Sofía sacudía la cabeza mientras su amiga volvía a poner las puntadas, yo tenía la cabeza girada a un lado y observaba por la ventana del departamento.
—Si no te cuidas puedes atrapar una infección y será peor —dijo la doctora cortando el hilo y terminando su labor.
—Tropecé en la oscuridad de la noche —dije con desdén—. Esta vez no fue autoinfligido.
Sofía me miró incrédula, lo vi de reojo, la doctora dejó unas pastillas para el dolor, la inflamación, para evitar infecciones y se retiró.
Observé el brazo, se había hinchado y lo sentía tenso.
—No te creo eso de que te caíste —comentó con seriedad.
—Lástima —dije con desdén y me levanté para ir a la cocina.
—Lisa, no puedes hacer eso con Orpheo aquí, si algo te pasa la PoliFem no dudará en hacerlo responsable.
Bufé frustrada, eso lo sabía, saqué una taza y me preparé café.
—Orpheo me lanzó por los aires así que... Literalmente sí es responsable —susurré poniendo dos cucharadas de azúcar.
Sofía me miró con sorpresa.
—¿Cómo que te lanzó?
Hice girar los ojos, bebí un poco del café antes de fruncir el ceño, sabía a agua de calcetín.
—Tiene terrores nocturnos o pesadillas, intenté despertarlo y pum, la mujer maravilla voló por los aires —conté con sarcasmo.
Sofía cruzó los brazos y se recargó en la tarja.
—Tal vez no fue buena idea.
—¿Sabes qué otra marca de café no sabe a agua de calcetín? Esta últimamente es nefasta —pregunté tirando el contenido de la taza al drenaje.
Sofía frunció el ceño.
—Tuviste un ataque.
Lavé la taza después de hacer a mi amiga a un lado.
—Necesito encontrar algo que hacer con Orpheo, a este paso voy a terminar por volverlo loco.
—No estás loca, Lisa —dijo mi amiga en ese tono de tristeza que odiaba.
—Zafada, inestable, cucú; escoge un término, debo encontrar un punto medio... ¿Ya saben qué será de él?
Sofía miró hacia el pasillo, seguramente quiso reiterar que Orpheo estuviera encerrado en la recámara.
—Si la prueba de ETS sale limpia puede que lo regresen con Monique... Si no, irá directo al basurero —susurró.
Crucé los brazos y la miré con hartazgo.
—Un infierno u otro —espeté.
Sofía se mostró nerviosa y arqueé una ceja.
—Hay una tercera opción pero es la más ilegal y peligrosa. —Le hice un ademán para que siguiera explicando—. Centauria.
Abrí los ojos con sorpresa.
—Ilegal y peligrosa se queda corto.
Sofía asintió.
—Chiara y Elliot lo hicieron con una pareja, dicen que es lo mejor para Orpheo dadas las circunstancias.
Bufé y gruñí.
—Beatriz se libró de nuevo, ¿eh?
Sofía sacudió la cabeza con tristeza.
—El caso ni siquiera llegó a tribunales, a este paso deseo que regrese con Monique.

ESTÁS LEYENDO
Quebrado
Krótkie OpowiadaniaReto de Mashup. Lisa jamás había tenido que lidiar con alguien más quebrado que ella, pero cuando la vida la arroja a la realidad que vive un rescatado de trata de personas, tiene que aprender a controlar sus demonios para ayudar a otros.