Prince → ChanLix.

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En un día normal de trabajo, Chan se encontraba realizando algunos contratos para los socios japoneses que estaban interesados en asociarse con los surcoreanos.

Llevaba varios días en los que no salía a despejar su mente de tanto trabajo, sus amigos se la pasaban rogándole para que los acompañara aunque sea a beber algo, por mas que el mayor quisiera no podía dejar el trabajo a un lado y menos teniendo a su padre como el jefe de la empresa. Tenía escasos recuerdos de sus padres pasando tiempo juntos, para ellos el trabajo es primero que sus hijos, siempre ha sido así.

Sus pensamientos fueron interrumpidos cuando escuchó la puerta de su oficina abrirse viendo a sus mejores amigos entrar con una bolsa cada quien.

-Hora de comer.- Murmuró el de piel morena dejando una bolsa sobre el escritorio del más alto haciendo a un lado una montaña, literalmente, de papeles por firmar.

-¿Si saben qué hay una habitación adecuada para comer?- Cuestionó Chan haciendo a un lado su portátil para darles más espacio a sus amigos.

Una risa bastante sonora inundó la oficina colocándose a un lado del moreno.

-Es más divertido estar aquí, podemos hablar cómodamente sin que otros nos escuchen y empiecen con sus estúpidos comentarios.

El moreno se encargó de sacar la comida de las bolsas mientras el de cabellera rubia acercaba dos sillas al escritorio para poder comer mejor, ellos no iban a hacerlo de pie sabiendo que todo el santo día se la pasaban de un lado a otro por todo el edificio; ellos merecían un buen descanso.

Durante la hora de consumir sus alimentos, los dos chicos mantenían una interesante conversación sobre un lugar al que se la pasaban frecuentando después del trabajo, y Chan... Seguía trabajando.

-¿Así que hoy irás al bar para ver a Seungmin?- Comentó el menor tomando de su bebida.

-Sí, espero y hoy no me ignore, ya van dos veces que quiero invitarlo a salir pero... Siempre fracaso, Jisung.

-Es lógico que fracases en invitarlo, Changbin, te ignora porque te la pasas coqueteando con sus compañeras de trabajo que son Chaeyoung y... ¿Mimi?

Changbin rodó sus ojos comiendo una pierna de pollo con ayuda de unos palillos.

-Primero, no es "Mimi" es Momo... Segundo, no les coqueteo; simplemente les hablo como el caballero que soy.- Jisung sólo reía ante lo que Changbin decía mientras comía una patata frita.- Y tercero, no creo que tú tengas suerte con el otro mesero.

-Para qué lo sepas si tengo suerte, tengo pensando en invitar a Minho a tomar un café ya que él no se anima en invitarme, así que hoy te acompañaré para preguntarle qué día tiene libre, sólo nos quedan tres horas más para salir de esta prisión, sin ofender Bang Chan.- Se disculpó el menor mirando al mayor, dándose cuenta de que aún seguía tecleando en su portátil.

ChangBin le lanzó una patata frita a Chan para golpeándole el hombro con ésta, fue en vano, parecía un robot que sólo movía sus dedos al teclear.

Por otra parte, Jisung se levantó de su silla colocándose frente al mayor quitándole las manos del teclado y cerrar la portátil con su diestra logrando capturar la atención de Chan quien se encontraba de mal humor, a parte de estar estresado.

-¡¿Por qué hiciste eso Han Jisung?! Estaba por finalizar las gráficas de las acciones realizadas en este mes...- Alzaba su voz a medida de que hablaba, en eso el moreno se levantó de la silla colocándose a un lado de chico de cabellera rubia estando ahora los dos frente al mayor de cabellera castaña oscura.

-¡Ya deja de trabajar!- Hablaron los menores al uni sonido haciendo que Chan guardará silencio.

-Amigo, sabemos que tienes mucho trabajo y que tu padre te está presionando con los contratos, papeles por firmar, gráficas y todas esas mierdas... Pero entiende, has trabajado lo suficiente y te mereces un buen descanso.

Chan se limitó a reír por lo último que Changbin había dicho logrando quitarle a Jisung la portátil para seguir trabajando.

-Desde que tengo el cargo de vicepresidente desconozco el significado de la palabra descanso.- Sin mirar a los dos realizaba algunos ajustes a las gráficas antes de mandarlas por correo.- Y no creo que un bar sea la mejor opción para relajarme, sólo se trata de beber sin ningún otro que hacer.

-Te equivocas, no es un bar cualquiera.- Está vez habló Jisung sentándose en la orilla del escritorio mirando de reojo a Changbin.- En ese lugar, además de beber, puedes tener una agradable compañía.

Como si esas palabras fuesen mágicas, Chan apartó su mirada de las gráficas para ver a sus dos amigos intrigándole lo último, les regaló una mirada para que continuaran.

-Ese lugar me lo recomendó Hyunjin.- La voz de Changbin capturó los ojos de ambos mientras caminaba por el lugar.- Me comentó que el primer día que visitó el bar tuvo la oportunidad de hablar con el dueño, éste le comentó sobre cómo tratan a los clientes y que incluso tú mismo puedes elegir a quien quieres como acompañante durante la noche... Hyunjin investigó a ese hombre y dice que es una persona muy importante en el mundo de los negocios, tanto en China como en Japón, Corea, Tailandia e incluso en Estados Unidos.

Bang Chan arqueó su ceja quedando intrigado viendo cómo Changbin manipulaba con sus manos una esfera pequeña, que era parte de la decoración del lugar.

-¿Y ustedes cómo escogieron a su acompañante?- El mayor recargó un poco su espalda en la silla llevando su mano a su barbilla, acariciando ésta con su dedo índice manteniendo sus piernas cruzadas.

-Cuando yo fui por primera vez no tuve la oportunidad de hablar con el dueño, pero Jisung sí... Incluso le dio una revista, ¿no es así Han?- Ahora las miradas fueron directo al rubio quien tuvo la obligación de levantarse caminado hacia Changbin, quitándole la esfera para ahora ser él quien juegue con ella.

-Si es la primera vez que asistes a ese lugar y tienes la oportunidad de hablar con el señor Wu, él mismo te entrega una revista para que escojas a la persona que quieres como compañero o compañera; viene su nombre, edad, nacionalidad y algunas fotografías, yo no quise a ninguno porque mis ojos se fijaron en el lindo mesero llamado Lee Minho, pero no niego que cuando vi en la revista a los chicos y chicas de la sección "especial" me dejaron totalmente impactado.

Y ahí fue cuando la curiosidad de Bang Chan aumentó.