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○●Las lágrimas del bebe se asoman al ver a su hermano siendo vendido, todos querían obligarlo a permanecer en ese infierno. Las niñas juegan en los columbios, los espíritus se despiden en un pequeño motel de la calle 53 en Japón.
Las llaves del baño del piso número 6, lloran sin parar, el agua se vuelve celeste y la princesa del cuento de hadas se vuelve tan irreal en cada página que es superada. Los animales del museo de la calle 93, lloran sin cesar porque observan como serán puestos en venta antes de la madrugada del 93.
— Mamá, por fin seré liberado.—Le dice un emocionado JiMin.
—Por favor, no dejen que vean a traves de las cortinas.- Le contesta su madre.— Por favor, no vuelvas a pisar este infierno.
"Hey chico, tu madre esta en problemas", susurra Don Ramón junto al joven sicario de la habitación 322, ellos no saben que todos serán asesinados por el delincuente de la habitación 93 del motel de la hilera izquierda, a las 9:33 pm.
La oscuridad se llevó todo lo que la luz robo, queriendo devolver la felicidad solamente devolver lagrimas y los sentenciaran a ahogarse con el labial Mac que compro la pequeña Carmen en el año 96.—No soy un niño pequeño, podre conquistarlo. — Se alienta el pequeño Jimin.- Porque yo se deletrear, yo sé leer y soy grande.
Esta bajando las escaleritas con su vestidito rojos comprando en la tienda de la esquina, sus zapatillas están sonriendo y un pequeño lazo que su hermana le quiso obsequiar para que no la olvidara, contando los segundos y listo para que vengan por su corazón.
Y aunque las horas pasaron, aunque ese mismo viernes la esperanza le decía "quieto, el vendría", ese precioso ser humano ese día lo dejo plantado y esperanzado, lo obligo a permanecer 48 horas asfixiado por el trasero de la Señora Celeste.
Su corazón dolia, no se podía romper porque moriría y el no quería morir sin probar los labios de ese caramelito de miel.
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Dollhouse;kookmin.
Fantasy"Solo debes seguir las reglas para no arrastrarlo hacia el infierno".