Deseo Concedido (Michael Jackson y tu)

CAPÍTULO 3

Un incómodo rayo de sol se reflejó en mi cara. Estaba un poco confundida, no recordaba muy bien que pasó anoche, hasta que vi mi abrigo levantado y sonreí para mis adentros. Habia sido una noche extrañamente romantica. Él tenía razón, todavía seguimos siendo los mismos jovenes de antes.

Me senté en el borde de la cama y estire un poco los brazos con un  largo bostezo, me colocó mis pantuflas y me dirigí a la habitación de París. Al llegar escuchó risas dentro de este.

Abrí sigilosamente la puerta sin hacer ningún ruido y me asomé un poco y mis ojos no podían creer lo que veían, Michael aún estaba aquí y estaba haciendo reír a París, creo que estoy soñando. Sonreí y me dispuse a salir, pero ya me habían descubierto.

- Penny, querida. Entra eres bienvenida.- dijo Michael

-Michael, ¿que haces aquí?- pregunté alegremente sorprendida.

-Pues queria estar un rato con mi princesa.- dijo señalando a París, quien aún reía.

París por un momento paro de reír y me observó curiosamente y luego pregunto.

-Mami, ¿por que llevas tu abrigo levantado?- Me sonroje al darme cuenta y Michael me guiño un ojo con una mirada pícara.

-Pues anoche pasó algo realmente emocionante e inesperado, mi princesa.- dije mirando fijamente a Michael.

Me acerqué a la cama de París y le acaricie una de sus mejillas. Michael me halo para atras, haciendo que me sentara en sus piernas. París rió divertida.

-Me gusta que actuen de esa manera, eso me da a entender que están bien. ¿Están bien, verdad mami?- dijo París

No quería decirle que no estamos del todo bien, había conflictos que arreglar, pero sería una mala madre al arruinar este hermoso momento con mis bipolaridades. Sabia que no estamos bien, pero lo que paso anoche me dio una iniciativa de que sí podíamos salvar nuestro matrimonio. Miré fijamente a Michael y respondí.

-Claro, estamos bien.

                         *****

Luego de estar con París y Michael fui con Prince, quien aún dormía profundamente y no quería ser despertado. Al verificar que todo estaba en orden con él, me dirigí a mi habitación para ya preparme para este nuevo día.

Al entrar, encuentro a Michael con un álbum de fotos en sus manos y otros dos encima de la cama.

-¿Que álbum ves?- dije acercandome.

-El de nuestra boda. Me encanta verlo. Te veías muy hermosa con ese hermoso vestido blanco. Parecias una princesa, mi princesa. 

-Y siempre lo sere, su princesa, señor Jackson.

-Pero a una princesa que le he causado mucho daño.- dijo bajando su rostro.

-Pero eso ha quedado en el pasado. Vamos a superar y olvidar todo y seremos felices como siempre soñamos, te lo prometo.

Nos miramos fijamente durante unos minutos y llegamos al punto de besarnos, pero fuimos interrumpidos por el sonido de la puerta.

-Mami, papi. ¿Estan ahí dentro?- dijo Prince detrás de esta.

-Claro que están ahí dentro, tontito.-dijo París tocando otra vez.

Michael se paro y al abrir, Prince se lanzo a sus brazos y comenzo a jugar con su largo cabello.

-Sabes cuanto te he extrañado, papi. Ahora podremos jugar al canasto, verdad.- dijo Prince

Michael no respondio, pero Prince no hizo caso, pues París lo llamó a ver uno de los álbumes.

Los niños dejaron los álbumes por un momento y comenzaron a jugar con los juguetes que habían traido. Una de las muñecas de París se cayo debajo de la cama, pero en vez de haber sacado a su muñeca, sacó una caja color crema que decía Penny's memories.

-Mami ¿Qué es esto? - dijo París aún mirando la caja.

-París, querida, has encontrado mi tesoro escondido. Ven les mostraré que contiene.

Prince soltó sus juguetes y se acomodó Junto a París, se veían muy emocionados por saber que contenía.

La destape cuidadosamente y recuerdos de mi niñez volvieron a mí. Fotografías de mi madre y mis hermanas, una de mi padre, de mi niñez contenía esa olvidada caja.

Prince no aguantó la curiosidad y sacó algunas fotos, Michael y París lo siguieron.

Quedo una fotografia que presentaba a mi madre con tres niñas, una en sus brazos --- esa era yo --- mi hermana Vivien, recostada de su hombro y mi hermana mayor Dolly sentada en el viejo portico; las tres posando delante de una vieja casa. Detrás de la fotografía decia 15 de julio de 1990. Greenacres, Inglaterra.

-¿y esta cajita, mami?- pregunto París, sosteniendo en sus manos una pequeña cajita roja.

-Esa cajita contiene un hermoso regalo que me hizo mi madre cuando tenía tu edad.

La coji de sus manos y la abrí, la cual contenia un collar dorado con una pequeña lámina plateada en forma de corazón.

-Te la regalaré, pequeña, porque se que tienes la responsabilidad de cuidarla así como lo hice yo.- dije al colocarla en su cuello.

Los ojos de París brillaban de emoción al acariciar el pequeño corazón plateado.

-¿Y para mi que tienes, mami?- dijo Prince extendiendo su mano en señal de recibir algo.

-Pues para ti, tengo muchos besos.- dije llenandolo de besos.

Michael me toco el hombro y me enseñó una fotografía.

-Nena, ¿recuerdas ese día?- dijo al mostrarme la foto.

Dejé por un momento a Prince y me volvi a Michael. La tome en mis manos y una pequeña sonrisa se asomo en mis labios. En la foto estabamos Michael y yo embarrados de lodo; ese día supimos que sentiamos lo mismo.

-Te amo, Penny. Siempre lo haré.- susurró Michael en mi oido.

                           ***** 

Esa noche, Michael y yo fuimos a cenar fuera de casa y hablamos sobre anécdotas del pasado y otras cosas importantes de nuestras vidas.

Al llegar a casa, me carga en sus brazos hasta la habitación, donde me quedé dormida en sus brazos, en los cuales me sentía segura y a salvo.