No lo pienses.

Capítulo 2

Siempre he creído que desde que terminé con Roberto algo se rompió dentro de mí, no sé si fue porque me engañó y la niña tierna e inocente se convirtió en alguien seria y un poco amargada o tal vez fue el hecho de que una semana después,  como dice mi abuela  "robo mi inocencia". No me juzguen, estúpidamente no sabia mucho de la vida en ese entonces, ahora todo es completamente diferente.

A raíz de lo sucedido, aprendí muchas cosas en cuanto a hombres, por ejemplo, cada que un hombre te envíe un mensaje tratando de hacer platica y unos cuantos minutos después te invita a salir significa dos cosas: verdaderamente no tiene amigos o sólo quiere acostarse contigo... o tal vez una combinación de ambos, quién sabe. Y claro, no todos los hombres son iguales, pero la mayoría son unos completos patanes, y absolutamente todos alguna vez harán algo que te lastimará, así que nosotras tenemos que ser muy fuertes, imaginar todas las posibles consecuencias, hasta las más improbables así el impacto no será tan fuerte.

Debo decir que... me volví una zorra. Así como lo leen, aunque debo admitir que me divertía mucho. Todo empezó cuando entramos a el segundo año, a mis amigas y a Roberto les tocaron salones distintos al mío, eso hacía complicado ver a quién creo/creían que era el amor de mi vida.

En este año me tuve que acostumbrar a verlo con otras, ver como se besaba con chicas que no eran yo... Nunca en mi vida había sentido lo que era odiar hasta ese momento. Lloraba cada noche... hasta que decidí que era momento de olvidarlo.

Conocí a Julian, un compañero de Leyla, mi amiga desde que entré a la escuela, eramos casi inseparables junto con Julia.

Estaba sentada en el salón de Leyla, en el asiento de Rosy, una nueva amiga que hicimos, cuando julian llegó.

-Deberías sentarte mejor en mi lugar, Rosy se enoja cuando te sientas en el de ella- me dijo riendo.

-No te preocupes, en cuanto llegue me quito, además, mi clase ya casi empieza- me puse de pie- Leyla, ¿te espero en la salida? - el chico no dejaba de verme, dios, eso me ponía tan nerviosa.

- Sí, si salgo primero yo te espero.

-Super, me tengo que ir

- Adiós, amiga- me gritó Julian, solo me giré a sonreirle, me daba bastante pena.

Con el tiempo Julian y yo nos hicimos amigos, la verdad me atraia mucho, pero sabía que tenía novia, no quería arruinar eso y menos cuando escuché una conversación que tuvieron Julian, Rosy, Leyla y un amigo suyo que la verdad me causaba un poco de risa. Me detuve antes de entrar a su salón pues escuché la dichosa platica.

- ¿Entonces cogerías con Jessica?- Preguntó el amigo... espera WHAT?!

-No lo sé...- contestó Julian

-Se ve que te atrae

-Me gusta su cuerpo y todo... yo creo que sí

-Pero tienes novia, cabeza hueca - dijo Rosy

-Sí, y la verdad Jessica sufrió mucho con su ex novio - dijo Leyla y me dio un vuelco en el corazón, así que en ese momento entré.

-Hola, ¿de qué platicaban?- dije como si nada y la verdad es que soy muy buena fingiendo, nada de principiantes.

- Aquí nuestro amigo Julian nos contaba sobre a quién le gustaría darse... ¿Te gusta Julian? - pregunto el amigo del que no recordaba su nombre... pero ¿Qué?

-¿Qué?... Por supuesto que no- Dije avergonzada- cómo creen... tengo que irme, chao -  salí corriendo antes de ser bombardeada con preguntas que no sabría responder.

Días después Julian me sacó de clases, caminamos por toda la ciudad hablando de todo y de nada a la vez. Me contó su primera vez y yo la mía... No puedo creer que la mayoría de los hombres pierdan su virginidad en un baño publico... o al menos los que conozco.

- ¿Tú me puedes explicar por qué los hombres engañan?- Pregunté un poco timida

-No te puedo decir una razón exacta... solo sé que nos gana la calentura

-Pero... bueno, yo no me considero la persona más hermosa del mundo... vamos, ni siquiera me considero linda o así, pero creo que la persona con la que me engañaron estaba peor, y no quiero ofenderla, solo digo que qué ven los hombres en otras si tienen algo bueno

-Yo solo te puedo decir que para ponerle cualquier hoyo es bueno - ouch - si solo queremos coger, no nos importa con quién sea

-Oh- no supe que decir, me quedé analizando las cosas

Y en ese momento tomó mis mejillas y me besó, no lo esperaba y no me importó en ese momento su novia o Roberto, solo quería romper esa atracción sexual que tenía hacía él, porque en ese momento lo supe, sólo me atraía sexualmente. Y pues sí, amigos, fuimos a un bendito y tuvimos sexo, el mejor de mi vida hasta ahora, aunque fuera mi segunda vez.