NIGħŦMARES «ŦRAÐUCIÐA»

Un nuevo comienzo

Nos sentamos en silencio total por lo que parecieron 5 minutes, tal vez mas. Las ansias comenzaron a acumularse en mi pecho. Shizuo se quedo ahí tratando de dar sentido a lo que acababa de pasar. Tal vez el estaba pensando su respuesta. 'Tal vez el no siente lo mismo. Sus labios decían que me ama pero, ¿y si su mente dice que me odia?' Mis piernas comenzaron a temblar. Tenía miedo de su respuesta. Mis rodillas fallaron, y me desplome sobre el suelo. Shizuo me miro en shock. "Yo ...estoy b-bien. ."

Shizuo se tiró a el piso, y me abrazó en un cálido abrazo. Sabía que yo no estaba bien. Ambos lo sabíamos. "Solo quiero saber una cosa. ¿Me besaste porque sientes algo por mí o solamente querías ver mi reacción?" Las palabras de Shizuo me golpean como un tren. ¿Él aún pensaba  que yo era esa clase de persona? Tragué saliva, sintiendo como si hubiera un nudo en mi garganta.

"Tengo algún tipo de sentimiento por ti. No sé como ni porque, pero cuando tu estas a mi alrededor, siento calidez, porque todo sobre ti es cálido, y pensé que quería también ese calor. Te quiero Shizu-chan," No había pensado antes decir nada.Solamente deje salir todo. Mis sentimientos. Mis profundas emociones. Me abrí a Shizuo. Lo sabia muy en el fondo, incluso si no quería creerlo, que él era en él único en el que podría confiar.

Nos sentamos allí, abrazados en la calidez del otro. Sonreí en el hombro de Shizuo, a pesar de la ominosa sensación en mi pecho que me decía que me fuera. "¿Eso significa que estaremos juntos entonces, Shizu-chan?" Sentí a Shizuo tensarse ante la mención de algo romántico entre nosotros. Me pregunto qué sintió él. Me pregunto cómo se sintió por nosotros. ¿Alguna vez Shizuo estuvo en una relación? ¿Fui su primer beso, primer amor, primero todo?

"S-Sí, supongo que sí Pulga", Se rió, a pesar de la seriedad de su respuesta. Tal vez este era un nuevo comienzo. Para mí y Shizuo. Éramos como dos piezas de rompecabezas. Sin él en Ikebukuro, estaría vacío. El rompecabezas simplemente no estaría completo sin él.

Lo miré, pero su rostro se volvió borroso. ¿Qué me estaba pasando? Mi respiración se estaba volviendo más débil. Shizuo era solo una silueta en este punto. "¡¿Izaya?! ¡¿Izaya ?! ¿Qué pasa?" Él vio que algo estaba mal. Mis latido del corazón latían cada vez más lento. Caí en la cuenta. El no comer, finalmente me había alcanzado.

"Llama ... Sh-Shinra," susurré débilmente. Apenas podía pronunciar las palabras. Entonces, así como así, todo lo que vi fue negro.

~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~

Escuché un enjambre de voces a mi alrededor. "¿¡Cómo pudiste dejar que se pusiera tan mal! Shizuo, está a punto de morir. No ha comido en una semana. Tampoco ha bebido agua. Está severamente deshidratado y en el punto de la Anorexia . ¿Que pasó?" Me di cuenta por el análisis médico, que era Shinra.

Luego otra voz, una muy familiar: "Está teniendo constantes ataques de pánico, y está débil y mareado todo el tiempo. Además, me contó algo sobre depresión. Solo por favor, ayúdelo a mejorar", Shizuo. Estaba suplicando a Shinra para que me pusiera mejor. . ? Esa fue la primera vez del monstruo de Ikebukuro. Por otra parte, como no hace mucho tiempo, él era mi monstruo.

"¿Q-qué pasó-ó?" Chillé. Fue difícil encontrar mi voz. Tomó energía extra; energía que no tenía. Sentí una mano agarrar la mía. Abrí los ojos, dejando que mi visión se acostumbrara a las luces que parecían estar solo en mí. Con la visión ligeramente borrosa, vi los dedos de Shizuo entrelazarse con los míos, y Shinra parado sobre mí, luciendo tan agitado como nunca lo había visto.

"¿Por qué no comes, bebes o tienes la cantidad correcta de sueño?" Shinra me preguntó, la voz cargada de ira. No quería responderle frente a Shizuo. No quería preocuparlo. Era tan inepto para arreglarme, que no podía soportar forzarlo a preocuparse más. Hice un gesto a Shinra para que se acercara, así podía susurrarle al oído mi respuesta.

Se acercó, "¿A quién le importa una mierda si estoy vivo o no?" Se retiró casi de inmediato, dándome una bofetada firme en la cara. Shizuo se quedó en estado de shock, obviamente estaba enojado con la acción del médico clandestino. Me lo merecía, así que me senté y sostuve mi mejilla avergonzado.

"¿Qué coño Shinra ?!" Shizuo estaba gritando ahora. Atravesó mi dolor de cabeza ya ardiente. Él agarró la mano de Shinra y lo miró directamente a los ojos. Shinra me miró y yo negué con la cabeza. Si él decidiera decirle a Shizuo lo que le acabo de decir, no lo perdonaría.

"Mantén a tu pulga suicida vigilado", Shinra lo miró con enojo y le dio a Shizuo un papel y una botella de medicamento. "Asegúrate de que no intente saltar por la ventana o lanzarse desde un tejado", apreté la mano de Shizuo, que aún estaba entrelazada con la mía. Sabía que estaba molesto, pero podía sentir que también estaba molesto conmigo.

Él me recogió y comenzó a caminar hacia la puerta. "Gracias Shinra, pero creo que puedo tomarlo desde aquí," Shizuo rápidamente se fue, de mi cuerpo en sus fuertes brazos.

Tan pronto como estuvimos a una buena distancia de la casa de Shinra, Shizuo me frunció el ceño. "¿Qué le dijiste Izaya?" Sonaba frío y serio. Él quería una respuesta, y la quería ahora. Aparté mi cara de la suya. Iba a ser lo más determinado posible, hasta el final. "¡Izaya, dijiste algo sobre suicidio! ¡No estoy jodiendo! ¿Qué dijiste?"

Shizuo agarró mi rostro con fuerza, y me hizo enfrentarlo. Él respiró hondo y comenzó a hablar en un tono de calma. "Izaya. Me preocupo mucho por ti. ¿No recuerdas los últimos par de días?" Miré sus ojos marrones dorados completamente en silencio. Él suspiró.

Antes de que pudiera predecir su próximo movimiento, me besó. Sus labios fueron enérgicos. Me inclinó para que mi espalda pudiera ser empujada contra la pared más cercana, que estaba en la entrada de un callejón, para que no nos vieran. Envolví mis piernas alrededor de las suyas débilmente. Se lamió el labio inferior, pidiendo una entrada, que rápidamente le concedí. Su lengua buscó en la caverna húmeda de mi boca. Nos quedamos así, en un bloqueo de labio, durante al menos unos minutos, hasta que rompí a respirar. Las mejillas de Shizuo estaban completamente de un tono color rosado, y las mías, por lo que pude ver, eran de color rojo tomate.

"¿Qué le dijiste a Shinra?" Shizuo repitió, sacándome de mis pensamientos aturdido. Lo miré directamente a los ojos, perdiendo de repente todo el desafío que tuve cuando Shizuo me devolvió la mirada con una mirada mezclada con la lujuria y la molestia.

"Le pregunté a quién le importaría una mierda si estuviera vivo o no", los ojos de Shizuo se abrieron con sorpresa. Me abrazó con fuerza contra el edificio que fui empujado. Pude sentir lo herido que estaba por esa declaración. Sin embargo, sabía que no dejaría de preguntar hasta que se lo dijera, así que no tuve elección.

Solo esperaba que no tomara en serio la advertencia de Shinra.