (El PRISIONERO DE AZKABAN)

Capítulo 3: Nuevo profesor de DCAO

Los dos cogidos de la mano, bajaron por las escaleras y llegaron a la puerta de atrás del todo, al despacho de Dumbledore. Que por la hora que era, pensaban que ya se iba a encontrar con el en el Gran Comedor. Pero no, estaba allí sentado de espaldas a ellos.

−Os estaba esperando. −Dijo Dumbledore mientras se levantaba del asiento.

En ese instante, Emily y Snape miraron sus manos cogidas y con los ojos como platos, las soltaron inmediatamente.

−¿Cómo se le ha dado su primer viaje largo en Aparición, profesora Emily?

−No muy bien...me he desmayado −Dijo Ella mientras miraba a Snape de reojo.

−Me lo suponía. −Dijo Dumbledore, preparándose para marcharse con ellos. −Y ¿usted Severus? ¿Qué tal su viaje desde la Hilandera?

−Perfectamente señor. −Contestó Snape.

−Que coincidencia que se haya encontrado a la profesora Emily a la misma hora que tú, Severus.

−Ha sido una pura...coincidencia, señor. −Miró a Emily de reojo. −Dado que me la encontrado desmayada en el suelo, no he tenido otro remedio que despertarla...señor. – Volvió a mirar a Emily de reojo, mientras intentaba poner calma a la situación.

Emily con el corazón en la boca, esperando respuesta del Director, que tardó más de 3 segundos en decir: Suerte ha tenido usted, que estaba Severus en el momento adecuado... Hasta que no dijo esas palabras, ella no respiró con tranquilidad. Snape parecía más tranquilo.

Fueron andando hacía el Gran Comedor y por el camino estuvieron conversando.

−¿Qué tal sus vacaciones Severus? −Preguntó Dumbledore mientras andaban por las escaleras que se movían lentamente.

−Tranquilas, señor. – Contestó Snape mientras metía sus manos en los bolsillos. Su capa negra llegaba hasta el suelo.

−Magnifico, profesor, y las suyas, ¿Emily? −Volvió a preguntar el Director.

−Bien, en casa, a las afueras de Londres, tranquila también. – Contestó Emily a la pregunta del director de Hogwarts.

−Perfecto, profesora Emily, ¡Oh! Acabo de acordarme de que el sombrero seleccionador se me ha olvidado en mi despacho. Ahora mismo vuelvo. −El profesor se marchó con ritmo lento por las escaleras y no le vieron más.

−Severus...por qué poco− Dijo Emily mientras miraba al suelo diciendo que no con la cabeza.

−Si...Profesora Emily, esto se nos está yendo de las manos. −hizo una parada −Deberemos ser más cautos este año, si queremos que no nos despidan.

Las dudas en Emily y en Snape pasaban a todas horas, sobre todo desde que están en Hogwarts. En vacaciones de verano todo era más fácil, habían pasado un verano sumamente tranquilo e ir a Hogwarts, era volver a esconder en un simple recuerdo todo lo que habían vivido juntos. Pero siempre que se juntaban lo hacían a escondidas. Pero algunos alumnos comenzaban a sospechar. El amor de Emily por Snape, se notaba a distancia, y Severus no se cortaba al 100%.

Entraron los 2 por el largo pasillo y se sentaron en sus respectivos asientos. Vieron a Harry, Ron y Hermione muchos más grandes y altos que el año pasado. Los alumnos del primer año iban pasando poco a poco y Dumbledore utilizó la aparición para llegar antes con el sombrero. Todos los profesores ya estaban sentados y los alumnos también. Como cada año, el sombrero seleccionador cambia de canción y esta vez, fue mucho más exagerado con lo de que Sirius Black se había escapado y ya no decía que Hogwarts fuera seguro.

En cambio, Dumbledore, si hizo un discurso más esperanzador.

−Bienvenidos a los nuevos alumnos de primer año, y como siempre, gracias por estar aquí, el resto. – Se paró por un segundo. −Quiero anunciaros que vuestro nuevo profesor de Defensa Contra Las Artes Oscuras, remplazando a Gilderoy Lockhart será el profesor Remus Lupin. −Todos los alumnos aplaudieron mientras que este se levantó del asiento, Emily ni aplaudió. −Por otro lado, la otra profesora de Defensa Contra las Artes Oscuras Emily Willson será la segunda profesora de Pociones junto a Severus Snape.

Los dos se miraron indignados y sin creer lo que estaba sucediendo. Emily no tuvo otro remedio que aplaudir. Increíble. −Esto no tiene buena espina, George. −Dijo Fred, mientras aplaudía con desgana.

−Ya lo creo, Fred. −Dijo George, mientras aplaudía junto a su hermano gemelo.

El director prosiguió con el discurso. −Para acabar, Sirius Black ha escapado de Azkaban, quizás por eso hayáis visto tantos dementores. – No dudéis que estamos protegiendo la escuela. Debéis ser cautos este año y no dejaros llevar por el miedo. Tenéis que encender la luz más allá de toda oscuridad.

Disfrutar el Banquete.

Así acabaron las palabras del Director, que se sentaba en su asiento central mientras miraba a Harry.

−No doy mi asignatura predilecta este año, genial. −Decía Emily en voz baja mientras comía con desgana.

−Pero estás conmigo −contestó Snape en voz baja, mientas miraba de reojo a Emily.

Emily no pudo evitar sonreír y sin intentar llamar la atención, bebió de su copa.

Remus Lupin estaba sentado a su derecha y Severus estaba totalmente indignado, porque no había vuelto a conseguir el puesto que siempre quiso y Emily, había sido intercambiada a Pociones. Aunque no sabía porque del todo, si que es cierto, que sacó muy buenas notas los años atrás, rara vez se equivocó en algo. Además, que ella iba apuntando en su diario todo lo que iba aprendiendo.

Ya era la hora de marcharse a sus respectivas habitaciones en las mazmorras de Slytherin. Empezaba un nuevo año para todos. Emily solo quería estar con Snape. Se le iba a hacer duro a los 2, no estar todas las noches juntos como en verano. Pero al menos, tenían guardias nocturnas juntos y quizás era eso lo que importaba.

Emily se metió en su cama, con su gatito Rayo. Y finalmente se durmió pronto.