No tengas miedo.
Y despliega esas hermosas alas que posees.
Dices que te encanta la libertad,
pero parece que estuvieras presa de ti misma incluso antes de nacer.No lloras, no ríes, no bailas, no gritas, no eres tú.
Eres invisible porque tu misma has sido jueza de tu propia sentencia.Busca la llave de tu corazón,
suelta las cadenas,
y dale una oportunidad a tus alas para desplegarse,
y a tu corazón para que sepa que a partir de ahora es libre.Si tienes un sueño protégelo,
no renuncies a él,
no renuncies a aquello que puede hacerte feliz,
porque la felicidad es el mejor regalo que te puede ofrecer la vida,
así que agarrala con fuerza y no la dejes ir.Sueña aunque sea con las alas rotas,
porque es lo unico qu te vas a llevar,
y eso es lo mejor de todo.