Capítulo 4

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Miré mi horario, matemáticas... Esperaba que la última hora acabara con una materia que me gusta, no es así. Todo el día estuve de salón en salón, obviamente. Tomé asiento al lado de Alice, la llamaré Ali. Mientras esperábamos al profesor Trainor, ella y yo hablábamos.

-Ahora que lo pienso bien yo si me hubiera reído.-Soltó Ali y rió.

-¿En serio? No traíamos ropa, llegamos tarde a matemáticas.-Dije seria.

-Pero fue divertido, acéptalo.-Hizo una mueca graciosa, no pude evitar reír.

-Bueno, si.-Reí.

-Por cierto, me gusta que me llames Ali.-Sonrió.

-¿Cómo me llamarás tú?-Pregunté divertida.

-Pensó y..-¿Lee?-Negó con la cabeza.-¿Hai...-Pensó.-Leenda?-Yo reí.-¡Hai!

-Me gusta.-Sonreí.-¿Haileenda? ¿En serio?-Reí.

Sentí como alguien se paró justo al frente mío, miré hacia arriba y era el profesor. ¡Rayos!

-¿Cu.. Cuándo llegó?-Tartamudeé.

-No lo notaron, ya que estaban hablando.-Dijo serio.-Ahora guarden silencio.-Fue al pizarrón.

-Odio a este profesor, Hai.-Dijo Ali.

-Yo igual.-Y nos estaba mirando de nuevo.

-Guarden silencio.-Pidió nuevamente.

Los otros chicos seguían hablando, escribimos lo del pizarrón.

-Buenos tardes, profesor.-Una chica recargada en el umbral de la puerta, lo miraba atenta.

El profesor al verla dejó de escribir en el pizarrón, dejó el libro y el plumón sobre su escritorio.

-¿Te perdiste?-Preguntó acercándose a ella.

-No. Soy de este salón.-Y Trainor la dejó pasar.

La campana sonó, era hora de salir... Para los demás, yo debía quedarme. Quedaba la alumna nueva en el salón y guardaba los libros lentamente. Corrí al baño. Hice lo que tenía que hacer y corrí de vuelta al salón.

-Profesor... ¿No le gustaría darme clases por las tardes?-Se acercaba seductoramente a él.

-No, señorita.-El profesor ignoró todo y se levantó.

Se acercó más, esa cercanía no hay entre un alumno y su profesor.

-¿Está seguro?-Preguntó nuevamente cerca de los labios del profesor. Este la alejó.

-Ya váyase, por favor.-Se movió de lugar. Ella salió indignada.

Yo había visto todo eso. Al parecer es de esas fáciles, típico, rubia bonita ofrecida. Llamé la atención del profesor quien estaba nervioso.

-Lo viste todo, ¿cierto?-Preguntó.

-Si.-Respondí.-Por eso sé que usted no es de ese tipo de persona.-Aclaré.

El solo sonrió.

-¿Le parece si hoy no trabajamos? Hoy nos conoceremos mejor.-No me gustó mucho la idea de perder tiempo aquí, pero de eso a trabajar... Asentí con la cabeza.

-Preguntame lo que quieras.-El profesor se sentó en un banco y yo igual.

-¿Cuántos años tiene? No quiero ser impropia o algo, pero se ve muy joven para ser profesor.-El profesor rió.

-Tengo 22 años.-Dijo. Me quedé con la boca abierta. ¿Se puede ser profesor a esa edad?

-¿Cuános años tiene siendo profesor?

-2 años.-Contestó.

-Entiendo.-Rió.

Hablamos mucho y me di cuenta de que tenemos muchísimas cosas en común. No es tan malo, me dejó salir temprano... supongo que es para que no diga nada de lo que vi, pero no lo haré.

Acomodar, sacar, promocionar y vender, eso hago. Me gusta mucho mi trabajo, amo leer; aparte a todo el personal nos hacen un descuento por trabajar aquí.

-Disculpe.-Un niño me dio unos suaves golpecitos en la pierna.

-¿Qué pasa, pequeño?-Pregunté.-¿Quieres un libro?-Me puse de cuclillas para estar a su altura.

-Si. Quiero un cuento.-Sonrió. Que niño más linda.

-Ven.-Tomé su pequeña mano y lo encaminé al pasillo de cuento para niños.-Blancanieves, un gran dinosaurio, el libro de la selva.

-¿Dónde sale Baloo y Mowgli?-Preguntó.

-¿Qué dices?-No entiendo. >Baloo y Mowgli, de el libro de la selva< Ah claro.-Si, aquí están.-Sonreí.

El aplaudió sonriente. Que tierno.

-Te lo daré.-Dije.-¿Y tú madre?-Él agachó la cabeza para luego mirarme con tristeza.

-Mi mami falleció.-Ay... ¿Por qué nunca me quedo callada?

-Lo siento.

-Pero mi papi viene conmigo, ¿está bien?-Dijo ahora feliz.

-¡Dylan!-Un chico corrió hacia el niño que tenía al lado.-Ya te he dicho que no te escapes así, me preocupé.-Abrazó al pequeño.

-Perdón, papi. No lo haré más.-Dijo el aparente Dylan. Luego él me miró.

-Hola. Soy Jason McCartney.-Me extendió su mano.

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Holaa!

Nuevo capítulo. ¿Les gustó?:)

Yo digo que si 7u7.

No olviden seguirme. Es muy fácil, solo tienes que darle en Seguir y ya me estás siguiendo.

Tengo una historias más:

Tenías Que Ser Tú de romance, así como esta.

Hasta la próxima actualización.

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