Cazadora de demonios?

Capítulo 12

Necesito despejarme... Necesito saber.... No..

Mis manos se dirigen a mi cabeza por un instinto de calmar el dolor.

Trato de tranquilizarme y camino lentamente hacia el jardín de rosas que se encontraba fuera del Castillo.

Empiezo a recordar a la joven que se encontraba en el árbol... Las ramas la sostenían.. Como un cuento de hadas, esperando por un príncipe.

¿Cómo se llama?

—Elizabeth! Ven! —Gowther? Esa era su voz, Nunca debí dejarlo haci de la nada—. Elizabeth... Te dije que te iba a guiar donde tu padre, no?

—Mi padre... Me guiaras a el —un centenar de emociones surgieron en mi, por fin iba a ver a mi padre, podré cazar junto a él al peor demonio de todos...

—Si —tomo mi mano y caminode regreso al castillo.

Tenía muchas preguntas para el.. En especial porque conoce a mi padre? Y quien es la chica?

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Estaba preparada para esto? Lo iba a ver y saltaba de emoción... Por fin

Abrí las puertas del gran salón y vi la silueta de mi padre, sin duda era el...

—P-padre —tartamudeo un poco, corro lo más rápido hacia el y le doy un cálido abrazo—. Te extrañe tanto

—Hija... No sabes cuanto me hacías falta, mi preciada hija —senti el abrazo de mi padre, un te quiero de parte de el era muy valioso.

—Podremos volver a casa —susurro.

—Respecto a eso... No lo harás Elizabeth —la mirada de Gowther era muy seria.

—Por que? —pregunto, realmente estaba confundída, vi una silueta oscura salir de la sombras sus ojos oscuros como la noche... Era un demonio—. Mel..iodas tú!

—La decisión es de ella, si se va o se queda —ese no era Meliodas, su expresión... No había una pisca de alegría en sus ojos, el no podía ser un demonio, el es un cazador...  Pero por que?

—Gowther! —lo miro buscando alguna respuesta.

—Debo irme... No quiero interrumpir su linda conversación —Meliodas se marchó con una sonrisa en su rostro que me dejó atónita.

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—¿Qué está pasando?! —grito desesperada—. Gowther!! Padre!!

Se que no debería gritarle a mi padre.. Lo volví a ver después de tanto tiempo pero necesito respuestas.

—Elizabeth dejame contarte —hablo Gowther, se acomodó sus lentes y me dirigió la palabra—. Hasta ahora tu vives una ilusión... La mujer que te crió cuando eras una niña fue manipulada por mi haciéndole creer que eras su sobrina.

—Que.. —susurro—. Entonces quien es mi familia, acaso Zeldris también fue manipulado...

—No, Zeldris es tu amigo.. Tu lo salvaste

—Y Meliodas es un demonio? —se hizo un nudo en mi garganta.

—Si —Gowther se levantó de su asiento y camino hacia mi—. El es peor demonio de todos... Prometiste que cuando lo encontrarás lo ibas a cazar.

El tenía razón.. Yo lo iba a cazar.

—Como sabes que el es peor demonio! —grito—. No eres uno!

—Si lo soy.. Yo se que el es demonio más cruel y despiado que a existido, el fue el único que pudo borrar mi magia, siendo yo conocido por igualarme en poderes al rey demonio.
—Mel.. Iodas —necesitaba más respuestas, pero tenía miedo de seguir cavando en este pozo sin fondo—. Es un demonio.. Necesito ir con el.

Salí de la habitación, y no hizo caso a las advertencias que me daban necesitaba encontralo. Como pude decir eso.. En frente de el.

Pero yo no sabía... Que el era un demonio.

—Meliodas! —abro la puerta de una de las habitaciones y ahí estaba sentada en una silla de madera.

Sabía que el iba a estar aquí. Lo sabía

—Hola —porque dije eso?—. Veo que estas aburrido.

—Mph! —hace una mueca.

—Lo lamento.. Enserio pero yo no sabía —se que esto es injusto, pero espero que mis palabras lleguen a el.

—Aqui me tienes —su mirada se dirigió a mi y se levantó de su asiento aun tenía sus ojos oscuros—. Dijiste que ibas a cazar al demonio más cruel... Aquí me tienes, porque no me matas ahora.

—Que hice.. Porque dije algo así—, Meliodas yo.. Yo —ya no tenía justificación—. Es verdad...se que lo dije, pero eres amable, compresivo y siempre me muestras una sonrisa, te conozco de hace mucho tiempo prácticamente desde que conocí a Zeldris y durante ese tiempo te conocí mejor y me di cuenta de que me gus.. Tabas...

—No es cierto! Cumpliamos misiones .. Y aunque nos conociéramos hace mucho tiempo aun antes de esta "misión" Tu no me Amas —eso es lo que realmente sentía el.

"Hazlo Elizabeth" "Hazlo"

Me acerco a el y lo primero que digo es "lo siento"

Mis labios se apagaron a los de el sintiendo su calidez.

Por un momento pensé que me rechazaría pero se apego más a mi y me abrazo con fuerza.

Era mi castigo?