《I》

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Conocer nuevas personas, experimentar nuevos ambientes, descubrir diferentes personalidades y formas de comportarse. Llegar a un lugar nuevo es una experiencia enriquecedora, más no sencilla. Entrar a primer semestre de la universidad sin duda era algo que ponía de los nervios a Kim Taehyung, y el hecho de que no conocía a absolutamente nadie en toda la ciudad solo empeoraba la situación. Sin embargo, para Taehyung, aquel lugar significaba mucho más que nuevas personas, ambientes y personalidades; aquel lugar significaba el inicio de una vida que estaba deseando construir. Una vida llena de libertad, independencia y fotografías, y por tanto, momentos felices.

Porque para Taehyung la fotografía era sinónimo de felicidad y debía alejarse de todo aquello que se la quitara.

Por eso, hizo todo lo posible para irse.

Así fue como terminó a kilómetros de su antigua residencia, alejado de todo aquel conocido y a punto de ingresar al lugar donde pasaría sus próximos cuatro años, si tenía suerte.

Unos cuantos meses atrás, Kim Taehyung aplicó para ser poseedor de una beca en todas las universidades que pudo y, para su beneficio, fue aceptado y becado por la universidad especializada en artes más importante de Corea del Sur, ubicada en la capital, bastante lejos de su casa. Pero eso no estuvo ni cerca de detener al castaño, en realidad, solo lo emocionó más. Entre lo que más deseaba, estaba el alejarse de las personas que le impedían avanzar y, para Taehyung, aquellos que conocía en Daegu eran dichos impedimentos. Sabiendo que sus padres no apoyarían su partida, ahorró todo lo que pudo durante el tiempo que le quedaba antes de su ingreso a clases y yendo en contra de todos, se marchó sin importarle nada más.

Y esa decisión lo traía a la gran entrada de la que actualmente sería su universidad, a punto de encontrarse directamente con el decano para hablar de "asuntos de vital importancia" que Taehyung, en realidad, desconocía. Entró en las instalaciones y con la ayuda de un pequeño mapa y las diferentes indicaciones situadas por toda la planta, logró dar con la sala correspondiente, la cual era custodiada por una mujer sentada tras un escritorio, probablemente su secretaria.

—¿Necesita algo, joven? —dijo, con una grande y blanca sonrisa.
—Ah, sí. El señor Choi me citó en su oficina para organizar los últimos puntos de mi inscripción —respondió el castaño, con una sonrisa más discreta—. Y, por cierto, mi nombre es Kim Taehyung.
—¡Oh! ¿Kim Taehyung? ¡Un gusto! El decano está encantado con su trabajo. Es realmente especial encontrar talentos tan refrescantes como el suyo. Entre de inmediato, está esperándole —dijo la mujer con emoción bastante notable mientras señalaba la puerta a la oficina con su mano.

Él no podía salir de su asombro ¿De verdad su proyecto le había gustado tanto? Sí, se había esforzado y sí, era de sus trabajos favoritos y por esa misma razón lo había escogido, pero que una persona tan importante como el decano de aquella universidad le gustara su proyecto no dejaba de ser abrumador.

—El gusto es mío y muchas gracias por sus palabras —dijo el castaño para luego tocar la puerta de la oficina y abrir la puerta. Al hacerlo, encontró a un hombre imponente, con un traje probablemente muy caro, sentado detrás de un escritorio—. Buenos días, mi nombre es Kim Taehyung. —El hombre levantó la mirada del papeleo—. Usted me ha citado.

—Es un placer al fin conocerlo en persona, joven Kim —respondió el decano con una sonrisa.
—El placer es mío, señor Choi. —Sonrió amablemente en respuesta.
—Bien, para empezar, ¿qué le ha parecido la universidad? ¿Qué tal las residencias?
—Ambas instalaciones tienen un ambiente agradable, me inspiran seguridad. Aunque, sobre las residencias, no me fue permitido entrar a mi respectiva habitación. Me fue solicitado un carnet de estudiante.

Forgotten Memories | TaeJinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora