Capitulo dos: 3 AM

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Sus brazos me rodean, sus labios tocan los míos y luego susurra mi nombre entre dientes, ardiendo de placer al igual que yo. Sus ojos grises me inundan el alma entera, miro a su boca fijamente y ella vuelve a besarme. Tan ensordecedor para mis sentidos que me quedo inmóvil. Amo como se siente cada gesto que hace, cada pequeño movimiento. La amo y es mi única verdad, luego de dos años la sigo amando.  

Me despierto aún exaltado por el sueño, Hayes vuelve a recorrer lo más guardado de mí. Se suponía que la había olvidado, se suponía que yo ahora amo a Aleisha ¿pero a quien engaño? Verla nuevamente hace que mi pecho arda y que mis labios solo quieran los de ella.

Miro a mi costado y noto como Aleisha duerme profundamente, decido salir a los pasillos del hotel. No puedo estar en la misma cama que mi novia si pienso en otra. Pero Hayes no es “otra”. Ella es Yasmin, la única que ame tanto como para llorar y rogar que todo sea una pesadilla. Que todo sea un mal chiste y que ella se quede a mi lado en Australia.

Camino hasta el gran y pintoresco living de hotel; esta desolado y es de esperar, son más de las tres de la madrugada y no creo que alguien este despierto rondando en el hotel. Me siento junto a la chimenea encendida y pienso en tantas cosas, como mi última noche con Yasmin, como sabían sus labios aun salados por las lágrimas que había derramado al decirla que la amaba. Mis ojos se llenan de lágrimas, es inevitable. Fue uno de los días más tristes y felices en mi vida. Como si sería una mentira.

-¿Ashton?- escucho su voz tan fuerte y claro que parece una mentira que lo estoy imaginando. Pero luego de unos segundos me doy cuenta de que no es una mentira, Hayes está ahí parada con unos Jeans rotos, una camiseta de nuestra banda y su cabello celeste totalmente alborotado.

-Haye…Yasmin ¿Qué haces aquí?- ella nota mi nerviosismo, lose, pero no dice nada y se sienta en el sillón frente a mí.

-No podía dormir, y creo que vos tampoco- asiento levemente y siento como mi labio inferior tiembla.  

-No, tuve unas pesadillas horrendas y decidí despabilarme- Si ella tan solo supiera lo que había soñado.

-Me paso lo mismo, además Mike roncaba- mi cara se hiela ¿Mike? ¿Qué demonios hacia en la misma habitación con Mike?

-Sí, Mike ronca bastante- lo digo con indiferencia, ojala se dé cuenta y se marche de una buena vez. Pero a la vez no quiero que se marche.

-Hace mucho que nos veíamos- ella sonríe cálidamente, tanto que hasta sus ojos brillan ¿Por qué es tan perfecta maldita sea?

-Sí, las cosas cambiaron bastante desde que no nos vemos- asiente, haciendo que algunos mechones rebeldes se cuelen en su cara. Como me gustaría acomodárselos detrás de su oreja.

-Como mi cabello- sonríe mientras enreda un mecho en su dedo.

-Como Mike y tú- eso sale de mi boca sin permiso y me detesto, quede como un maldito celoso.

-¿Mike y yo? ¿Aleisha y tú?- eso también salió sin permiso de sus labios, me doy cuenta por su cara luego de decirlo, ella también esta celosa.

-¿Es la misma relación la mía con Aleisha y la tuya con Mike?- quiero indagar mas, es obvio. Necesito saber que pasa entre ellos dos.

-Quitando lo del sexo y los besos, si es la misma relación-

-¿Son novios?- mi seño se frunce y ella también lo frunce.

-Somos solo amigos, el me ayuda en todo y es un buen compañero. Pero si querías saberlo de esta manera, no Ashton, no estuve con nadie más desde que me marche de Australia hace dos años-

-¿Me lo estas reprochando?- ella frunce el seño y niega, parece un gesto más para ella misma que para mí.

-¿Qué tu pudiste reconstruir tu vida desde que no estamos juntos? ¿Eso te parece un reproche? Por dios Ashton, me paro a aplaudirte. Pudiste hacer lo que yo no y me alegro por ti. Eres increíble y me demostraste que después de todo si fue una apuesta-

-¿Vos crees que todo fue simplemente una apuesta? ¿Vos seguís pensando eso? Por favor, creo que desde el día de la fiesta, el día que me preguntaste que me gustabas, siento cosas por vos, por esos malditos ojos grises que me costó tanto descubrir de qué color eran en realidad, por esa alma sufrida que piensa que todo paso cuando en realidad las marcas perduran en el tiempo, por esa sonrisa tan perfecta que me dejo mudo tantas veces. Me enamore de vos Yasmin, y eso no va a cambiar-  me acerque a ella y la bese, no me importo mas. Sentí sus labios una vez más y me encanto. Notar como mi cuerpo se volvía a sentir completo.

Pero luego de unos segundos ella se aparto y sin decir nada más me dejo, con ganas de otro beso y con ganas de decirle todo la que la amo. Por dios, soy un idiota. 

Recover [Ashton Irwin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora