Dan corría buscando el gran roble. Lo había visto en una ocasión.
<Debo hablar con ella>
*Llega al árbol de roble y se detiene para poder descansar un poco*
-espero y realmente esté aquí-
*Entra en el lugar donde le habían indicado que ella se encontraba*
<Debe estar aquí dentro>
-disculpe la molestia pero no ha visto a una chica de cabello castaño, con lentes aquí? Me dijeron que estaría aqui- pregunto Dan a una de las meseras.
-pasan muchas chicas así todos los días joven- sonríe amablemente-
-lo entiendo pero ella viene todos los días después del colegio aqui-
-oh ya veo entonces hablas de aquella chica no?-
-cual?-
-hay una chica que siempre viene a la misma hora con uniforme escolar, excepto los fines de semana solo viene por el atardecer, siempre pide un té verde y un pequeño pastel-
-entonces si es ella- asiente felizmente
-acaba de irse hace unos minutos, quizás si sigues el camino hacia la estación de tren logres alcanzarla- señala el camino
-gracias señorita- sale del lugar apresurado hacia la estación de tren.
*Narrando*
Aquella chica se disponía a tomar el tren rumbo a casa. Cómo era su costumbre llevaba puesto sus auriculares y se acomodaba los lentes para poder ver un poco mejor, con la mirada sería y fijada en un pequeño libro que llevaba consigo mientras esperas su tren.
<Quien era ese chico? Porque tiene tanto interés es seguirme hablando? Que estarán tramando ahora esos chicos....>
*Suspira*
*Dan se acercaba rápidamente a la estación de tren, bajo lo más rápido que pudo las escaleras, cuidando de no caerse; entre a multitud comenzó a buscar a aquella chica sin mucho éxito hasta que en las filas de muy adelante logró verla leyendo un libro mientras el tren se acercaba, listo para ser abordado*
<Debo alcanzarla antes de que tome el tren>
*Acelera su paso para poder alcanzarla pero al llegar hasta el lugar las puertas de aquel tren habían Sido cerradas, con la chica dentro aún leyendo el libro, mientras esté la miraba desde afuera*
<Diablos....><mañana es fin de semana y no podre verla...>
*narrando*
La chica se sentó ya dentro del vagón del tren. Mientras el tren comenzaba a moverse, tomó su libro entre sus manos y fijo su vista en el, hasta el momento en que el tren llegó a su destino. Se levanto y salió del tren pasando entre la multitud, subiendo las escaleras y comienza a caminar rumbo a su casa.
*llegando a su casa un poco frustrado por no haber logrado su cometido*
-porque ella seguirá pensando mal de mi- se decía a si mismo mientras se recostaba en su cama.
*Dan se quedo pensando algunos minutos en lo que poda hacer para hablar con la chica definitivamente cuando en su mente recordó lo que aquella mesera....*
<-hay una chica que siempre viene a la misma hora con uniforme escolar, excepto los fines de semana solo viene por el atardecer, siempre pide un té verde y un pequeño pastel->
-esa es la solución¡¡- exclamó con gran alegría-
-mañana iré a buscarla al atardecer y podremos hablar sin interrupciones- sonrío un poco mientras sus ojos se cerraban quedando dormido sin notarlo.